El elemento Imperium

CAPITULO 56

Yo seguía en silencio mirando las manos entrelazadas de André y Victoria, no podría sentirme mejor al ver que se tienen el uno al otro aunque yo ya no este tan presente en sus vidas.

Aunque el silencio se ve interrumpido por los golpes en la puesta – ¡Adelante! – exclamé y la puerta de abrió dejando ver a Galina entrar

– Alteza – se acerco e hizo reverencia

– Galina – dije con una sonrisa al verla bien y me levanté para ponerme frente a ella – creí que necesitarías más tiempo para recuperarte

Ella sonrió – Bueno… Arimi aún no puede trabajar así que vine para que su alteza no se quedara sola – la mire y ella sonrió ligeramente

En eso la puerta se abrió nuevamente de golpe – ¿Quién dice que no puedo trabajar? – Arimi entro con muletas y una gran sonrisa a la habitación

– ¡Arimi! – exclamé con sorpresa – ¿Qué estas haciendo aquí?

– Arimi Holt jamás ha faltado a un día de trabajo y hoy no será el primer día – dijo con felicidad, una felicidad que nunca había visto en ella

La examine de pies a cabeza y después mire a través de la puerta dirigiéndome mirada hacia las escaleras – ¿Cómo fue que subiste aquí así? – pregunté confundida

– Mejor no le cuento – respondió – no fue fácil – casi lloraba al escuchar su voz completamente bien y la abracé

– Te extrañe – dije cerrando mis ojos

Ella se sorprendió pero me abrazo igual – Yo también princesa… la extrañe – me separé un poco de ella y pude notar como quitaba una lágrima de su mejilla para evitar que la viera – por cierto… el desayuno está listo y los regentes me piden que baje

Yo asentí – Bien… vamos – camine hacia la puerta

– Amm yo me quedaré – dijo Victoria y me giré para verla – si no es mucha molestia… me gustaría quedarme un rato más con André

Mire a ambos con las manos aún entrelazadas y asentí sin decir más, salí de la habitación y ayude a Arimi junto con Galina a bajar las escaleras, puedo decir que no fue nada fácil pero entre risas lo logramos. Las 3 bajamos y cuando llegue al comedor pude darme cuenta de que Ethan estaba sentado en la mesa y sin vendas.

– Ethan – dije y el me miró – ¿Qué haces aquí? Se supone que aún no debes salir de cama

– Bueno estaba aburrido… además de que quería ver a mi novia que me abandono en la habitación – renegó pero solo me acerque y lo abracé por la espalda

Después me aleje un poco y pude notar algunos huecos en el cabello de Ethan – Oye… ¿Y esto que…?

– Ni me lo digas – me interrumpió
Darwin y Ereen comenzaron a reír mientras me miraban

– Ella también lo notó – dijo Darwin entre risas

Cedric también se acerco uniéndose a la conversación – La explosión le quemó varias partes de cabello – me explicó

– Ahora parece una alcancía – se burla Darwin

– ¡Ey! Tu… – Ethan se quejo y tomo una pequeña hogaza de pan de la mesa y se lo arrojo

Yo cubrí mi risa poniendo una mano sobre mi boca pero mantuve la compostura – Oigan ya… no se burlen de el – ellos guardaron silencio, bese la cabeza de Ethan y me senté a su lado

– Gracias… alguien aquí que si me respeta – dijo Ethan

– Si, no se burlen de el – me aguante la risa – quería un corte de dálmata