Capítulo 16

183 11 0
                                    

¡Maratón 1/3!

Llevábamos alrededor de tres horas corriendo y jugando bajo la nieve, había comenzado a nevar de nuevo hacía una hora, pero eso no impidió que siguiéramos jugando. Los mellizos se reían sin parar de las tontadas que Sander les hacía, ¿cómo era posible que se le dieran tan bien los niños?

— ¡Niños es hora de volver a casa!

Los tres se giraron en mi dirección como si acabará de insultarles, de mis hermanos esperaba el berrinche pero de Sander no.

— Jo, Haley yo quiero seguir jugando— Se quejo Hendry entre lloriqueos

— Y yo— le siguió su copia

Miré a Sander quien junto las manos a la vez que sacaba el labio de abajo hacía afuera

— Porfi

Me llevé la mano a la frente exasperada

— No me puedo creer que estes tú también haciendo esto— Me agache a la altura de los pequeños para que me prestaran atención.

— Cada vez nieva más y puede ser peligroso, si en la tarde para os prometo que saldremos. jugar de nuevo ¿vale?

A regañadientes aceptaron, por lo que les agarré a cada uno de la mano para empezar a caminar hacía casa pero Hannah no duró mucho a mi lado cuando salió corriendo en dirección a Sander para cogerle la mano.

— Han no molestes

— Pero no molesto ¿A qué no príncipe Sander?v preguntó haciéndole ojitos sacándole una sonrisa divertida.

— No princesa Hannah, no me molestas

Negué con la cabeza y seguí caminando en dirección a nuestro edificio. Una vez estuvimos en el portal me giré hacía el hombre que venía con nosotros, no sabía que decirle, cada vez nevaba más fuerte y no era seguro que se fuera pero tampoco quería que se pensara alguna cosa rara.

— Esta nevando mucho...

— Cierto

— Y puede ser peligroso

— ¿Algo que quieras decirme Haley?

Me mordí el labio inferior sopesando mis opciones, la primera era no decirle nada y que se marchara pudiendo tener un accidente y la segunda era que se quedará con nosotros.

— ¿Quieres pasar hasta que amaine la tormenta?

Asintió sin dejar de sonreír para caminar en dirección al ascensor donde mis hermanos nos esperaban.

— ¿Sander se queda?— Pregunto Hendry curioso

— Si, hasta que sea seguro para que se vuelva a su casa

Subimos en dirección a nuestro piso donde papá se encontraba viendo la televisión, había empezado a recuperar color y era capaz de moverse distancias cada vez más largas solo; ahora podía ir desde el salón hacía su habitación sin problema alguno, siempre y cuando pudiera apoyarse cuando lo necesitara.

— ¡Papá!

Ambos se tiraron encima de el para abrazarle, teniendo cuidado de no hacerle daño, pero a el no pareció importarle, ya que les abrazó todo lo que sus fuerzas le permitieron.

— ¿Y esta felicidad?— les preguntó quitándoles los gorros— ¿Lo habéis pasado bien?

— ¡Sí!— gritaron a la vez mientras se quitaban el abrigo y la bufanda para dejarlo cerca del radiador y secara.

Una vez se quitaron la primera capa de abrigo salieron corriendo hacía su dormitorio para cambiarse de ropa, seguro se estaban asando como pollos entre tanta ropa y la calefacción encendida.

papá se levanto del sofá cuando se percato de Sander.

— No se levante Elliot

— Hijo, a mi me educaron bien, por eso me levanto para saludarte como se debe hacer

Sonreí divertida cuando se estrecharon la mano y papá tiró de él para abrazarle, no era muy masculino pero ese era uno de los defectos o virtudes de Elliot Walls, era muy cariñoso.

—¿Necesitas algo de ropa? estas algo calado

— No se preocupe de verdad, se secará rápido

Ambos se sentaron a charlar por lo que aproveché para cambiarme de ropa por algo más cómodo, me coloque las pantuflas y salí en dirección a la cocina para hacer algo calentito para entrar en calor.

Agarré un cazo y lo coloqué en el fuego con leche a hervir hasta poder echar el chocolate en polvo.

Diez minutos después todos estaban en la cocina esperando a poder tomarse el chocolate sin quemarse, mire a Hendry que sacaba la lengua para posarla en el chocolate dentro de su taza y así comprobar si seguía caliente o no, era gracioso ver las caras que ponía cuando se quemaba; en cambio Hannah se dedicaba a meter el dedo.

— ¡Ay!

Rodé los ojos al ver como el inteligente de mi hermano se abanicaba la lengua.

— Te dije que no hicieras eso Hendry— le regañó papá

— ¡Pero me lo quiero beber ya!— chilló exasperado

— Pues te va a tocar esperar y deja de gritar

Miré a Sander que observaba divertido l pequeña discusión entre padre e hijo, me senté a su lado haciendo que desviara la mirad en mi dirección.

— Me gusta la relación que tienen, yo nunca la tuve con mi padre— le miré con curiosidad esperando a que accediera a contarme o dejarlo pasar— se pasaba el día trabajando por lo que no tenía tiempo para estar con nosotros y mi madre... bueno ella directamente no buscaba estar con nosotros, le resultaba más importante pasarse el día en la peluquería o con sus amigas.

— Lo siento yo...

— No te preocupes, es algo que con el tiempo aprendi a no darle importancia.

Sonrió ligeramente, pero en el fondo sí que algo le afectaba, no dejaba de ser su familia y vivir así tenía que ser horrible. Mi madre nos abandonó pero mi padre siempre nos dio todo el amor que nos faltaba, incluso cuando peor estaba.

— Será un gran padre algún día— me miró con un ceja levantada— Si esta en tus planes serlo, claro esta

— Siempre dije que no quería, pero supongo que en un futuro podría ser posible.

Le miré a los ojos fijamente, eran de un color precioso. Me sentía totalmente absorbida por su mirada, pero la magia se rompió cuando una Hannah embarrada en chocolate se metió en el medio cuando habíamos empezado a acercarnos rompiendo la magia del momento.

— ¿Se puede saber qué has hecho?

— Se me ha caído un poquito— coloco los dedos casi juntos intentando representar el poquito que se le había caido

Me mordí el labio exasperada antes de indicarle que fuera al baño para poder ducharla, me giré hacía Sander que se aguantaba la risa.

— deberías ir antes de que la lie en el baño

— Lo se— me levanté y deje un beso en su mejilla sorprendiéndole por tal acto.

Me fui corriendo para evitar que viera mi cara roja, por que si, mi cara se empezaba a poner roja solo cuando estaba con él.


¡Regalito de navidad adelantado!

Feliz navidad y feliz año a esta maravillosa comunidad de lectores.

XOXO

La seducción de la soberbia (#1SPC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora