Capítulo 47 🚲

45 2 0
                                    

Un mes después.

Narra Géminis.

Suelto un resoplido. Estoy agotada, física como mentalmente.

Este último mes ha sido difícil.

God ha pasado por varios días crueles. Los dolores en su cabeza solo se intensifican con el paso de los días. El oncólogo le ha subido la dosis de medicamentos y ya está llegando casi al límite de lo permitido.

No creí que su estado se deteriorara tan rápido. Y eso me tiene aterrada, a cada segundo.

Hoy no es distinto, aún que presiento que puede cambiar.

Llego a la mesa, se ve bien ordenada. Veo varios platillos.

No escucho ruidos. Ni veo a Drew y Anne, ni siquiera está Ben.

— ¿God? —interrogo.

No recibo respuesta.

Me giro para ir hacia la cocina. Suelto un pequeño chillido.

Veo a mi ex novio con un pastel en sus manos, tienes velas encendidas. También están Drew, Anne y Ben.

— ¿Celebramos algo especial? —cuestiono desentendida.

A mi parecer, no hay una situación especial, al menos que recuerde.

— ¡Claro que sí! —añade mi mejor amiga.

Se acerca y me abraza.

—Es tu cumpleaños, Gema —completa Drew.

¿Hoy es 13 de junio?

Al parecer sí lo es.

—Yo... no lo recordaba, pero gracias.

Anne me suelta, después me abraza Andrew, luego lo sigue Ben.

—Pide un deseo, Géminis.

Miro a mi ex novio. Solo hay algo que deseo con toda mi alma.

—Deseo que para mi próximo cumpleaños, estemos todos juntos, los cinco.

No puedo evitar que mi voz no se quiebre. Apago las velas, analizo a mi ex novio.

Es increíble como me sigue sonriendo, lo hace siempre. Incluso cuando se muere de dolor por dentro.

—Es el momento de probar ese pastel —comenta Anne, muy emocionada.

God le entrega el pastel. Drew y Ben la siguen hacia la mesa.

—Tienes tantas cosas en tu mente, que te olvidaste que hace dieciocho años naciste —dice mi ex novio. Me abraza —, feliz cumpleaños, fiera Géminis.

Sonrío. Me aferro a su cuerpo, a su olor.

—Gracias, God. Todo está perfecto. Sobre todo si estás tú.

—Gem....

—Shhh, no lo arruinemos.

Ben se encarga de repartir el pastel. Todos recibimos una porción generosa.
Lo pruebo, es demasiado exquisito.

No nos quedamos mucho tiempo, ya es hora de ir al instituto.

God se queda en el sofá, mirando una carrera de la F1.

— ¿Ansioso? Se acerca la fecha.

—Estoy deseando que ya sea diez de septiembre.

—Yo también —modulo con emoción.

Esa misma noche se confirmó que la F1 tendría una gira por Norteamérica. Se correrá en Chicago.

Solo deseo que podamos ir. Sería cumplir un sueño más.

MI CHICO BUENOWhere stories live. Discover now