El elemento Imperium

CAPITULO 66

Encontraron al hombre de Pearce, cada vez está más cerca y la vulnerabilidad de ambos crece, la guerra no ha empezado pero está es una batalla más.

Cuando menos lo esperaba ya estábamos fuera de Magnolia y camino al pozo, mi mente estaba ocupada es que decir o hacer con un hombre de Pearce y me sorprende que siga con vida, estos hombres normalmente cuando son atrapados terminan suicidándose o son asesinados sin piedad. Al llegar al centro de reclutas todos me miraban confundidos por el velo alrededor de mi cabeza pero se limitaron a inclinarse y no decir nada más, después llegué a las campanas y Ainara me recibió.

– Alteza – dijo inclinándose

– ¿Dónde está? – pregunté de inmediato

– Está en las mazmorras

– Tráelo de inmediato – ordene y ella asintió para después traerlo

No tardo mucho por lo que a los minutos ya tenía a este hombre amarrado en una silla frente a mi y con una bolsa de tela en la cabeza.

– Descúbrelo – dije y me quitaron la bolsa, rápidamente hice contacto visual con el incluso a través del velo

¿Por qué me pareces extrañamente familiar?

Lo mire unos segundos y pude darme cuenta que no presentaba algún tipo de resistencia. – ¿Qué tanto aprecias tu vida? – pregunté sin siquiera mirarlo

El se encogió de hombros – Bueno… no tengo familia, amigos ni motivo para estar vivo, pero me gusta la vida y la comida así que podría decir que mucho – dijo con desinterés

Lo mire confundida – ¿Por qué me has estado siguiendo?

– Ni siquiera sé quién eres – respondió desinteresado

Lo mire unos segundos y suspiré – Salgan… no quiero en esta habitación a nadie – dije

Supongo que tengo que hacer esto por mi cuenta

– Alteza por su seguridad no podemos hacer eso – Baker se negó pero al ver mi cara de disgusto asintió y salió

Quité el velo de mi rostro y el me miró sorprendido – Kathe – dijo entre dientes

Sonreí moleste – Parece que ahora sí sabes quién soy…

– ¿Qué le ha pasado a su magia? – pregunto realmente preocupado, se notaba su sinceridad y eso me confundió

Intente ignorar su pregunta –  ¿Qué tanta información sobre mi le haz dado a Pearce? – pregunto directamente y el me mira exaltado – tal vez mis movimientos… el centro de reclutas o… mi familia

– ¿Pearce?, ¿Qué quieres decir?

– Ahora fingirás demencia – bufé frustrada – tengo varias preguntas para ti y es mejor que las respondas rápido, ¿Quién eres?, ¿Cuál es tu meta? Y ¿Cómo sabes mi identidad?

– Alteza… no soy quien cree que soy – se excuso

– Entonces contesta y sácame de dudas – me cruce de brazos

– Mi nombre es Sergio Magallan – su nombre me lleva a recuerdos borrosos en mi casa en brisa pero no logro recordar con claridad así que el continúa – parece que aún no puedes reconocerme – dijo con decepción

– ¿Debería?

– Si, debería… yo, yo era amigo de tu padre… Aaron Kendrick – sus palabras me llevan directamente a mi hogar

Un día de verano salgo corriendo de mi casa y logro ver a mi padre con un hombre a su lado, el se presenta como el tío Sergio y los flashbacks se apoderan de mí.