Capítulo 27

56 12 0
                                    

Jojolaaa volví.

Jeffrey Miller

No puedes renunciar a tu ADN

La mirada de todos estaba sobre mí, esperando a qué yo respondiera ¿Debía hacerlo? Podía solo irme y evitar, como acostumbro a hacer en esta situación.

Pero no podía, su mirada sobre mí quemaba, amenazante porque dieras estás estúpidas palabras.

—¿Entonces?

Desvíe mi mirada, soltando todo el aire que estaba reteniendo.

—Esta bien, Belinda—la mire por unos segundos y gire para verlo sonreír—Paso por tí a las ocho.

La chica sonrió como si acabase de ganar la lotería, dió un pequeño salto y asintió varias veces. Forcé una sonrisa y espere a desapareciera por las gigantes puertas de cristal perfectamente reluciente.

Esto era un completo error, no tenía que haber aceptado.

—Creo que debemos irnos, ya se hace tarde—se despidió la madre de la chica.

Espere a que salieran para hablar:

Lo mire y estaba con su estúpida sonrisa—¿Contento?

Paso una mano por su ya crecida barba y nego con una sonrisa en su rostro—Aún no, Jeffrey.

—No se que ganas con todo esto—lo mire, esa estúpida sonrisa seguia ahí, esa que dicen que yo heredé —Nunca estaré con ella, solo pierdes tu tiempo.

Camino hasta llegar a mi lado, colocando su mano sobre mí hombro—Creeme que no pierdo nada, ¿Querías ver de qué era capaz de hacer con tal de alejarte de esa chica? —tendió mi celular frente a mí—Fue más fácil de lo que pensé.

Cerré mis ojos, inhalando. Lo escuché caminar hasta desaparecer.

Que mierdas era tener que vivir esto.

—Jeff—Verónica se acercó intentando tomar mi mano pero la aparte de inmediato.

—¿Qué? ¿Ahora van a hacer como si les importará?—los mire a ambos y solté una risa, ¿Podían ser más hipócritas aún?

—Si nos importas Jeffrey—hablo Alessandro, aún sentado frente a mí.

—Claro— dije al levantarme.

—Jeff créeme que si...

Solté una risa sarcástica ¿Que dirían ahora?

—¿Si qué? ¿Si pudieran me ayudarán a sobrevivir en esta mierda de familia?—ella apretó sus labios mirándome—Aún si pudieran, no lo hicieran. Nunca lo han hecho.

—Eres un maldito egoísta de mierda Jeffrey—alessandro se levanto de la mesa poniéndose de lado de Verónica.

—¿Egoísta? Maldita sea Alessandro, no tienes ni idea de lo que es vivir con esta puta presión.

—Tú estúpido problema es que crees que los únicos problemas que importan son los tuyos, ¿Crees que vas a solucionarlos quejandote y desquitando te con la primera que se te atraviese? No, imbécil.

—Jeff—verónica dió un paso hacia mí—Somos tus hermanos, no somos tus enemigos. Papá es difícil, se nota que quiere hacerte la vida imposible, pero no por su culpa debemos llevarnos todo el odio nosotros.

Asentí, sin nada que decir. Odiaba darles la razón así que solo me gire para irme a mi cuarto.

Enciendo mi celular lo más rápido que puedo, desde que me subí a ese estúpido avión no he podido enviarle un mensaje a mi rubia. Al encender veo varios mensajes pero ninguno de ella. ¿No me ha escrito?

Más allá de la atracciónWhere stories live. Discover now