𝐅𝐮𝐠𝐚 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐩𝐫𝐢𝐬𝐢𝐨́𝐧. 𝟏.𝟐

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Timothée Chalamet's POV.

Fuertes golpes en la puerta de mi casa me despertaron de mi siesta. Eché un vistazo a mi reloj para ver que eran las 20:30. Pauline y Kyle no estaban en casa porque habían ido al parque hace un par de horas y tenían las llaves de la casa por lo que no era posible que los golpes en la puerta fueran ellos. 

—¡Abre la puerta!— una voz gritó mientras me levantaba y me frotaba los ojos bostezando. Mire por el ojo de pez de la puerta para ver a dos hombres con uniformes de policía. Mierda. Mierda. Mierda. Mierda. 

—¡Abre la maldita puerta o la tiramos abajo!— grito uno de ellos. Tiré de mi cabello, de pronto despierto, pensando por lo que podrían estar aquí. Las posibilidades eran infinitas y tendría que abrir tarde o temprano. Antes de que pudieran golpear de nuevo abrí perezosamente, fingiendo un bostezo. 

—¿Timothée Chalamet?— preguntó el mas alto. Tenía un fino bigote que le hacía parecer ridículo y pelo negro azabache, como si estuviera en una película antigua. El otro era bajo y gordo, casi calvo y parecía divertido. 

—Si, ese soy yo.— respondí con calma. No es que esta sea la primera vez que sucede algo así. 

—Estás arrestado por participar en una pelea callejera la noche de ayer. Por favor, date la vuelta y pon tus manos en la espalda.— ordenó. 

—¿Cómo sabías que era yo?— pregunte, entrecerrando los ojos. 

—Un testigo te reconoció.— explicó. — ahora date la vuelta o lo haremos a la fuerza.— me burlé y di la vuelta, sabía que no debía poner resistencia. 

—Muy bien.— dijo el policía mas bajo mientras esposaba mis muñecas tras mi espalda. Él debe dar gracias a dios que no podía mover mis manos, porque de lo contrario le habría dado un puñetazo en la nariz. 

Me llevaron en su coche y miré desde el asiento de atrás como mis hermanos seguían jugando en el parque, ajenos a todo esto. Le di una patada al asiento delantero provocando que uno de los policía se diera la vuelta y se burlara de mí. — me gustaría ser mas cuidadoso si fuera tú, Chalamet. 

Maldita sea, voy a matar a ese maldito testigo que vio la pelea si alguna vez lo veía. 

Cuando llegamos a la comisaría del Bronx, me sacaron del coche y me llevaron dentro agarrando mis antebrazos y sin importarles si me hacían daño. Malditos policías, creen que aquí pueden tratar a la gente como la mierda y salirse con la suya. Algún día voy a tener mi venganza por todas las veces que me han traído aquí. 

—¿Una vez más, Chalamet?— el hombre de la entrada me saludó moviendo la cabeza. Yo había estado aquí bastantes veces e hice algunos amigos. Will era un buen hombre, probablemente el único en esta comisaría de mierda. 

—¿Qué pasa, Will?

Me pusieron en una celda que cerraron tan pronto como me encontraba dentro, asegurándose de que no pudiera escapar. 

—Chalamet, me alegro de verte por aquí.— una oscura voz fingiendo entusiasmo me hizo dar la vuelta. 

—Oh, no.— me quejé al ver a Tyler en la misma celda que yo, también esposado. Si no fuera o suficientemente malo estar bajo arresto, me tiene que meter con este hijo de puta. 

—Mira, yo no estoy contento de verte tampoco, pero como vamos a estar aquí por un largo tiempo, te sugiero que no nos ganemos mas horas en este infierno.— sugirió, apoyado contra la pared de piedra. 

—Si alguna vez encuentro al testigo que nos delató, lo voy a joder hasta matarlo.— murmuré entre dientes, sentado en uno de los paneles de madera que llaman asientos. 

Bronx - Timothée Chalamet (ADAPTADA)Where stories live. Discover now