-¿Ahora que podemos hacer? -pregunto.

-Lastimosamente ahora mismo, no podemos hacer nada -dice y suelta un suspiro- estamos cansados, es mejor dormir.

-Odio que tengas razón -de repente me doy cuenta de que aún tengo sus manos entrelazadas con las mías, de forma lenta y suave las suelto -yo em... buenas noches Anna -digo para levantarme e ir al la manta en el suelo.

-¿Qué crees que haces? -dice- Blake, ni creas que vas a dormir ahí.

-Pero...

-Pero nada -me interrumpe- mejor ven aquí, en esa manta vas a tener frío y te sentirás incómodo, anda ven.

-¿No te molesta? -pregunto.

-Déjame decirte que aveces pateo.

Se me sale una pequeña carcajada y subo con Anna al colchón, ella se aleja un poco, seguramente quiere su espacio, me acuesto a su lado y la miro fijamente.

-Tienes unos lindos reflejos en los ojos, Blake -me dice, y siento mi corazón latir con más fuerza.

-Em... gracias -digo- saqué los de m-mi mamá...

-Vaya, yo ni siquiera recuerdo como se ve la mía -dice y al parecer nota mi cara de confusión- mi papá era un soldado y un día él... murió en una pelea con otro soldado, eso era cuando mi madre apenas estaba embarazada de mi... ella cayó en una gran depresión. Unos meses después de mi nacimiento ella solo... desapareció, dejándonos a mi y a mi hermano.

-¿Tienes un hermano?

-Si, su nombre es Peter -dice- es unos once años mayor que yo... cuando mi mamá se fue, mi tía Barbara se tuvo que hacer cargo de nosotros, hasta que mi hermano tuvo la edad suficiente para poder trabajar -yo la escuchaba atentamente- había ahorrado dinero para una casa, al cumplir la mayoría de edad pidió mi custodia legal y pasaron muchas cosas para que se la otorgaran, cuando al fin se la dieron él con algo de ayuda de mi tía compró aquella casa que tanto quería para ambos.

-Eso... creo que es increíble -digo.

-No tanto -con cuidado se acomoda para mirar hacia el techo- mi relación con él no era la mejor... es decir, aveces estábamos bien y otras veces no... y un día como cualquiera mientras volvía a casa... ese maldito apareció -vuelve a mirarme- al igual que a ti, me envolvió en esos globos y... creo que imaginas el resto.

-Si... -digo, en serio esta chica me tiene impresionado- y... extrañas a tu hermano?

-Aveces, si pienso en él -responde- me pregunto que estará haciendo... si me extrañará...

-Probablemente si -digo para animarla un poco- digo, son hermanos.

-Eso supongo -dice sin más- me gustaría haberme llevado con él como te llevas tú con Gwen.

-Si Gwen... -digo pensando- aveces peleamos pero... ya sabes, lo arreglamos, además de que no queremos problemas con papá...

-Oh... ya veo.

-Él... la golpeó hace unos días -digo mirándo al techo- no entendí muy bien la razón, ella no quiso explicarme. Creo que tiene algo que ver con sus sueños.

-¿Los sueños mágicos?

-¿Te habló de ellos?

-Si -dice en un tono extraño- al principio no lo creí...

-¿Qué te hizo cambiar de parecer? -pregunto y volteo para verla.

-Cuando me dijo que yo aparecía en sus sueños -ella también me mira a mi- dijo que estaba en una habitación blanca y lloraba... hago eso casi todo el tiempo...

-Mi mamá... ella era igual que Gwen -empiezo a decir- veía cosas, que los demás no... eso la agobiaba mucho y... ella...

-Tranquilo, lo entiendo -me sonríe- debió ser difícil para ustedes.

-Lo fue, aún lo es... mi padre cambió mucho desde que mamá ya no está -digo apenas- me duele cuando le pega a Gwen... y yo solo me quedo viendo sin poder hacer algo.

-Es que tienes miedo -me dice- lo sé, yo igual lo tengo todo el tiempo...

Veo como empiezan a cerrarse sus ojos, seguramente está muy débil y cansada por todo lo que ha pasado hoy... yo solo me quedo mirando los rasgos de su cara, la forma de su nariz y el color tan particular de su cabello... algunas personas consideran que el rojo no es un lindo color de cabello ya que es raro, por mi parte yo creo que en Anna se ve genial.

No sé que va pasar de nosotros, tal vez sea mi último día... y si lo último que voy a ver es a ella, entonces quiero memorizarme sus facciones...

₊˚⊹⋆.   𝐿𝑎 𝐶ℎ𝑖𝑐𝑎 𝐷𝑒 𝐿𝑎 𝑃𝑎𝑡𝑖𝑛𝑒𝑡𝑎   𓂃 ࣪˖   ᵀʰᵉ ᴮˡᵃᶜᵏ ᴾʰᵒⁿᵉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora