Mastermind: Inicio de la anarquía (EN HIATUS)

Cap. 33: Tierno

"Estoy muy orgulloso de ti, joven Uraraka". Nezu la miró por encima del borde de su taza de té. "En estos tiempos oscuros, es casi imposible encontrar una luz que brille tanto como la tuya".

Ochako suspiró y dejó su taza, "Simplemente no sé si estoy haciendo lo suficiente, ¿sabe? Ojalá todos los héroes pudieran unirse como solíamos hacerlo, pero todos están tan aterrorizados por Mastermind, incluso los héroes, que incluso ahora que está fuera de las calles, ¡sigue causando caos! ¡Es muy frustrante!"

"Lo sé." Nezu asintió sabiamente. "Pero no puedes rendirte ahora. ¡Mira toda la esperanza que ya le has dado a la gente! Los egresados ​​de la UA siempre han sido superiores, así que si el resto de los defensores del país se niegan a luchar y proteger como deben, entonces nos corresponde a nosotros tomar el relevo y ustedes ya han demostrado que son más que capaces de hacerlo".

"Gracias Señor." Ochako se sonrojó. "Le prometo que lo haré mejor".

"No tengo ninguna duda de que lo harás". Nezu dijo seriamente. "Recordad que, sin esperanza, la sociedad no tiene más remedio que caer en la destrucción. Eres la última defensa del pueblo contra el caos total. No los defraudes, Uravity".

Ochako respiró hondo, "No lo haré… no puedo. Lo prometo."

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Hitoshi estaba enojado. Se había enfadado mucho a lo largo de su vida. Se enojó cuando apareció su peculiaridad y todos inmediatamente actuaron como si eso fuera algo malo. Estaba enojado cuando un maestro se negó a dejarlo hablar en clase o cuando un padre se negó a dejar que su hijo jugara con el futuro villano. Estaba enojado cuando sus compañeros de clase desertaban una y otra vez y comenzaban a pelear del lado de los villanos, descifrando gradualmente lo que significaba ser un héroe. Sin embargo, nada de eso se comparaba con la rabia absoluta que sintió cuando Tsu lo llevó a caminar fuera de los terrenos y confirmó que Monoma era, de hecho, un traidor. 

Una cosa era ver a sus compañeros de clase desertar y convertirse en villanos, pero al menos Todoroki y Tokoyami habían sido presionados y Hitoshi sabía lo difícil que era resistirse a eso. Así que sí, por mucho que odiara admitirlo, al menos podía entenderlos y simpatizar con ellos hasta cierto punto. ¿Pero pretender ser un héroe mientras les da información a los villanos y pone a todos en peligro mientras los convence de que son amigos? Eso solo lo molestó.

Eri pareció notar lo tenso que estaba y le apretó la mano mientras caminaban por la calle "Parecías feliz de que Monoma no viniera hoy".

Hitoshi suspiró y le devolvió el apretón "Pensé que tu peculiaridad era rebobinar, no leer la mente".

Eri le dio una mirada que debió haber aprendido de Aizawa y levantó una ceja, "Eso es una tontería. ¿Hizo algo malo?"

Hitoshi frunció el ceño. Aizawa había sido claro en que él nunca le ocultó ninguna información, pero ¿eso incluía cosas engañosas como traidores? Él la miró, se suponía que debía protegerla, ¿verdad? Pero, de nuevo, no podía ser un buen guardaespaldas si la persona a la que estaba protegiendo no conocía los riesgos a los que se enfrentaba. 

"Si." Hitoshi dijo suavemente. "Él hizo algo."

Eri asintió, "Papá Zawa también ha estado actuando así. ¿Va a tratar de lastimar a la gente?"

"No directamente". Respondió Hitoshi. "Será sutil al respecto. Piensa... casi como Mastermind. Se asegurará de que la información correcta llegue a las personas equivocadas, pero no se ensuciará las manos. ¿Tiene sentido?"

Eri pensó mucho por un momento, "¿Como... un espía?"

"Si." Hitoshi resopló. "Exactamente así. Sin embargo, no te preocupes demasiado por eso. Nos encargaremos de eso, trataremos de convertirlo a nuestro favor si podemos. Simplemente no le digas a nadie que lo sabemos, ¿de acuerdo?"