Cap 10: Saliendo del anonimato

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POV ARIANA


Muchos dicen que el Karma existe y otros le agregan que no solo existe sino que es una M.... , ok sin utilizar palabrotas creo que me doy  a entender. 

Hace días, descubrí que el número desconocido no era realmente un desconocido para mi sino que era Oliver o Adam, o el modelo de Ck que encontré en el estacionamiento del gym o también conocido como aquel que me ayudo a reanimar la batería de mi auto. 

Ese mismo día no solo salió del anonimato sino que me explico cómo consiguió mi número y nada más alejado de la realidad, había olvidado mi agenda en su carro. Sí, digo nada alejado de la realidad porque soy famosa perdiendo, olvidando y extraviando cosas.

Mi madre siempre me decía que si no perdía la cabeza era porque la tenía pegada al cuello. Así de despistada suelo ser.

Lo único malo esta vez es que no solo la olvidé dentro del chico más arrogante que he conocido y más bueno también sino que en esa agenda tengo secretos de los que la sociedad y menos un hombre debería enterarse.

Cosas muy íntimas. Ok, lo siento. Sé que soy grande y ya no estamos en la época de anotar todo en la agenda a modo de diario. Debo superar y dejar de lado mi época de Pascualina donde anotaba todo, y agregaba el ticket del cine del chico con el que iba, el ala de la mosca que se posaba sobre mi cuaderno mientras decoraba corazones con la inicial del nombre de mi nuevo crush o cosas de ese tipo tan cursi. Ok , lo de la mosca admito que fue un poco asqueroso, nunca coleccioné un ala de mosca pero es un decir para darme a entender.

Bueno, retomando la idea de mi agenda/diario que ademas es de uno de mis personajes favoritos: snoopy. Es en ella donde tengo absolutamente todo lo que debo hacer, y como ya se los dije, pero debo recordárselos, sin ella no sé qué hacer. Porque soy olvidadiza al máximo, porque ni siquiera sé a que hora empiezo clases mañana, qué reunión tengo pendiente ni absolutamente qué me falta comprar en la dispensa.

Cuando Oliver me confirmó que tenía mi agenda en sus manos le pedí, cuasi rogué que me la entregué advirtiéndole que no la vaya a leer.

"Demasiado tarde campanita" 

Fue lo que me respondió y por la alusión al personaje imagine que debe haber leído todo, suelo dibujar a Campanita cuando tengo un día alocado y sé que deberé volar de un lado a otro, también he confesado que uno de mis crush literarios fue Peter Pan, jajaja. Si no Ares, no Luke, No Christopher Morgan, fue Peter Pan, así de infantil soy. 

Bueno volví a pedírselo implorándole que mi futuro, mi trabajo, mi salario y mi existencia dependían de lo pronto que pudiera recuperar mi agenda pero solo contesto

"Creo que me divertiré un poco más antes de devolvértela"

Ok, este hombre me estaba declarando la guerra. Cuando iba a dar todo por perdido recibí otro mensaje suyo.

"Puedo ser tu agenda electrónica. Te llegará por mensaje alertas de lo que tengas pendiente. Como ahora que en 15 minutos deberías estar en tu clase de piano"

Oh, no. El maestro Esteban y su clase de piano que tomé como crédito libre este semestre. ¿Había dicho 15 minutos?.  Ok, agradecí el hecho de estar cerca del campus así que corrí hacia mi clase pensando en que finalmente Oliver había sido tierno avisándome sobre mi clase y realmente me sería útil llevar la agenda de modo electrónico, finalmente el celular podría avisarme cuándo hacer tal cosa y no debería buscar en las páginas de snoopy.

¿Qué tierno? ¿Qué atento? ¿Qué considerado?. Él estaba reteniendo en su poder algo que no era suyo y en contra de mi voluntad. Era un idiota y necesitaba encontrar la manera de recuperar mi valiosa agenda. Pero no sé nada de él. 

Puedo ser tu Pepsi ColaWhere stories live. Discover now