𝗙𝗿𝗲𝘀𝗵𝘄𝗮𝘁𝗲𝗿┃One Piece [HIATUS]

𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐮𝐧𝐨

Las lágrimas recubrían el borde de los ojos redondos de Chopper, a este punto habías vuelto a abrazarlo murmurando que te daba igual como fuera, no sería la cosa más raras que verías, eso era seguro, querías llamarlo tonto por pensar así pero Luffy gritó antes de que pudieras decir algo.

─¡Cállate y ven con nosotros!

Esto solo hizo que el pobre reno temblase, sollozando más, conmoviéndolo por completo salió a correr en busca de Kureha, reíste silenciosamente al observarlo, a pesar de que empezasteis a prepararos para marchar sabías que Chopper llegaría a tiempo para ir con vosotros. Aunque no esperabas que os hiciera volar en un trineo tirado por él mismo, pero fue increíble, la luna completa mostró vuestra silueta hacer contraste con ella creando una imagen única que solo los pueblerinos pudieron admirar como si hubiese sido un suceso mágico y único, ya no solo por eso si no por la hermosa lluvia de pétalos rosas que se esparcieron por todo el reino a modo de despedida del pequeño reno.

Por fin teníais un doctor a bordo, uno muy adorable.

─¡Mira! ¿No es genial?

Alzaste un cuaderno hacia Nami, en este habías pegado las fotos que tenías hasta el momento, con algunos apuntes sobre lo que había sucedido o un título para recordar a grandes rasgos los hechos. Te lo habías encontrado debajo de tu almohada hoy cuando despertaste así que no tardaste en ponerte manos a la obra, estando orgullosa de tu obra recorriste todo el barco enseñándoselo a todos, siendo bañada en halagos, especialmente por parte de Vivi.

Cuando te cansaste decidiste hacer uno de tus chequeos al ala de Shiroi, solo que esta vez acudiste a Chopper para que te ayudase con el pájaro, ya que lo único que hiciste fue vendarle la herida, por lo cual se infectó sin llegar a cicatrizar correctamente.

─Tienes que aplicar la pomada con cuidado o si no la herida podría abrirse.

─¡Entendido!

Siguiendo los pasos que te indicó con mucha delicadeza expandiste la pomada sobre el ala, vendándola de manera mejor gracias a la ayuda del doctor, cuando terminaste tu trabajo sonreíste alzando a Shiroi en tus palmas como si fuese uno de tus mayores logros. Chopper cruzó miradas con tu pájaro que graznó nada más verlo, haciendo que una sonrisa se hiciese paso a través de los rasgos del médico.

─Él te está dando las gracias por cuidarlo, dice que se siente seguro a tu lado pero que eres demasiado descuidada.

─¿¡Eh!? ¡Pero yo no soy descuidada!

Inflaste las mejillas ahora teniendo una competición de miradas contra Shiroi de la cual saliste perdiendo porque Chopper expuso todos los argumentos de tu pájaro a la luz, asustando al pobre reno cuando escuchó al animal despotricar de como casi eres devorada por un dinosaurio, o tu encuentro con lapahns salvajes por no hablar de todas las distracciones en el castillo. Chopper tuvo claro que si tu suerte se acababa iba a tenerte en la enfermería más de lo esperado, dios quiera y se equivoque ya que no querría que te dañaras.

Habían pasado un par de días, cada vez estabais más cerca de Alabasta, en este momento Vivi se encontraba compartiendo algunos datos sobre la situación en su reino, como que Cocodrilo se hacía pasar por un héroe o la forma en la que Baroque Works estaba compuesta. No prestaste mucha atención a esos datos, más concentrada en pintar en tu hoja al nuevo integrante de la tripulación, habías pensado en dibujar a todos en el Merry pero dejaste espacio por si más personas terminaban siendo parte de la tripulación.

Cuando terminaste de dibujar al reno doblaste el rugoso papel, guardándolo en tu bolsa, palmeaste el costado de Zoro que habías usado como respaldo mientras dormía a modo de agradecimiento. Al echar un vistazo a la cubierta sonreíste al ver a Ussop junto a Luffy sentados en la barandilla.

Al acercarte frunciste el ceño al ver como estaban usando a Karoo como cebo para tratar de atraer a algún tipo de pescado, te encaminaste hacia ellos para golpearlos y salvar al pato pero antes de que tus puños impactara contra sus espaldas algo había atrapado a Karoo, más bien, alguien apareció a través de un extraño humo proveniente del mar mientras que se sostenía del cuello del animal que gritaba asustado.

─¡Hostia, hemos pescado un travesti!