BROKEN SOULS, 𝙙𝙧𝙖𝙘𝙤 𝙢𝙖𝙡𝙛𝙤𝙮

O22: inevitably ❞

—No existe otra manera de que el periódico la esté cubriendo —murmuró, ladeando su cabeza—. Ella está aquí hace dos años. El periódico...

Eleanor extiende su mano y Draco siente el toque de su piel cuando sus dedos rozan los suyos para tomar el papel.

Lo abre, apuntando sobre el— Es del año 2001 —habló con sorpresa—. Hermione aún no estaba aquí entonces...

Sus ojos se abren de par en par— ¿Granger ha sido cubierta todo este tiempo?

—Supongo —murmuró Eleanor, pasando por su lado para dirigirse al escritorio y apoyar el papel allí

Draco giró sobre sus talones, viéndola inclinarse mientras movía su dedos por sobre las letras como si creyera que ellas fueran producto de su imaginación.

Su cabello caía sobre sus hombros con gracia y recordó cómo se había sentido volver a tenerlo enrollado entre sus manos. La suavidad de cada hilo castaño humedecido por el sudor de su frente.

—Eso significa que entonces todo estuvo planeado... —la escuchó decir, haciéndolo frenar sus pensamientos.

Draco avanzó hacia ella, posándose a un lado mientras cubría su espalda con su cuerpo. Su mano extendida y apoyada sobre la madera mientras se inclinaba para oírla mejor.

—¿Incluso el que ella esté aquí? —preguntó él, inhalando suavemente cuando el olor a lavanda en su cabello lo hizo agonizar en sus recuerdos.

Ella suspiró, girando su rostro hacia él y provocando que quedaran a tan solo centímetros de distancia. Una distancia que él podría romper en tan solo un segundo si tuviera la valentía de hacerlo.

Mierda.

—Es una posibilidad —murmuró Eleanor, deslizando sus ojos a través de sus rasgos—. ¿Lo cree?

Y carajo, lo mataba... porque se necesitaba una severa habilidad para pasar de la voracidad a la necesidad en tan solo un segundo.

—Suena posible —le respondió, apretando sus labios—. Aunque, ¿de qué sirve todo esto? Ella no sabe nada... no hay manera de sacarle las palabras cuando el Suero ha sido una estrategia fatal.

Fue cuando tras sus palabras, los ojos de Eleanor se abrieron.

—¿Y si ella realmente no lo sabe? —susurró, frunciendo su ceño— ¿Y si le han borrado la memoria antes de enviarla aquí? Podría explicar que no sepa qué sucede con La Orden.

Apena controla sus impulsos cuando siente su aliento llegar a sus labios, cálido y familiar— No veo por qué querrían enviar a Hermione aquí sin recuerdos. Es algo que no cuadraría puesto que si la envían a esta fortaleza para tratar de golpear desde dentro ella... debería saberlo.

—¿Y si no? —respondió ella, y cuando su mano se movió sobre la mesa sus dedos rozaron los suyos— ¿Y si el punto es que ella no haga absolutamente nada?

El toque de su piel es un acto tan sencillo pero que pincha tan profundamente en su pecho; que daría la vida por seguir sintiendo aquel sentimiento apretando su corazón por el resto de esta. No le importaba el sufrimiento que conllevara volver a tenerla entonces, porque si era Eleanor quien tendría su pobre alma en sus manos, la dejaría hacer lo que quisiera con ella.

Lo que quisiera...

Ya no podía seguir escondiendo lo que su cuerpo sentía cada vez que se la cruzaba ya que cinco años habían sido suficiente tortura teniendo a la mujer de su vida danzando frente a sus ojos sin poder reclamarle los años de amor perdido.

Porque si... él se había convertido en el Lord del Mundo Mágico sólo por ella, y si se lo pedía, bajaría las nubes del paraíso y alzaría las llamas del infierno con tal de no volver a dejarla perder el brillo de sus ojos en sus brazos.