CAPÍTULO 1

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PEQUEÑO ACCIDENTE

Sonó el timbre, recogí mis cosas rápidamente, salí de la facultad, y me dirigí directamente a la cafetería donde mi mejor amiga y yo siempre quedabamos para desayunar. Estaba un poco lejos del campus, ya que se situaba en el centro de la ciudad.

Cuándo llegué, tomé asiento y esperé hasta que viniera. Charlotte abrió la puerta de la cafetería, iba vestida con un jersey gris sencillo, unos pantalones anchos y unas Converse, no sé cómo se lo hacía, pero todo le quedaba bien. Su largo pelo rubio se movía suavemente mientras caminaba, y sus ojos azules se posaron sobre mi cuándo se sentó. Charlotte y yo éramos cómo gemelas, desde los 3 años, estuvimos siempre juntas, fuimos a preescolar, a primaria y a secundaria juntas. Siempre hemos permanecido muy unidas, y la quiero cómo otra hermana.

—No te lo vas a creer —dijo en un tono enfadado

—¿Qué?

—Otro examen, otro. Estoy harta de mi profesora, siempre está con los malditos exámenes, joder.

Charlotte estudiaba derecho, y creedme que lo odiaba, siempre estaba quejándose de lo aburrida que era esa carrera. Cuando terminó el instuto, su padre no dudó en elegir por ella que estudiase derecho. Su padre era un abogado con mucho reconocimiento, él quería que ella siguiese sus pasos.

—Se te da muy bien memorizar, Char.

—¿A qué me ayudarás? —dijo poniendo un puchero.

Las veces que la he ayudado, que han sido pocas, una vez nos pusimos en serio y la ayudé a memorizar haciendo como si yo fuera una profesora que explica el temario, Y otra vez nos pusimos a ver películas hasta que amaneció.

—Ya sabes lo que pasó la última vez que lo intentamos —le recordé.

—Sí, sí, pero te juro que esta vez no te obligaré a ver Grease.

—Está bien —bufé con mala manera.

—¡TE AMO! —gritó entusiasmada. Todos se giraron y yo me estaba muriendo de la vergüenza.

—Ya.. —contesté muy poco convincente

Charlotte era muy..mmm... ¿cómo decirlo? ¿amorosa? ¿pegajosa? No lo sé, pero siempre me recordaba lo mucho que me amaba, y a veces estaba bien saber que alguien te quería..supongo.

Pedimos el desayuno y charlamos tranquilamente, cuando terminamos, nos despedimos y yo fuí hacia mi piso para terminar algunos trabajos, decidí tomar el bus, cuando paró, intente entrar pero la puerta del bus estaba cerrada y me choqué con el cristal

-¡Auch! - exclamé

La puerta se abrió lentamente, salió por ella una chica que creo que alguna vez la he visto, era más bajita que yo, me miraba con sus ojos azules, una mirada incrédula. Tenía el pelo negro largisímo y ondulado, una nariz pequeña y redonda y sus labios carnosos se abrían ligeramente.

madre mía

Se bajó del bus pasando por mi lado y riendo, un chico con el pelo castaño y desordenado la siguió riendo también. Maldecí en voz baja y entré en el autobús. El conductor me miró de mala manera, así que yo hice lo mismo. jeje

Tomé sitio, abrí la cámara frontal del móvil y volví a maldecir en voz baja, tenía una especie de moretón, pero bueno. Abrí el reproductor de música y me puse a escuchar Lana del Rey.

El autobús paró y fuí hacia mi piso, abrí la puerta y encontré a Jasmine estudiando en el sofá. Jasmine era mi compañera de piso, estudiaba en la misma universidad que yo así que ya llevábamos 2 años compartiendo piso. Nuestro piso era muy sencillo, cuando entrabas te encontrabas un pequeño pasillo y luego encontrabas directamente el pequeño salón, había un sofá beige, una mesa de café y una televisión en la pared, era un sitio acogedor, sobretodo porqué Jasmine lo había decorado con plantas, alfombras, velas.. En la izquierda estaba la cocina, estaba abierta así que podías perfectamente ver la televisión desde el sofá. Luego si seguías el pasillo ''invisible'' que separaba la cocina del salón, había dos habitaciones,

El Contraste que SomosWhere stories live. Discover now