Deadly Roses ●๋ [Drarry] ●๋

Cap. 20

Harry estaba extraño, eso Draco lo había notado con tan solo verlo durante las clases que compartían y en el gran comedor durante la comida, bueno, más extraño de lo que había estado antes, pero ahora que Draco sabía por qué, podía creer saber la razón de que su comportamiento haya cambiado. Harry parecía estar más distraído que de costumbre y eso no era algo bueno cuando estaban en el año de los TIMOS.

Draco también había notado que ahora Harry tosía con frecuencia como lo había hecho a principios del año pasado y la duda carcomía al rubio ¿Qué significa eso? ¿Harry, está empeorando?

Draco no había hablado mucho con Harry, pero no porque no quisiera, sino porque este último no había tenido tiempo, o eso era lo que él decía, y cuando se escribían, Harry evitaba el tema a toda costa, y al rubio todo eso lo preocupaba, pero cómo no iba a hacerlo, si cada vez más sus sentimientos por el pelinegro aumentaban, en lugar de disminuir y en el fondo lo destrozaban, porque sabía que Harry ya amaba a alguien y Draco estaba seguro de que ese alguien no era él.

Y cambiando de tema, Draco había recibido una carta de su padre, no mentiría diciendo que ver el nombre de su padre en la carta no lo sorprendió, porque sí lo hizo, pero no la abrió enseguida, sino que espero hasta que estuvo solo, no quería saber lo que decía, estaba seguro de que le regañaría y recordaría que no podía tener nada con Harry, porque seguía siendo menor y aún tenía que obedecerlo. Draco estaba casi seguro de que le amenazaría con repudiarlo si seguía con ese “enamoramiento tonto”, según su padre.

Sorprendido quedó, cuando la leyó y se dio cuenta de que decía que necesitaban hablar y que había agendado una reunión con él para el fin de semana en Hogsmade, Draco se puso nervioso, ¿de qué quería hablar?, sea lo que sea de lo que quiera hablar, no estaba listo, sí, ya había pasado casi un mes desde que tuvo la discusión con su padre, pero eso no significaba que se había mentalizado, ese día era miércoles, por lo que le quedaban tres días antes de la reunión.

¡No estaba listo!

¡Tres días no eran suficientes! Necesitaba mínimo tres semanas de anticipación, okay eso era exageración, solo necesitaba dos.

Estaba seguro de que entraría en pánico.

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Harry sabia bien que su aspecto era el de un muerto viviente, pero ¿qué se le podía hacer? Nada, estaba cada vez más cansado y sabía que su salud no iba para mejor. Había evitado tanto como podía las llamadas de sus padres, no quería que lo vieran de esa manera, no quería preocuparlo más de lo que seguro ya estaban. Incluso Ron y Hermione se habían dado cuenta de que algo no estaba bien con él.

¡Incluso Neville le había preguntado si se sentía bien!, se sentía mal por mentirle, pero no quería más personas preocupadas.

La tos se había vuelto una constante en su vida, otra vez. Pero en esta ocasión no era solo la tos y dolor en el pecho, sino que ahora era tos junto con pétalos y sangre, lo cual no lo hacía mejor. Ahora tenía que llevar con él a todas partes, un pañuelo para que no se dieran cuenta de que los pétalos era cada vez más frecuentes, no necesitaba que todos se dieran cuenta de eso. Sin embargo, sabía que su suerte no duraría para toda la vida, sabía que en algún momento alguien se daría cuenta, solo esperaba que no fuera pronto para que le dieran tiempo de inventar una excusa.

Harry también había estado evitando a Draco lo más que podía, no quería que le siguiera preguntando del tema, Harry no sabía hasta cuando podría ocultar sus sentimientos por el rubio.

Tanto Ron como Hermione le habían dicho que le dijera, que cómo podía estar tan seguro de que sus sentimientos no eran correspondidos, Harry no estaba seguro de eso, pero de lo que si era consiente era de que no podría resistir ser rechazado.