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Daryl miraba el cigarro en su mano, mientras quemaba su piel con la punta de este, sin importarle la cicatriz que este pudiera causarle.
El hombre estaba sentado en las gradas de su casa en Alexandria, bastante temprano en la mañana para su gusto.
No se había levantado temprano, a decir verdad, ni siquiera había podido dormir después de lo sucedido con Denise.
Y el saber que la intención de Dwight había sido dispararle a Cameron no ayudaba al rencor que él sentía hacia ese grupo.
No quería hacer alguna estupidez, y en lo personal consideraba que casi nunca hacía algo lo suficientemente malo, pero esta no estaba siendo su semana, y ya había visto a demasiada gente morir, y no planeaba sentarse a esperar a que la siguiente persona en morir fuera su familia.
El arquero se levantó de las gradas, y apagó el cigarrillo en el suelo, antes de caminar hacia su motocicleta, que estaba estacionada frente a él.
Pero una rasposa voz detrás suyo lo detuvo.
—¿A dónde crees que vas, Darylina? - la voz de Merle sonaba burlona, como siempre, pero se notaba un poco de preocupación en sus palabras. — ¿Ya extrañas a tu novia Dwight?, ¿o quieres que te roben algo más?
—No estoy de humor, viejo.
— ¿Crees que no lo he notado? -El mayor ya estaba junto al arquero, viéndolo con una pequeña sonrisa de molestia. —Sé que ya lo sabes, pero te lo diré para que no lo olvides; Si vuelves a salir te van a matar, y lo que sea que estés pensando hacer es una estupidez, así que baja de esa moto antes de que te la rompa en la cabeza.
Daryl tenía su mirada baja, y hace algunos años eso significaría obedecer de inmediato, pero ahora era diferente, por lo que el menor simplemente negó, sin importar la obvia molestia de su hermano.
—Tú no entiendes.
—Lo que entiendo es que harás que te maten.
—Debo ir. -aseguró, y antes de que Merle respondiera, el castaño levantó un poco el rostro, mostrando sus ojos llorosos.
No era tristeza realmente, sino frustración. Demasiada para él.
—Denise está muerta por mi culpa.
—Sabes que no es así. -intentó explicar el mayor, en un pequeño susurro.
—Dwight quería matar a Cameron, la pudo haber matado. Yo le conté sobre ella. -hablaba, mirando al mayor. —Es mi culpa, yo maté a esos hombres, y si me quieren quitar algo sé que será a ella. Merle, si regresan algo le pasará a Cameron.
—Nadie vendrá, y nada le pasará a Cameron.
—¿Pero y si pasa? -el murmuro del arquero era pesado, como si se quisiera convencer de que estaba exagerando, pero él sabía que podría pasar. —Necesito matarlos antes de que lleguen, antes de que siquiera piensen en regresar, necesito hacerlo ahora.
