CAUTELOSOS [ En Edición ]

CAPITULO 12 "PERSECUSION"

Se acerca para decirme algo más privado – no me gusta tu comportamiento en la fiesta y mucho menos cuando me fui – se separa para tomarme del mentón – me besaste Angel, recuérdalo; no creas que eso es cualquier cosa. Por qué ahora en adelante solo yo podre domar estos labios – consiente con su pulgar mi boca.

De aquí a ya cuando besar es símbolo de marcar.

Le suena el móvil y lo atiende, la cara que pone es como si fuera a matar a alguien (empiezo a dudar que sí). Me mira, pone una mano detrás de mi nuca y me empuja así delante juntando nuestros labios en una danza placentera y sincrónica.

Corta el beso, y se levanta dejándome sentada en el sofá. Agarra no sé qué de la mesilla y se va como llego, de la nada.

Entonces reacciono, hay no puede ser lo volví a besar. Pataleo y cojo una almohada para gritar.

SATHIEL LOMBORTE

No sé cómo porque contrato personas si son unos incompetentes, tengo la rabia al mil por mil, llego al asesor y pulso el botón, este empieza a bajar mientras yo pienso en como cortar pedacito a pedacito a esos inútiles; las puertas del asesor se abren y me abro paso.

-no pueden hacer su maldito trabajo bien – le lanzo un puño al "guardaespaldas" en jefe del pelotón de mi prima.

-señor no fue nuestra intención, ella entro al baño y ...- habla con los nervios de punta.

-no me importa si fue a cagar – lo encuello levantándolo – les dije que no la perdieran de vista y es lo primero que hacen- le mando otro puño tumbándolo.

-están bloqueando la conexión de rastreo, pero no les durara mucho – habla mi hermana mirando las pantallas.

-ni un minuto más Mila – le digo al hacker – o me das su ubicación o te vuelo los casos.

Mila rueda los ojos, ella viene conviviendo conmigo desde que tiene doce años, mi padre la recogió de las calles y al parecer nos salió con el don de ser una ama en la tecnología. Ella es una pieza clave aquí, como ella jamás. Por esa razón le resbala si llego a ponerle un cañón en la cien, la muy perra ya ha convivido lo suficiente conmigo para aguantarme.

En la pantalla de un mapa se ilumina un punto, dándome a entender que ya la ubico.

-guala – dice – está sobre la avenida shoardik – empieza a teclear, ingresando a las cámaras de dicha – pero qué demonios.

Su expresión me hace ver la pantalla y valla mi sorpresa a encontrarme a Angel conduciendo un auto a todo dar en la avenida mientras cinco camionetas la siguen y bueno seria las siguen ya que mi prima va de copiloto intentando curarse lo que parece una herida de bala en el auto.

-que hace esa mocosa hay – pregunta Amón con fastidio.

-crees que seguiría aquí sabiéndolo – digo con la poca paciencia que tengo.

ANAITA ANGEL WORSTED

Veintiún minutos antes

Me acabo de acordar que tengo que entregar un reporte y este se encuentra en mi casillero. Rápido subo en el auto de Hades que por alguna razón sigue aquí, arranco mientras escucho música por la radio; la luz roja en una parada me hace frenar, espero a que cambie de color, pero mis ojos captan la escena.

Emily tiene la cabeza fuera de la ventana de una camioneta, y parece como si estuviera pateando a alguien de un momento a otro la toman del cabello provocando un grito de su parte y es así como mis impulsos se hacen presentes, pisando el acelerador choco contra la camioneta donde vi a Emily.

Me bajo de mi vehículo cogiendo el bate de béisbol de mi hermano, me encamino a la entrada y abro la puerta, Emily esta peleando con cuatro hombres que intentan sostenerla. Me adentro y empiezo a pegarles quien se me atraviesa, veo que empiezan bajarse más hombres del resto de las camionetas y mi sistema de defensa se activa.

Agarro a Emily del brazo sacándola en medio de disparos, la empujo dentro del auto y subo yo, retrocedo y doy marcha al carro al igual que los demás.

-que mierda está pasando Emily – pregunto agitada

-debería de hacer yo las preguntas – dice – por que estabas justo en ese lugar y me sacaste.

Le doy una ojeada rápida, y noto que su brazo sangra. Por el reflejo puedo ver que es porque una bala la rozo, pero aun así tiene demasiada sangre. Busco en el maletero mientras conduzco como puedo, le lanzo el botiquín y me acelero.

-arréglate eso antes de que ensucies el auto – le digo

Ella no responde se dedica a darle atención a la herida, cojo la autopista y noto que son cinco camionetas siguiéndome. Empiezo a orar por un milagro ya que están disparando y yo solo tengo un bate, entro en medio de un vecindario, los disparos no cesan y estoy quedándome sin salidas.

De pronto unas camionetas se atraviesan al frente mío, y digo que me llegó la hora. Pero al momento de disparar no nos atacan a nosotras si no a los que nos están siguiendo.

-que demorados son – dice Emily poniéndose la gaza o algo así.

Los disparos cesan y creo que necesito una tonelada de azúcar si no quiero morir, Emily baja del auto y yo reposo mi cuerpo, veo cómo sale de una camioneta Josenea, una chica de capul que nunca eh visto, Amón, tengo entendido que Erick es el hermano mayor de Emily y estos dos se abrazan.

Veo que empieza a bajar alguien más, y mi mandíbula cae al suelo literalmente.

Del auto sale nada más ni nada menos que Sathiel, con una pistola en la mano posándose al frente de todos, dos hombres cargando a un señor de los brazos y lo tiran al frente de los que debo imaginar son cabecillas.

-sabes las consecuencias – dice Sathiel.

El sujeto empieza a retroceder pidiendo perdón y bla bla bla, Sathiel parece disfrutar de eso y Emily le manda una patada al rostro terminando de tirárselo.

-afróntate a las consecuencias – dice el diablo antes de arrebatarle con su pistola, la vida al cuerpo que yace en el suelo.

Dejando toda la masacre de lado, veo el asiento del copiloto y está lleno de manchas con sangre.

*Ay no no, no, me van a matar*

Y justo como si el destino me odiara entra una llamada de parte de mi hermano, contesto intentando quitar la mancha.

-ANAITA – escucho el grito de Hades del otro lado.

-holaaaaaa hermanito – digo manteniendo la calma que no tengo – como estas, donde estas, ya comiste – me corta a medio camino

-ANAITA DEVULEVEME MI AUTO AHORA MISMO – regaña el

Veo el desastre y claramente no lo pienso de volver así.

-sí, sí, claro espérate termino de hacer mis vueltas y llego a casa.

-ANAITA NO QUIERO UN SOLO RAÑON POR QUE TE JODO –

-si ya también te amo adiós.

-ANAIT- cuelgo antes de que me reproche más.

Entro en pánico, empiezo a pegarme con el volante mientras hallo la mejor solución.

-CARAJO – alego pateando el frente dela auto, lo prendo y me pierdo por las calles.

Una persona normal, estaría preocupado por que presento una masacre en lo que claramente son dos bandas ilegales, pero como yo no soy así estoy más preocupada por el auto de mi hermano que por las muertes.

Aunque básicamente eran ellos o nosotras.

No me saco de la cabeza la imagen de Sathiel matando a ese hombre, no es que me atormente, al contrario, es una sensación de gozo y alegría y allí es donde caigo en cuenta que estoy demente.