Amor entre dimensiones

🖤Capítulo 23 (Traición)🖤

K: Vamos T/N, ¿qué tienes? parece que tu buen ánimo se fue después de avisar que ya habíamos llegado.

No me salen las palabras, ahora con más razón me quiero largar de aquí, necesito un abrazo de Aidan, la sabiduría de Elliot, ellos sabrían que decir en estos momentos, como me pudo ocultar la verdad, por qué no lo dijo desde que me vio entrar por esa puerta, por un lado es comprensible que una niña pequeña no va entender, pero sabía que yo no era normal desde un principio, también muy pequeña no era, es más, todos ya podíamos hablar o por lo menos no como lo haría una persona normalmente con una conversación fluida pero... ¿Cuando alguien en esta familia ha sido normal?.

K: Tierra llamando a T/N.

T/N: Klaus creo que es mejor dormir, hoy fue un día muy raro y quiero descansar, además creo que ya hablamos mucho por hoy.

K: Oh claro, entiendo -desanimado-.

T/N: No me lo tomes a a mal, luego te explicaré, pero esta noche no, ¿está bien?

K: Solo si prometes que lo contarás yo me doy por bien servido.

T/N: Sí, te lo prometo pero ahora a dormir.

Dando vueltas en la cama, no sé por cuanto tiempo he estado así y lo que he razonado es que ahora entiendo porqué mi supuesta nana supo a dónde traerme para no hacerse cargo de mí y dar por hecho que mi... bueno Reginald lo haría, no sé si todavía le deba decir papá, por un lado estuvo bien, así no tendría mas privilegios que mis hermanos o ser considerada la favorita de Reginald.

Mi cuarto estaba a obscuras totalmente pero poca luz era la que se filtraba por las cortinas aunque no me impedía ver lo que estaba en la habitación, Klaus estaba acostado y demasiado dormido en el sillón reclinable de una esquina, su respiración era fuerte para poder saber que estaba profundamente dormido. Me levanté de la cama, tomé una pequeña frazada y me envolví en ella, salí de la habitación, cerré con cuidado.

El frío era tolerable, al parecer ya no siguió nevando, pero se veía todavía lo blanco de los techos y árboles incluso la misma terraza de la academia, sentada en el borde de la misma, solo podía pensar en cómo irme, en como volver con ellos, muchas cosas pasaron desde que me fui de allá y llegué aquí, creo también que este día está en mi contra, ni estrellas en el cielo hay, solo me puedo concentrar en los pocos autos pasando y algunas personas, pues al fin y al cabo era...

A: Feliz navidad T/N.

T/N: ¿No deberías estar dormida Alisson?

A: Te vi subir, pensé que otra vez tenías el problema de sonambulismo, además hoy no hubo ronda de vigilancia o eso quiero pensar... Pero ¿Qué haces aquí?

T/N: Venía a despejar la mente, mucho que procesar por ahora.

A: -Se sentó a mi lado pero en el suelo- Supongo que tienes motivos para hacerlo por lo de tu regreso, el regaño y castigo de papá.

T/N: Sí, supongo que es parte con lo que tengo que lidiar, pero me enteré de una cosa que me hubiera gustado no haber escuchado.

A: Ay yo le dije a Vanya que se alejara de Cinco pero...

T/N: ¿De qué diablos estás hablando?

A: ¿No era de Vanya de lo que te enteraste?

T/N: No tiene nada, absolutamente nada que ver con ella, pero también me lo vas a explicar... es más, explícalo, suena interesante.

Ella soltó un suspiro antes de hablar.

A: Cuando Vanya tenía uso de razón "según", le empezó a llamar la atención Cinco, cuando estaba solo le hacía compañía, le ayudaba, pero él solo la veía como su amiga y pues en si casi como una hermana "real", el punto fue que luego Cinco y tú juntos era una idea que no le agradó del todo y cuando Cinco te empezó a poner el cuerno ella fue una de las principales en apuntarse.