Capitulo 34

7.1K 765 92
                                    

Amelie

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Amelie

Algunos meses después..

Escucho gritos, veo pasar imágenes a mí alrededor. Me encuentro allí sobre una cama dando a luz y después de eso solo oscuridad.

Un llanto de un bebé.

Mis pasos corriendo lejos del palacio, hombres por todas partes con armas y flechas. Dispuestos a atacar.

He visto dos ejércitos acercarse a Gratea, incendiarlo todo y reducirlo a cenizas.

Me despierto de golpe, mi respiración es inestable, tiemblo en aquellas sabanas.

—Amelie, cariño ¿estás bien? —pregunta él—. ¿Es el bebé?

Intento controlar mi respiración.

—He tenido un horrible sueño —respondo aun horrorizada por lo que he visto.

—¿Qué clase de sueño?

—Uno muy malo, sobre Gratea, Kyrios creo que estamos en peligro.

Él me observa como si lo que acabase de decir no fuera algo nuevo para él.

—Soy consiente de que tarde o temprano Gratea entrará en una disputa por el trono, Lydia ha tomado fuerza en el norte. Mis hombres han sido enviados a reforzar la guardia con la frontera de Nordik y Agamme.

—No estamos a salvo aquí ¿verdad?

—Lo estarán, pero tendré que irme y acompañar a un ejército grande para tomar fuerza en otras tierras.

—¿Te iras? No puedes hacer eso Kyrios, ¿Qué sucederá conmigo? ¿Con nuestro hijo?

Él me toma del rostro y me sonríe.

—He pensado en como mantenerlos a salvo, lo estarán, solo confía en mí.

—Sin ti en el palacio, Melibea se aliará con personas para hacerme la vida miserable, no descansará hasta sacarme de aquí.

—Tú Eres la reina de Gratea, nadie puede hacer eso, quien lo haga morirá inmediatamente, ya nadie podrá pasar por encima de mis decisiones, nadie podrá hacerte a un lado. En estos meses todos han sido leales a mis normas y ordenes, incluso el reino

—No quiero que te vayas Kyrios. Por favor.

—Es necesario hacerlo Amelie, no puedo darle la espalda al reino, no puedo traicionar a todos y sentarme en el trono sin hacer nada. Las consecuencias pueden ser devastadoras.

—Al menos dime que en tus visiones todo saldrá bien, anda dímelo...

El guarda silencio a lo que he dicho.

—¿Por qué no me respondes? ¿Qué sucede? ¿Acaso hay algo malo en ellas?

—Estas muy alterada.

—Por supuesto que lo estoy —refuto poniéndome enojada de pie—. Estoy asustada de todo lo que ha sucedido, no puedo dormir por las noches pensando en lo peor, no puedo tan solo pensar en un futuro para nuestro hijo sin que nos toque pagar los errores de otros, mi única fuerza para seguir adelante eres tú, eres en quien más confío y ahora dices que te iras.

Melodías para el ReyWhere stories live. Discover now