El trayecto en auto

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-No tienes porque perderte la fiesta

-No me la pierdo, puedo siempre dejarte y volver... a menos que tú decidas retenerme en tu casa

-Estás tomado?

-Por qué crees que debería estar ebrio para decirte algo así

-Porque te me estás insinuando

-Porque me pareces atractiva y no me opondría a quedarme contigo en tu casa

-Bueno sigue soñando porque no te propondré eso nunca

-Nunca digas nunca, decía mi abuela y era muy sabia.

-No necesito que me lleves, ya me pedí un taxi

-Puedes siempre cancelarlo

-Puedo no hacerlo y tú puedes volver tranquilamente a los brazos de aquella rubia tentación

-?Lo dices por Sami?

-No me interesa su nombre

-Es que hay dos rubias no sé a qué brazos volver si no me lo precisas

-La de extensiones

-Oh, Tati, y no son extensiones, es pelo natural

-Ahora eres estilista?

-Y tú eres ahora tan prejuiciosa que juzgas gente sin conocerla

-Quizá debería irme, tal vez prefieras volver con alguna otra de tus víctimas del baño

-No hubo ninguna otra

Él me sonrió con una mueca de satisfacción que me hizo verlo demasiado engreído, creído y alzado

-Ok, esta es mi dirección.

-Sé cual es

-Eres ahora un acosador?

-No, pero recuerdas que tuve tu agenda unos días en mi poder

-Y vas grabándote información personal de la gente cuyas cosas dejan olvidadas en tu auto

-Ok, no entendí nada pero solo sé como llegar a tu casa. Y estoy sobrio, sino no me ofrecería a llevarte manejando. No soy tan irresponsable como crees

-Por qué piensas que creo que eres irresponsable

-Porque veo que solo piensas cosas malas y negativas de mi y nunca me dejas demostrarte lo contrario

-Y para qué querrías demostrarme algo

-Para que tuvieras una mejor imagen mia

Y a 'él que tanto le importa lo que yo piense de cómo es

-Ok, ok,  te dejaré hacerlo

-Paso por ti mañana entonces. Cinco está bien?

-Qué dices

-Ok, muy temprano. Siete entonces?

-No estoy entendiendo nada

-Tendremos una cita. Encuentro esa la única forma  de poder mostrarte quién soy realmente

-Ok, me llevarás a algún sitio horrible, me sacarás los órganos, los venderás en el mercado negro y me dejaras tirada en el mar luego de meter mi cuerpo en bolsas negras? ese será mi final?

-Y así dices que no piensas lo peor de mi

-Estaba bromeando tonto_ le digo empujándolo del hombro y él gira su mirada para ver mi mano sobre su piel

Ambos nos quedamos en silencio. La tensión comienza a sentirse pero ninguno dice nada. Llegamos a mi casa algunos minutos después que parecieron los más largos de mi vida y vuelvo a despedirme de él sacudiendo la mano.

Es que acaso nadie me enseño otra forma de despedida?

Un beso en la comisura de los labios por ejemplo? _ propone mi sucia conciencia pero no puedo reclamarle nada porque realmente es solo el reflejo de mis pensamientos, aquellos que no quiero terminar de aceptar.

Aquellos que he preferido reprimir, por miedo no solo al rechazo inicial, por miedo a enamorarme y volverme vulnerable con alguien más, alguien que podría hacerme sufrir.

o alguien que quizá te podría amar, amar de esos amores bonitos, de esos que te hacen suspirar, de aquellos que te inspiran a escribir, de esos que se roban tus miradas, de aquellos que te hacen sentir cada día más agradecida con la vida.

Ok, mi conciencia era a veces una excelentísima coach profesional y quizá era el reflejo de mi incipiente autoestima que quería demostrarme todo lo que valgo y que me merezco cosas buenas.

Todo en la vida conlleva riesgos y el amor también pero muchos dicen Es  mejor haber amado y sufrir que nunca haber amado así que me duermo pensando en la cita de mañana con Oliver.

Puedo ser tu Pepsi ColaWhere stories live. Discover now