𝒈𝒆𝒏𝒕𝒍𝒆 𝒘𝒊𝒕𝒉 𝒎𝒆 𝒑𝒕. 𝟐 +𝟏𝟖

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Le devuelves la sonrisa a su reflejo "¿Puedo...?" acercando lentamente tus dedos al precioso instrumento.

"Adelante, está hecha para ser tocada" su mirada se vuelve más oscura.

Agachas la cabeza y sonríes tímidamente, sabiendo muy bien que él puede ver cómo te sonrojas en el espejo. Acaricias con los dedos el largo mástil y te deslizas por las cuerdas, provocando un zumbido fantasmal en la guitarra. Mientras sigues rasgueando, tus ojos se desvían hacia la pared, donde hay algo brillante que cuelga de un gancho. Tardas más de lo debido en reconocer que son unas esposas. Tus labios se separan y tus párpados se vuelven pesados. Sientes un cosquilleo entre las piernas. Oh.

Eddie se da cuenta de que te has congelado, ya no te interesa la guitarra. Sigue tu mirada hacia el objeto que roba toda tu atención. "¡Ja!", se acerca y los descuelga, sin querer asustarte. Tus ojos no se apartan del metal brillante, que parece aún más atractivo en las manos de Eddie. Se da cuenta de tu fascinación por ellos, y el hecho de que no huyas gritando le hace querer casarse contigo en el acto. Ve la mirada nebulosa y lejana en tus ojos y la reconoce de inmediato. Sus labios se curvan en una sonrisa pícara "Esta noche no, cariño" y los arroja al abismo de un cajón

"Pero...", tratas de objetar, de convencerle de que necesitas una demostración y de que estarías de acuerdo, pero antes de que puedas pronunciar otra palabra Eddie levanta una mano en señal de protesta. "Lo siento, cariño", toma tu barbilla entre el pulgar y el índice y te inclina suavemente la cabeza para que le mires. "Creía que querías ser suave", y con la otra mano te coloca el pelo detrás de la oreja.

Su cercanía, las palabras, su tacto... debería ser ilegal. "Yo... yo... ¡lo quiero! Quiero que sea suave... quiero... tú...", tartamudeas, haciendo que la sonrisa de Eddie sea más amplia y presumida. Le encanta lo nerviosa que te pone... pero le gusta aún más burlarse de ti.

De repente te suelta y da un paso atrás "¡Genial! ¿Qué tipo de pizza te gusta?", pregunta, dando un paso atrás hacia la puerta.

Estás un poco aturdida "Yo... ¿qué?"

"¡Pizza! Quiero decir, cocinaría para ti, pero podrías acabar muriendo virgen así que..." se ríe.

Te ríes, sin darte cuenta de que ser invitada a cenar era parte del trato. "¿Pensarías que soy rara si pidiera jamón y piña?" entrecierras los ojos, preparándote para una inminente burla.

"¿Ves? Sabía que eras un bicho raro, T/A" te lanza una brillante sonrisa. "¡Una de jamón y piña en camino!"

Se acostaron juntos en su cama, con la caja de pizza desechada en algún lugar del suelo. Había alquilado "Plan 9 from Outer Space", y los dos casi se habían ahogado de risa por la cursilería de la película de serie B. Cualquier nerviosismo que tuvieras sobre esta noche había desaparecido, era difícil sentirse nervioso estando arropada por Eddie. En el transcurso de la película, se habían convertido en una forma de vida unida. Sus piernas estaban enredadas, tu cabeza apoyada en su hombro mientras él apoyaba su barbilla en tu pelo. Eran como dos piezas de puzzle perfectas. Hacía rato que el sol se había ocultado, y la oscuridad sólo los hacía sentir más cómodos.

Pero en algún momento, se hizo más difícil concentrarse en la película. Te habías vuelto consciente de lo cerca que estaba su mano de tu trasero, y de cómo si movías la rodilla juuuuuy poco estarías rozando su polla. Sentiste que la habitación se calentaba, y pensaste que él también podría sentirlo cuando empezó a retorcerse un poco debajo de ti. Con un repentino arrebato de valentía, o quizás sólo desesperación, empiezas a arquear lentamente tu espalda. Tu movimiento constante hace que la mano de Eddie se acerque ligeramente a tu trasero. Sin embargo, antes de que pueda llegar a su destino deseado, clava sus dedos en tu piel, deteniendo tus movimientos. Te toma de la barbilla con la otra mano y te obliga a mirarle. "¿Qué pretendes, hm?", te pregunta con una sonrisa de satisfacción.

𝐨𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬| 𝐄𝐝𝐝𝐢𝐞 𝐌𝐮𝐧𝐬𝐨𝐧 /𝐉𝐨𝐬𝐞𝐩𝐡 𝐐𝐮𝐢𝐧𝐧 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora