CAPITULO 48

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2 días después

Han pasado 2 días, 2 días en que mi mundo se detuvo.
Kathe aún no despierta, y yo solo puedo mirarla día y noche sin poder hacer algo por ella, sin salir de su habitación, la observo cada que puedo ella no se mueve en todo el día, criadas, doctoras y enfermeras entran todo el día encargándose de ella incluida Arimi, que logro salir ilesa y se niega a estar lejos de Kathe. He visto sus avances pero no hay nada destacable más que sus heridas se curan más rápido de lo normal, supongo por su propia magia pero, eso no la ayuda en despertar.

Mi mente está ocupada pensando en que aún no despierta, extraño la voz de Katherine y sus ojos que iluminan mis días, necesito su risa que me alegra y da esperanza… necesito su optimismo y sus palabras que me hacen sentir invencible solo porque ella me ve así.

Pero también pienso en lo que pasará cuando despierte y se de cuenta que todo va peor, que lo que dije que mejoraría va de bajada y que no encuentro la manera de que mejore.

Estoy parado frente la cama de Katherine y escucho pasos acercándose a mí – Ethan – me habla Ereen – los tenemos

Sin dudar más salgo de la habitación, camino por los pasillos apresurado, aprieto mis manos de coraje pero no me detengo y me dirijo a las mazmorras, en el camino se nos unen Darwin y Cedric y caminamos los 4 sin una pizca de duda de lo que haremos.

Salimos al campo abierto rodeados de celdas – ¡Atención! Sus Altezas, los regentes de Ulmaria – un guardia nos presenta y los 4 nos paramos en una plataforma presenciando la escena más cruda de mi vida hasta este momento

Al menos 30 hombres están siendo torturados de diferentes maneras, ahogados, descuartizados y quemados por varillas. El ambiente se llena de gritos por piedad pero nosotros 4 aún nos mantenemos firmes hasta que uno confiese quien ordenó esto.

– ¡Por favor! Por favor, regentes se los ruego… yo no tengo nada que ver en el atentado, lo juro – ruega un hombre para después ser quemado con una varilla

– ¡NADIE SE VA HASTA QUE ALGUNO HAYA CONFESADO! – grita uno de los guardias

– ¡Si señor! – contestan sus subordinados que continúan con su trabajo

Solo uno tiene que decir algo

En eso una mujer que está siendo ahogada sube a la superficie y grita – ¡YO CONFESARÉ! – todos la miramos

– ¡Cállate, Lucrecia! – exclama un hombre no muy lejos de ella

– Mátalo – ordené y uno de los guardias lo atraviesa con su espada sin problemas – acerquen a aquella mujer, veamos lo que tiene por decir

Los guardias la toman por el brazo y la arrodillan frente a nosotros – ¿Qué es lo que sabes? – pregunta Cedric

– Yo- yo sé que – su respiración es agitada y apenas puede hablar – hace- hace unas noches un hombre se acerco a mi, llegó a mi casa y dijo que me tenía un trabajo

– ¿Por qué fue contigo directamente? – pregunta Ereen dando un paso adelante

– Yo… hago trabajos ilegales para mantener a mis hijos y ese hombre antes de pedirme que hacer me amenazo con matar a mis hijos – suspiro – yo no pude negarme… pero se supone que mi trabajo solo era hacer un disturbio en esa casa

– A lo que tú llamas “esa casa” es mi casa – respondo alzando un poco la voz – y a quien apuñalaron en “esa casa”, fue a su alteza la princesa Katherine Kendrick

La señora me mira estupefacta, intenta formular palabras pero no lo logra – Yo- no lo sabía

– Tu nunca sabes nada – dijo Darwin molesto

El elemento ImperiumWhere stories live. Discover now