No salimos de un problema

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Verla dormir en mi cama es un jodido regalo de los dioses.

Se ve tan tranquila y vulnerable, recuerdo que la solía ver por unos cinco minutos hasta que reaccionaba y la dejaba sola en la habitación. Nunca me ha gustado que otra persona sea la razón de mi debilidad ¿pero ella? Por ella no me importaría arrodillarme ante alguien y lo haría solo y exclusivamente por ella.

Los oscuros tonos del edredón hacen que su pálida piel resalte de esta, sus labios aún rojos resaltan de todo y esto ¿y su cuello? Me encargue que ella ya no usará vestidos en unos días.

-Deja de mirarme así, pareces un acosador -Refriega sus manos en sus ojos y se estira de una manera muy rara.

-No te estoy mirando de ninguna forma -Pongo una sonrisa inocente lo que hace que la abusiva de mi derecha me de un golpe en la frente.

-¿Me duele el cuerpo, tendrás pastillas?

No digo anda, solo pongo una gran sonrisa de oreja a oreja.

-Olvídalo yo misma las compraré -Rueda los ojos y se vuelve a tumbar en la cama, hago lo mismo para que ambos quedemos mirando el techo. -Tu sentido del orden y la decoración enserio dieron una merecida actualización.

-Ahora soy un chico clásico, ¿Qué te puedo decir?

-Clásico nos sería la palabra, yo te llamará antiguo.

-Los años veinte ahora están de moda, ¿eres diseñadora y no lo sabes? -Hubo un momento se silencio, ella no estaba pensando en lo que le pregunte si no en algo mas.

-¿Eras feliz en Roma? -Sabia que algún día me haría esa pregunta pero igual me sorprendió el tono en el que lo dijo.

-Puees...

-Al punto Alexander -Se sienta cubriendo su cuerpo desnudo con las sábanas blancas <<Sip, un jodido regalo>>

-Okey, bueno lo era en si. Tenía buenas atracciones y gente diferente pero me faltaba algo.

-¿Y que era? -Era tan irritante cuando quería.

-Tu idiota -Ella rueda los ojos.

-Ya lo sabía, pero tú cómo siempre arruinas los momentos. -Sonríe sarcásticamente.

-No me considero un romántico ¿sabes? -Doy una cara de orgullo con una sonrisa arrogante <<Es la mezcla perfecta para hacerla enojar>>

-¿Y esto? Dice mucho de tu parte querido -Juguetea con el collar, anoche no se lo quite ya que se veía perfecta con el puesto.

-Fue una buena inversión, te ves preciosa.

-¿A si? -Me da una sonrisa pícara antes de acercarse a mi.

-Si -Beso su hombro y bajo hasta su cuello.

-¿Alex? -Maldición

-Sam... -Ella se aleja de mi, su cara enserio me dio miedo y sabía perfectamente lo que iba a decir.

-¿Aun no le pediste la llave? -Quise pero no supe como.

-No encontré el momento, espérame aquí -Me levantó y tomo el pantalón de piyama para bajar.

-No me vas a dejar aquí sola, Alexander... -Trate de irme para evitar su enojo, baje y ahí estaba San bebiendo agua

-¿Ou, interrumpo algo? -Ella se levanta al verme sin camisa <<Me robaste mi momento chicle>>

-No claro que...

-En realidad si, buenos días Sam -Cassandra baja aún con las sábanas en su cuerpo, pasa frente a mi con una sonrisa <<Una que conocía muy bien, ella no bajo porque debía, bajo porque quería que Samanta la viera así. Amo a mi nena pero a veces juega sucio>>

Siempre has sido túWhere stories live. Discover now