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Lucas volvió corriendo a la mesa y se sentó, sumergiéndose de inmediato en su apetitosa hamburguesa.

—JunMyeon va a venir a montar en el trineo conmigo mañana. —anunció con la cara embadurnada de ketchup.

SeHun vio cómo JunMyeon se inclinaba sobre su hijo para darle una servilleta. El niño se limpió sin pensarlo y sin las quejas de costumbre.

—Podíamos hacerlo en la colina que hay detrás de casa, ¿verdad, papá? Es bastante grande. —susurro lucas.

La verdad era que la pendiente era vertiginosa y no quería que lucas se acercara a ella. Pero JunMyeon lo miraba como si estuviera esperando que negara a su hijo otro capricho, así que decidió no hacerlo.

—Sí, es bastante grande. —dijo SeHun al fin.

JunMyeon entrecerró los ojos, tenía unas larguísimas pestañas y sus suaves labios parecían estar a punto de sonreír.

A SeHun le fastidiaba pasar tiempo pensando en esa boca. Sobre todo, cuando intentaba convencerse de que nunca haría nada para llegar a saber si esos labios eran tan tersos como parecían.

Se obligó a apartar la mirada, pero lo que vio fue mucho peor. El trío problemático estaba al acecho y acercándose peligrosamente a él. No las veía desde la boda. Tiffany, Hyuna y Kristal eran tres chicas muy guapas con demasiado maquillaje, demasiada intención en su joven mirada y demasiado tiempo libre.

SeHun maldijo en voz baja, pero no lo suficiente como para que JunMyeon no lo oyera.

—¿Qué pasa? —le preguntó JunMyeon captando mal humor.

SeHun le agarró de la mano y lo arrastró hasta el centro del bar.

—Baila conmigo. —le pidió SeHun con suplica.

—¿Qué? —exclamó JunMyeon confuso.

SeHun suponía que lucas estaría mirándolos con ojos desorbitados.

—Baila conmigo JunMyeon. —repitió SeHun mientras lo tomaba por la cintura y miraba por encima de su cabeza.

Las tres chicas se pararon en seco y tres idénticas muecas de sorpresa se dibujaron en sus caras.

—¡Que Dios ayude a sus pobres padres! —murmuró SeHun.

JunMyeon lo miraba como si se hubiera vuelto loco y quizás fuera así. Lo que le estaba volviendo loco era sentir cada centímetro de su cuerpo entre sus manos. Llevaba un jersey de cuello alto en tonos cobrizos que hacían que su pelo pareciese más rojizo y refulgente que nunca y sus piernas más largas enfundadas en unos estrechos vaqueros marrones.

—¿Los padres de quiénes? —inquirió JunMyeon.

SeHun se giró lo justo para que JunMyeon pudiera ver a las chicas.

—Los de esas chicas. ¿Sabes lo que es que te persigan tres chicas de diecisiete años? —cuestiono SeHun desesperado—. ¡Una auténtica pesadilla!

JunMyeon no pudo ahogar una carcajada y el sonido de su risa le dio a SeHun escalofríos.

—Así que están enamoradas de ti. —se mofo JunMyeon con una mirada coqueta.

—No lo sé. El caso es que cada vez que me doy la vuelta están ahí, siguiéndome. Está empezando a ser un problema. —susurro SeHun alarmado.

—¿Por qué? ¿Porque te gustan? —cuestiono JunMyeon entrecerrando los ojos.

—¿Qué dices? —exclamó SeHun lanzándole una mirada asesina—. ¡Son niñas!

JunMyeon se acercó más a SeHun y deslizó su mano hasta el hombro. Sus piernas se rozaban levemente con cada movimiento que daban.

—¡Pobrecito! —se mofo JunMyeon.

—No te parecería tan gracioso si tú fueses el objetivo de esas tres. —hablo SeHun con captando la mofa—. Últimamente hasta me traen magdalenas a clase. ¡Cada día! ¡Y ni siquiera me gustan las magdalenas!

—Así que les da por los gestos románticos. —comentó JunMyeon pensativo—. Creo que tienes razón. Si me pasara a mí no me haría gracia. Pero como nunca he tenido a jovencitas detrás de mí... Bueno, la verdad es que ni a chicos ni a hombres maduros. Supongo que por eso no te entiendo. —añadió jun con un puchero.

SeHun no podía creer sus palabras.

De reojo, vio cómo se alejaba el trío problemático.

—Este semestre tengo suerte porque no las tengo en mis clases. No sé qué hacer para que dejen de seguirme. —lamento SeHun.

—Búscate una novia o un novio. —le dijo JunMyeon con suavidad.

—Estoy... —comenzó SeHun.

A tiempo se dio cuenta de que había estado a punto de decirle que estaba casado. Pero no era así. Ya no lo era. No estaba casado, estaba solo.

Y tenía a un precioso doncel entre sus brazos, a uno que estaba muy vivo y muy cerca de él.

—¿Estás qué? —pregunto JunMyeon mirándolo fijamente para que termine su frase.

—Estoy hambriento. —dijo SeHun bruscamente—. Y se nos enfría la comida. —añadió mientras detenía el absurdo baile y volvía con JunMyeon a la mesa.

Lo único que había conseguido había sido pararles los pies a las jovencitas, al menos de momento. Lo malo era que, sin querer, también había logrado despertar en él un apetito que, hasta entonces, había podido mantener bajo control.

SeHun se sentó de nuevo a la mesa y se colocó la servilleta en el regazo, sobre unos vaqueros que de repente parecían más ajustados.

—Nunca te había visto bailar, papá. —anuncio lucas con una sonrisa.

—Termínate la hamburguesa, lucas. —demando SeHun con seriedad.

—Pero... —se quejo el niño.

—Si lo haces puedes tomarte un postre. —advirtió con más calma dejando su mala actitud.

Lucas engulló lo que le quedaba de hamburguesa, emocionado ante la idea de un suculento postre. SeHun tenía la misma idea en la cabeza, pero el postre que ansiaba estaba sentado a su lado y no podía ni mirarlo a los ojos.

De repente, JunMyeon dio un salto cuando su busca comenzó a sonar. Lucas casi se rompió el cuello intentando leer el mensaje en la pantalla de avisos.

—Lo siento. Voy a tener que irme. —explicó JunMyeon.

—¿Está todo bien? —pregunto SeHun intranquilo.

—Sí, pero hay una emergencia. —le dijo JunMyeon mientras se levantaba—. Lo siento por la cena.

SeHun también se puso en pie para ayudarlo con el abrigo. Se sintió mal por haberlo arrastrado a la pista de baile, de no haberlo hecho JunMyeon podría haber comido algo de la ensalada que se había pedido.

—Podemos pedir que te lo empaqueten. —oferto SeHun rápidamente.

—No, no tendré tiempo de comerla. —susurro JunMyeon colocándose el saco—. Pero gracias de todas formas y perdón por irme así.

SeHun también lo sentía,más de lo que quería admitir. 

Un amor atrapado en el invierno-SEHOWhere stories live. Discover now