CAPITULO 35

9.9K 798 25
                                    

Entramos a la plataforma solo para desaparecer en una cortina de humo y aparecer en una habitación completamente en blanco.

– No te alejes Kelly, no sabemos que pueda salir de aquí – dije pero al girarme, el no estaba ahí – ¿Kelly? – exclamé pero nadie contesto y tampoco podía ver nada, solo cortinas de humo, una tras otra.

Camine intentando encontrar algo o a alguien pero era imposible, camine tanto que llegue a un punto donde había una pared de madera con un agujero en el, mire a través de el y me quedé helado.

Al mirar pude ver el exterior

Faina… ¿Qué estoy haciendo en Faina?

Intente ver más y me di la vuelta, cuando lo hice retrocedí con miedo, era mi antigua casa, dónde vivía con mis padres antes de que la señora Roxana me adoptara.

Camine con las manos sudorosas y mirando a los lados con un miedo que me inundaba, empecé a ver todo, desde mis antiguos juguetes hasta la ropa que usaba, hasta que escuche la causa de mis miedos, mis pesadillas y mi culpa… mi padre

– ¡Tu no puedes hacer nada bien! – escuché sus quejidos provenientes de la cocina – eres una estúpida, maldito sea el día que me case contigo, si no fuera por los malditos niños tus padres nunca me hubieran obligado a casarme contigo

El miedo me seguía invadiendo y pronto olvide las olimpiadas.

Temeroso me acerque a la puerta hacia la cocina solo para ver a mi padre tomando en la mesa y mi madre cocinando.

Esto… esto ya lo había visto, es- es ese día

Vi a Dylan, al pequeño Dylan sonreí por unos segundos pero, el se acerco a mi padre y lo golpeó por accidente con uno de sus juguetes

– ¡Controla a tus hijos y sirve de algo! – exclamó con coraje

– No te enojes, ellos no hacen ningún mal – dijo mi madre con calma mientras hacía a un lado a Dylan – hoy salí con los niños y- 

– ¡¿SALISTE?! – se levantó de la mesa y tomo a mi madre por el cabello – ¿Cuántas veces tengo que decirte que no puedes salir ni ver a nadie?

Empecé a retroceder y recordé que esto ya lo había pasado

Es el día del asesinato de mi madre… 

– No… no dejaré que lo haga – susurre y me acerque a ellos pero al pasar frente a un espejo me detuve

Soy un niño, soy yo de niño, volví a los 6 años

La poca valentía que tenía se convirtió en un terror absoluto
– Parece que te tengo que educar igual que a los niños, sabrán lo que es obedecer – el toma una barra de metal y comienza a golpear a mi madre

Este es el punto donde solo miro como matan a mi madre… pero no pasará

Corrí hacia ellos y tome a mi padre por el brazo – Por favor, no lo haga – dije casi rogando

El me miró con una sonrisa pero solo hice que me golpeara a lo largo del abdomen, mi vista se volvió negra.

Abrí los ojos y estaba parado en el mismo lugar de antes de intervenir, la puerta hacia la cocina

– Parece que te tengo que educar igual que a los niños, sabrán lo que es obedecer – tomo la misma barra de metal

No puedo dejar eso así…

Corrí de nuevo y esta vez tome la barra de metal – ¡Ethan! – grito mi madre pero la ignore

Salí de casa y corrí lejos con la barra en manos pero termine cayendo cuando llegue a un mercado, mi padre no tardó en llegar y tomo la barra golpeando mi cabeza, sentí el dolor pero después volví a abrir los ojos.

El elemento ImperiumWhere stories live. Discover now