Poemas y otros dolores [√]

Un ambiente extraño

Qué extraño.
Por un breve instante pude sentir algo curioso en mi pecho.
¿Fue acaso... un movimiento?
¿Tal vez la señal de vida existente?
Algo que se consideraba marchito vuelve a resurgir de su propia miseria.
¿Cómo se llamaba... esta sensación?
¿Cómo se llamaba... este sentimiento?
No puedo recordarlo.
Revuelvo en el baúl de los recuerdos antiguos y dolorosos,
Pero no hay nada que siquiera se asemeje.
Qué extraño.

Qué extraño.
Podría decir que estoy esperando a...
¿Esperando?
La vida es demasiado corta para eso,
Y cuando menos lo note,
Yo me voy a encargar personalmente de desaparecer.
Y nunca lo sabrá.
Y nunca lo esperará.
Entonces...
¿Por qué estoy esperando?
¿En qué sentimiento me apoyo para esperarlo?
No puedo recordarlo.
Qué extraño.

Qué extraño.
Hoy, como tantas otras noches,
Me desperté a las tantas de la madrugada después de haberme dormido tarde.
Sin embargo, a diferencia de entonces,
Esta vez no fue uno de esos terrores nocturnos
que me sacudían en la noche con impasible violencia en mi cama,
ni tampoco fue una pesadilla que me afligiera el alma,
invadiéndome de nostalgia y tristeza.
Fue un sueño...
¿Cómo se le llamaba?
No lo recuerdo claramente.
Es como un espejismo en medio del desierto,
Dispuesto a enredarme en su engaño.
Qué extraño.

Tal vez se llamaba felicidad.
Tal vez se llamaba esperanza.
Tal vez se llamaba amor.