Feliz ignorancia

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Incluso cuando es el único momento en que puedo vivir en una feliz ignorancia, me es arrebatado.
Vivimos en un país en donde la feliz ignorancia es pan de cada día. Cajas brillantes, bailes que son más concurso de quien habla más rápido y fuerte, antes de quién baila mejor.
Pero no, no puedo tener ni un ápice de feliz ignorancia.
Siquiera si es inocente.
Siquiera si es disimulado.
No me había dado cuenta de que tenía mi propia ignorancia.
Y no está mal que ayuden a abrir lo ojos, pero...
¿Por qué no ponen el mismo énfasis en abrirselos a todos los demás?
Estoy cansada de vivir rodeada de gente que "es así, déjalo". Todos eligen el camino fácil, pero si yo lo hago, es pecado.
A la persona que encuentran más vulnerable, a la que realmente le importa, ahí le apuntan.
A la persona que mas le duele, en esa llaga le meten el dedo.
Vivimos en un mundo en que aceptamos la ignorancia colectiva y destruimos con todas nuestras fuerzas a los pocos que sí podrían ayudar a hacer un cambio.
O ellos ya vienen un tanto destruidos. Porque ver este mundo desbalanceado ya te destruye un poquito el alma y la voluntad.
Temo que esta realidad me destruya lo poco que queda de mi alma.
Temo que esta realidad destruya lo que quedan de mis sueños.
Temo que esta realidad se trague por completo lo poco que queda de lo que, auténticamente, soy.

Pintar Amor en mi PielWhere stories live. Discover now