20. Tregua

791 109 303
                                    

Antes de empezar quería dar las gracias a Yurena (@ragomisma en tw) y Mariana (@wavesofmar en tw) por pasarme las fotos de Raoul conduciendo 🥰❤️

Y ahora sí, vamo a leer.

🎸🎸🎸

El silencio es el protagonista de la noche. Raoul observa su cuaderno de composición con fijación, pese a que en realidad está más absorto en sus pensamientos que en otra cosa. Agoney lo entiende a la perfección y le da el espacio que cree que necesita, pero eso no significa que duela menos.

Harto de tanta incomodidad innecesaria, el canario decide hablar.

—Al final no acordamos cómo actuar con el tema del shippeo —suelta en un intento de descentrar la atención de Raoul y darle una pequeña tregua.

—Es verdad. ¿Qué sugieres?

—Bueno, pensé que podemos proyectar nuestra situación en otras personas —ofrece el mayor—. ¿Cómo reaccionarías si te emparejasen con Roi?

El rubio se toma su tiempo para pensarlo.

—Probablemente me reiría de la situación y estaríamos todo el día haciendo coñas —sentencia.

—Exacto —le da la razón con media sonrisa el moreno—. ¿Por qué es distinto conmigo pues?

"No me hagas esto ahora, anda". Pide para sus adentros el catalán antes de responder.

—Pues no sé. Tienes razón, supongo.

—Tratémoslo con la mayor naturalidad posible —sigue el insular—. Si alguien nos grita "ragoney" a la cara, nos reímos. Si nos piden fotos juntos, nos las hacemos. Si subimos algo juntos y las intensas que tenemos como fans se ponen como locas, lo ignoramos. No hagamos un mundo de ello.

"No es para nada tan fácil como lo pintas". Maldice mentalmente el contrario.

—Está bien —se encoge de hombros—. Podemos intentarlo.

—Guay.

Dicho esto, ambos comparten una sonrisa sin saber muy bien qué más añadir a la conversación antes de volver a centrarse en sus libretas. 

Sin embargo, esta vez es Raoul quien interrumpe el silencio.

—Oye, ¿podemos dejar lo de componer para otro día? Sé que nos urge terminar esto pero no tengo ni ganas de abrirme ni palabras para hacerlo —se sincera—. Además estoy un poco cansado, el día de hoy ha sido... demasiado.

—Lo entiendo perfectamente, Raoul —asiente con una mueca lastimera el tinerfeño—. Pero ni por asomo nos vamos a dormir.

—¿Perdón?

—Que no me da la gana que un día que debería ser feliz termine así —se cruza de brazos Agoney, pretendiendo con ese gesto dejar clara su indignación.

—¿Propones algo entonces? —Raoul echa su cuerpo hacia atrás en el asiento, haciendo crujir su espalda.

—Sí —asiente el mayor poniéndose en pie de un salto—. Coge móvil, cartera y llaves que nos vamos.

—¿Dónde nos vamos? —Frunce el ceño de forma escéptica el rubio.

—A alquilar un coche.

Prácticamente antes de terminar la frase, el canario ya ha abandonado la caravana, obligando a Raoul a tener que seguirlo para continuar la conversación.

—¿Y para qué vamos a alquilar un coche?

—Tú solo sígueme el rollo —pide Agoney buscando en Google sitios de renta de automóviles—. ¡Flipas! Hay un Europcar a diez minutos andando. Esto es una señal, vamos.

LAGUNA AZUL (Ragoney)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora