Erick es un reconocido modelo de alta costura, acostumbrado a las pasarelas y las cámaras, es lo que se puede decir...un engreido de primera categoría pero vamos...es Erick Brian Colón, obviamente tiene de donde creerse. Joel es un periodista gradua...
-Yo... realmente no puedo creerlo, no puedo. ¿Cómo es posible? ¿Estás loco acaso?
-Lo siento...yo no debí.
-Claro que no debiste, obviamente no debiste, Joel.
-Pero es que él fue quien dijo primero que no me quería ahí. -Joel realmente parecía un niño pequeño siendo regañado, sabía que esto no terminaría bien, por eso había llamado a Chris a la mañana siguiente, porque era la única persona que podría lidiar con Erick, era la única persona que lo podía ayudar a arreglar su cagada.
-¿Y por eso lo amenazas? -El castaño lucía realmente preocupado, estaba algo molesto pero el rizado podía notar que estaba nervioso y eso le llamaba mucho la atención, tal vez era solo porque el proyecto peligraba debido a la pelea con Erick pero Joel sabía que existía algo más ahí y eso lo intrigaba.
-No lo amenacé. -Si hubiese intentado parecer un bebé justificándose, no lo habría logrado tan perfectamente y eso fue lo que hizo que Chris suspirara antes de responder.
-Voy a tratar de ir con Erick, no creo que se encuentre bien después de eso y...bueno, no me corresponde a mí decirlo pero tocaste un tema delicado y no creo él te lo perdone. Esto es peor de lo que piensas y será mejor que no vayas a casa estos días.
-¿Qué?
-Eso...no vayas por favor, quédate en tu apartamento, yo me encargo de Erick y no le diré a Zabdiel pero debo irme ahora, él... él...no puedo dejarlo solo.
-Chris... espera...tal vez si voy contigo y le explico...
-Joel...realmente no quiero ser yo quien hable con respecto a eso, fueron ustedes quienes tuvieron el problema pero conozco a mi mejor amigo y se que no debe estar bien. Erick... él simplemente no va a perdonarte así tan fácil. Ve a tu apartamento, hablaré con Zabdiel y le diré que está enfermo o algo pero no puedo prometer que continuará con ese proyecto.
-¿Tan mal crees que se haya puesto? O sea...me golpeó, aún me duele la cara pero cuando se le pase el...
-No tienes idea de lo que causa lo que le dijiste. Digamos que eso le trae recuerdos que ha tratado de ignorar toda su vida porque le hacen daño.
Fue todo lo que respondió antes de largarse de esa cafetería y dejar a Joel sentado como un idiota porque eso era, Joel era sin duda alguna, el mayor idiota que existía en esta tierra. Supo que el error cometido le costaría caro, lo supo en el momento en el que Christopher se marchó después de dar una información que no sabía sin embargo ya sospechaba. Los sospechó cuando la tarde anterior se vió sosteniendo su propia mejilla luego recibir un golpe inesperado, lo sospechó cuando el ojiverde le gritó que no podía lastimarlo y Joel sabía, claro que sabía que había algo ahí, algo que el chico trataba de ocultar y que él hizo que cobrara vida nuevamente.
-La he cagado.
Habló en voz alta porque necesitaba expresarlo, necesitaba exponer lo que estaba sintiendo en su pecho, en las paredes de carne y hueso que resguardaban al corazón idiota que latía desbocado en su interior. Joel creía que sus latidos podrían causarle daño, no era normal el ritmo desenfrenado y doloroso, casi como si estuviera al borde de un colapso. La noche anterior no pudo dormir, su cuerpo se sentía pesado, como si millones de toneladas estuvieran impregnadas en su piel, por eso se marchó, por eso pasó las horas en el apartamento que le fue ofrecido cuando llegó a Miami.
Llamar a Chris había sido sensato, era el único amigo de Erick y creyó que podría ayudar. Estaba avergonzado porque nunca pensó que sus palabras fueran a causar tanto daño, tanto que hasta él mismo estaba sufriendo las consecuencias y es que por primera vez en la vida, Joel tenía un sentimiento nuevo, un sentimiento diferente y desconocido, un sentimiento que no sabía identificar pero se hacía una idea de lo que podría ser, el problema era que no se creía listo para afrontarlo, ni siquiera estaba seguro de que fuera así y eso lo tenía al borde de un colapso.
Dejó la cafetería y emprendió rumbo a su apartamento, Chris le había pedido que no se acercara a Erick y aunque muy en el fondo creía que tal vez podía remediarlo, era mejor escuchar a una persona que si tenía conocimiento sobre la vida del chico. El viaje fue corto, a penas unos minutos en los que prefirió caminar, necesitaba aire, espacio, necesitaba tratar de comprender lo que significaba lo que estaba sintiendo porque si no era capaz de comprenderse a sí mismo, jamás podría realmente rectificar su error y mucho menos podría asumir la aparente nueva realidad en la que estaba viviendo.
Necesitó una ducha larga para despejar la mente, lo único en lo que podía pensar era en ese par de ojos verdes que lo miraron con rabia la tarde anterior y eso lo estaba jodiendo, lo jodía por completo porque realmente no creía que fuera tan grave lo que dijo. ¡Joder! Solo había sido un escape porque Erick lo había herido primero y él quería devolverle el golpe bajo que de dió porque había dolido, Joel no lo supo en ese momento pero había dolido porque su estúpido corazón estaba sintiendo amor por Erick, un amor que ni siquiera podía calificar porque no tenía conocimiento alguno de que eso estaba creciendo en su interior.
"Será mejor que no vengas en unos días, Erick se encuentra mal y si se entera de que te lo he dicho, va a matarme. Ya hablé con Zabdiel y le dije que estaba enfermo, nos dió una semana pero del resto te encargas tú. Por ahora, no vengas."
Fue el mensaje que apareció en su celular después terminar su ducha y si creía que iba a relajarse pues estaba terriblemente equivocado porque las palabras de Christopher cayeron como dardos venenosos sobre su piel. Joel se lanzó a la cama mientras pensaba que responderle sin embargo no pudo. ¿Cómo respondería a eso? Todo estaba mal, el trabajo se vería afectado y seguramente Zabdiel estaría inquieto con eso, al final del día, había un contrato pero eso no era lo que le preocupaba, no, no podría importarle menos, su verdadera preocupación era el ojiverde.
"Erick se encuentra mal"
Y Joel necesitaba saber por que, necesitaba saber la verdadera razón, necesitaba conocer el motivo real por el cual unas pocas palabras habían desencadenado una crisis. Joel sabía que aún no tenía idea de lo que le pasaba, sabía que esa forma extraña en la que su corazón se desesperaba cuando veía a ese pequeño chico orgulloso, no era natural, sabía que no era algo normal para él sin embargo no estaba en sus manos controlarlo, no era algo que pudiera simplemente manejar. ¡Joder! Ni siquiera podía respirar tranquilo cuando lo miraba, Erick tenía esa belleza sobrehumana que lo hacía perder su propia calma porque si de algo había estado orgulloso toda su vida, es de que era heterosexual, ahora...ahora no estaba seguro.
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