Más allá de la atracción

Capítulo 24.

No sé ni por dónde comenzar, gracias a tod@s los que han estado desde el capítulo 1. Creo que vivo diciéndole gracias por todas las redes sociales posibles, pero no me cansaré de hacerlo.

⚠️ ADVERTENCIA DE CAPITULO +18⚠️

Perdón amigos que tendré que ver a la cara luego de esto.

C a p i t u l o  2 4

Es algo que debías informar.

Emmy Jobs.

Quizás  el momento en el que las palabras abandonaron mi boca fue algún sinónimo de valentía, y quiero decirles que todo eso se evaporó como se desgasta la llanta al rodar al pavimento.

Si, escuchar a Jeff hablar de autos por estos veinte minutos me ha instruido en algo.

Y gracias a todas las fotos que me ha mostrado en su celular hasta ahora mis favoritos son los Bentley.

—Te quería muy bien ese auto—dijo sonriendo.

—Es el único que ha llamado mi atención.

—Creo que estoy envidiando a ese auto.

Reí ante tal cosa.

Después de un rato de charla de autos añadió:

—Por supuesto, los Ferrari no tienen tal cosa—nuevamente no sabía que decía.

Los autos son tan complicados.

—¿Pero tus favoritos son los convertibles no?

Asintió—Este es un convertible.

—Y la empresa de tu padre, ¿Que hace exactamente?

Me miró por unos segundos y volvió su vista a la carretera.

—Somos la empresa número uno del mercado en autos, compra  venta y publicidad. Estamos asociados con ConoXpress, que es empresa de envíos, la mejor por cierto—sonrio—Y acabamos de cerrar un contrato con los Mons, ahora son nuestros socios.

Lo interrumpí—¿Mons? ¿Los padres de esa chica?

Asintió—Los padres de esa chica.

Los padre de la chica de la revista.

—No tienes nada de que preocuparte, Belinda es parte del pasado. Tu eres mi presente y espero mi futuro—añadio.

Fue imposible no sonreir. Aunque no respondí solo con mirarlo ya decía todo.

—¿La quisiste?—pregunte.

Solo tenía curiosidad.

—En su momento la llegue a querer mucho.

—¿No era el momento adecuado?

Arrugo su frente y negó—No, yo creo que todas las personas son adecuadas en el momento que están pero va más allá de caricias o sexo, se trataba de conexión y estabilidad. Algo que yo sentía que faltaba.