𝐎𝐜𝐡𝐨

1.8K 244 24
                                    

Estornudaste logrando despertarte, lo primero que viste nada más abrir los ojos fue a Zoro atado mientras que Usopp y Johnny miraban en un mapa, fue una primera vista confusa, pero al parecer aquel cabeza de musgo pretendía entrar directamente en Arlong Park para repartir leña sin si quiera pensar con lo que se podría encontrar.

Al pasar junto al Going Merry un par de piratas de la tripulación del enemigo estaban ahí, siendo los cobardes que eran los dos que habían atado al espadachín se lanzaron al mar para escapar sin dudar, entrecerraste los ojos ante sus acciones, escuchando como Zoro gritaba que lo desataran, pero para su consternación aquellos piratas ya habían abordado el barco y no te dio tiempo a ayudarlo.

─Debes de haber sido exiliado de algún lugar ¿Cierto?

─Ya veo, estas deben ser heridas de tortura.

Aquellos dos se burlaron del hombre atado, guardaste silencio esperando que no te vieran, escondida detrás de la pequeña cabina, te tensaste cuando el barco empezó a ir hacia otro lugar, ibais a meteros de lleno en Arlong Park. Se llevaron a Zoro cuando entraron y no sabías que hacer, querías ayudarlo, pero no sabías cómo, ¿si provocas alguna distracción podría liberarse? pero tal vez eso empeoraría la situación, decidiste esperar callada escuchando la conversación por encima, más concentrada en no hacer ni un solo ruido. En cierto punto escuchaste como alguien era lanzado al agua pero rescatado al instante, estabas bastante confundida ante la situación, por suerte todo el mundo pareció irse un pequeño rato después, aunque no te atreviste a moverte después de haber comprobado si realmente quedaba alguien. Necesitabas encontrar a Zoro.

Al tratar de saltar del barco a la superficie, bueno, no fue tu mejor salto ya que terminaste en el agua, saliste lo más rápido posible, contemplando el escenario por unos segundos, recordando que iban a encerrar al chico decidiste adentrarte dentro de las instalaciones. No sabías si era por que estabas asustada o porque aquella casa era un completo laberinto, pero perdiste mucho tiempo dando vueltas sin sentido. Cuando quisiste darte cuenta la tripulación de Arlong ya había regresado, miraste por una de las ventanas como varios habían sido derrotados, los que estaban en pie se lamentaban por las heridas de sus compañeros, entonces uno de esos pescados-humanos sostuvo a Usopp del cuello, se podría decir que el francotirador tendría muchos más problemas que Zoro para salir de aquella situación.

Te estremeciste al ver como de un momento a otro Nami empezó a golpear a Usopp, pero algo que sólo tú pudiste ver por tu posición antes de que ella le clavara el cuchillo en el estómago, puso su mano para evitar atacarlo,  el narizón hizo todo el espectáculo, incluso fue lanzado al mar. No fue muy difícil unir puntos, Nami realmente no era una mala persona, celebraste de manera silenciosa, pero ahora tenías que descubrir cómo ayudarla a ella, necesitabas encontrar al resto del equipo para contárselo. Todo tu cuerpo se congeló al notar como alguien te tomaba de los hombros.

─Pero mira que tenemos aquí, una pequeña rata.

Trataste de luchar contra el agarre de un pirata que parecía estar justo por donde estabas, inevitablemente te arrastró hasta donde todos estaban, Arlong se mostró confuso por haber encontrado un niño que no fuera del pueblo, pero al ver la expresión de sorpresa en la pelirroja, su sonrisa se ensanchó.

─¿La conoces? No intentes negarlo, Nami puedo ver a través de ti.

Su risa se hizo más oscura cuando ahora pasaste a los brazos del jefe de aquella tripulación, al principio pensó en simplemente darte de comer a su mascota, pero ahora te aprovecharía para chantajear más a su navegadora. 

─Oh, no te preocupes, no podría hacerle daño a una indefensa niña, pero ya que veo que se conocen, seguro que te gustaría tenerla contigo en nuestra gran familia.

Te sentó sobre su regazo, acariciando tu pelo de manera rígida cosa que se hizo incómoda, podías sentir su sonrisa filosa aún de espaldas a él. Nami quería negar, sacarte de ahí y ponerte a salvo, pero si lo hacía, seguramente te haría algo, no iba a permitir eso.

─S-sí, seguro, es una niña muy adorable, os encantará a todos, pero no creo que a ella le gust-

─Prometo que la liberaré si compras el pueblo, pero tendrás que darme un poco más de berris que lo acordado.

No tuvo otra opción que aceptar las condiciones, pero fue optimista ante la situación, ya tenía bastante dinero ahorrado, solo necesitaba lo restante y un pequeño empujoncito, ella podría hacerlo ¿verdad?  Trató de llevarte con ella, pero el gyojin se negó, alegando que quería conocerte si realmente ibas a formar parte de su tripulación, no pudiste hacer otra cosa que no fuera tragar en seco, esperando que no te hiciera nada malo. 

Realmente no fue tan aterrador como esperabas, de hecho estabas más bien normal observando como un pulpo de seis brazos hacía algunas piruetas en el mar, fue bastante curioso, Hatchan quiso hacerse cargo de ti porque le recordaste a cierta chica d...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Realmente no fue tan aterrador como esperabas, de hecho estabas más bien normal observando como un pulpo de seis brazos hacía algunas piruetas en el mar, fue bastante curioso, Hatchan quiso hacerse cargo de ti porque le recordaste a cierta chica de la que solía cuidar. A Arlong simplemente le dio igual, pero observó tus reacciones desde lejos, sorprendentemente estabas más calmada de lo que esperaba, e incluso te sorprendiste a ti misma, relativamente estabas secuestrada pero vaya, el espectáculo hizo que tu mente se distrajese, aunque no era muy difícil puesto que eras una niña pequeña.

Hasta te uniste lanzándote al agua, tu ropa ya se empapó una vez, no pasaría nada por una segunda, además unas cuantas clases de natación no te vinieron mal, ya que no eras la mejor nadadora, el pulpo se encargó de ayudarte, esta vez acompañado de otro gyojin con grandes labios, no ibas a mentir, la primera vez que lo viste se te escapó una risita al ver sus labios pronunciados como si estuviese besando a la nada.

Habían pasado tantas cosas en tan poco tiempo que inevitablemente el sueño se adueñó de tu pequeño cuerpo, el jefe de la tripulación lo notó, tu cabeza se movía hacia los lados y tus párpados se cerraban con más frecuencia, chasqueó su lengua mandando a un par de sus hombres para que trajeran tu cuerpo semi inconsciente. Te miró en silencio, notando ahora lo liviana y frágil que eras, sinceramente pensó que con solo uno de sus golpes podría matarte.

Independientemente del lugar o persona, te removiste buscando calidez, que por muy malo que fuera, el cuerpo de Arlong desprendía, tu cuerpo se movió solo, uno de tus brazos atrapó su cintura mientras que con el otro de agarraste a su camisa abierta, una pequeña sonrisa se deslizó sobre tus labios, bueno, todo lugar era cómodo para dormir si estábamos hablando de ti.

Esto no hizo nada más que causar cierta satisfacción en el jefe de aquella tripulación, pensar que algo tan insignificante como tú necesitaba de él para sobrevivir le hizo relamerse los labios lleno de poder. Estaba claro, te haría alabarlo a tal punto de crear una dependencia, creando una falsa ilusión de necesitar protección, en su mente ver tus ojos llenos de admiración por él mientras le ruegas por cualquier cosa fue lo más gratificante que pudo ver.

Buena suerte con eso hasta que llegase Luffy.

Hablando de ese glotón justo en este momento llegó en la isla, en un aterrizaje forzoso sobre Zoro, pero al menos nadie salió herido. No verte junto a ninguno de los demás, ni incluso con Nami ─la cual se encontraron un rato después, enfrentándose a una discusión─ hizo que sus hagas de pegar puñetazos a cualquier idiota aumentasen. Alguien no iba a tener el suficiente mar para nadar como un mínimo rasguño fuera visto en tu piel.

𝗙𝗿𝗲𝘀𝗵𝘄𝗮𝘁𝗲𝗿┃One Piece [HIATUS]Where stories live. Discover now