Jugar, ganar y enamorarse |✔

36.

Faltaba tan poco para el partido que era estresante solo conversar con los caballeros, futbol americano era todo lo que podían hablar, beber, respirar. Era insoportable. Jossie coincidía conmigo y me acompañaba en mi terrible aburrimiento cuando los escuchaba hablar por décima sexta vez al cabo de dos horas, acerca de la posición estratégica más adecuada para ganar la gran final.

-Un poco de consideración por aquellos que no entendemos nada de fútbol americano. -pedí.

-Y para aquellos a quienes no nos importa una mierda.

-¡Angélica!

Dios, necesitaba tratar sus formas. Aunque se apreciara la honestidad, no puede escupirse como veneno de serpiente. Ella se encogió de hombros, pero apartó la mirada, con vergüenza. Claro que jamás lo diría.

-Los veo muy mal. -dijo Allegra, preocupada-Necesitan relajarse.

-Alle tiene razón-coincidió Fred- Y se preocupan por nada, es más que seguro que ganarán.

Lo dijo con la mejor de las intenciones, y con todo el optimismo del mundo, pero no se dio cuenta de que no era lo correcto de decir, inconscientemente aumentó la presión. Por supuesto, no fue su culpa.

Estaba claro que esta situación era insostenible no tan solo para mí. No era saludable la cantidad de ansiedad que se respiraba cerca de los Caballeros.

Incluso Steven y su personalidad relajada no era inmune a los nervios y la presión por la victoria. Se lo veía sonreír menos.

-Mañana vamos a pasar de la escuela.

Después de mi decreto, me miraron como si estuviera loco, pero sabía que podía convencerlos.

-Iremos a un bar karaoke para despejarnos. Bien que lo necesitamos...

Hubo unos instantes de silencio antes de que alguien expresara su opinión, y cuando no, Claude fue pionero.

-¡Adoro el karaoke!

-Paso de sentir vergüenza ajena... y propia.-Jossie se cruzó de brazos.

-De eso nada... -empecé a protestar, pero Fred intervino en el momento justo.

-¡Seguro tienes una hermosa voz! Y si no, no puede ser peor que la mía. Vamos, la pasaremos bien.-pidió, con manipuladores ojitos de cachorro.

Pensé que Allegra intervendría para convencerla, pero no hizo falta. Fred lo consiguió, muy rápidamente para mi sorpresa.

-Bien. -ella puso los ojos en blanco.-pero si no quiero cantar, no lo haré.

-Con tu compañía es suficiente para nosotros, Joss.

Ay, Fred, después te preguntas porque todos quieren abrazarte.

Tae dijo que le parecía bien, que haría lo que hiciera el resto. Seguía un poco decaído, más callado que de costumbre, pensando en Yongmin probablemente.

El resto no se veía muy dispuesto, a excepción de Allegra, por supuesto.

-¡Por supuesto que voy a ir!

Su entusiasmo logró cautivar a Petro, por lo que accedió, y así fueron aceptando los demás, siendo Thomas y Leon los más indecisos al respecto.

-Vamos. -le susurré a Thomas. -la pasarás bien. -prometí.

Necesitábamos y merecíamos un descanso de toda la mierda. Y lo íbamos a tener.

Una vez que Hanlon dijo que si, a regañadientes, Leon terminó por aceptar la invitación.