Mastermind: Inicio de la anarquía (EN HIATUS)

Cap. 8: Afrontamiento

Inko esperó tensamente en la puerta por el juicio de Rei. No sabía exactamente qué estaba esperando, tal vez algo como gritar o hacer que la echaran del hospital, pero definitivamente no era una pequeña sonrisa amable y Rei acariciaba la cama para invitar a Inko a sentarse a su lado. Inko frunció el ceño en confusión y cerró suavemente la puerta detrás de ella antes de cruzar la habitación. Miró a Rei por última vez en busca de confirmación antes de sentarse rígidamente después de recibir un amable asentimiento. 

Rei mantuvo esa pequeña sonrisa mientras se giraba para mirar por la ventana de nuevo, "Es extraño como madres, ¿no? Siempre nos culpamos por cosas que no son culpa nuestra. Es un placer conocerte finalmente, Inko Midoriya. Eres la mujer que crió a Mastermind".

Inko hizo una mueca de dolor, su culpa la golpeó con casi la fuerza suficiente para saltar y huir, pero se obligó a quedarse. A pesar de que esto era profundamente incómodo, todavía tenía que hacerlo y correr mucho ahora no iba a hacer nada más que dar un ejemplo más de cómo era una mala madre y una cobarde. 

"Yo ... necesito disculparme por Izuku." La voz de Inko se quebró y supo que probablemente estaría llorando si ella misma no hubiera llorado durante la última semana. "Tu Shouto estaba en camino de convertirse en un héroe, pero entonces ... mi bebé, él ... No fue justo por su parte corromper a tu hijo y llevarlo hacia la oscuridad de esa manera. Mi hijo fue una mala influencia y lo siento".

Aparentemente no estaba tan llena de lágrimas como había pensado, porque casi saltó cuando Rei usó suavemente su pulgar para limpiar las lágrimas que habían comenzado a correr por sus mejillas en algún momento durante su disculpa. No quería mirar, sabiendo que Rei probablemente la estaría mirando con odio y rabia por lo que había hecho su hijo y alentó a su propio hijo a hacer también. Después de todo, Rei estaría completamente justificado en odiarla, pero aun así, Inko no pudo evitar mirar hacia arriba con una enfermiza sensación de curiosidad autodestructiva. 

Cuando lo hizo, casi se sorprendió al darse cuenta de que, con todas las emociones en el rostro de Rei, el odio no era una de ellas. Ni siquiera parecía enojada. En cambio, había lágrimas en sus propios ojos mientras sonreía con tristeza, "No tienes nada de qué disculparte. Si alguien carga con la culpa por lo que se convirtieron mis hijos, ese sería mi esposo y yo. Les fallamos y ya estaban rotos cuando su hijo los encontró. En todo caso, debería darte las gracias".

"¡¿Q-qué ?!" Inko se apartó rápidamente. "¡N-no! Yo ... ¡crié un monstruo! ¡Deberías odiarme, no agradecerme! "

"Mi Shouto estaba roto". Rei le recordó gentilmente. "Tu hijo vino y recogió los pedazos. Reunió a Shouto con su hermano y le dio no solo un lugar al que pertenecer, sino una familia, hasta donde yo sé. Por mucho que odie admitirlo, esta podría ser la primera vez en la vida de Shouto que en realidad está rodeado de una familia que lo ama y se preocupa por él, en lugar de su peculiaridad o lo que puede hacer ".

Rei suspiró y volvió a mirar por la ventana, "Cometí muchos errores al criar a esos niños. Bueno, criando a todos mis hijos, pero a esos dos en particular. Enji ... Puede que no haya elegido casarme con él, pero tampoco luché contra eso. No le detuve para que dejara a Touya a un lado o empujara a Shouto demasiado fuerte. Les fallé a ambos ".

"Oh ..." Inko no sabía muy bien qué decir. Rei tenía que enfrentar sus fracasos como madre al igual que Inko y ambos estaban lidiando con la misma culpa y ansiedad mientras se preguntaban qué podrían haber cambiado o hecho mejor para evitar que sus hijos se convirtieran en asesinos. 

Rei respiró hondo y puso sus hombros en determinación, "Pero es por eso que necesito darte las gracias. Criaste a Izuku para que se preocupara por otras personas y él eligió cuidar de mi hijo. Izuku estuvo allí para Shouto cuando nadie más lo estaba, ni siquiera yo, y le dio a mi hijo una meta y un propósito más allá de lo que mi esposo lo creó y por eso estoy tan agradecido por todo lo que tú y tu hijo habéis hecho por mi familia."

"Pero…" Inko la miró con incredulidad, "Pero mi hijo es un villano. ¡Has visto las noticias! ¡Izuku mata gente! ¡Hizo que Shouto matara gente! "

Rei negó con la cabeza, "Lo que sea que mi hijo haya hecho, fue su elección. Dudo mucho que Izuku hubiera podido obligarlo a hacer algo que no quería hacer. Las acciones de mi hijo son suyas y, aunque desearía que esos chicos no tuvieran que matar gente para ser feliz, no voy a fingir que no entiendo por qué eligieron ese camino. En todo caso ... bueno, en todo caso, estoy orgulloso de ellos por recuperar el control de sus propias vidas ".

Rei se rió mientras Inko la miraba con horror, "Sé cómo me hace sonar eso, créeme. Sueno exactamente como alguien que debería estar aquí en el manicomio, ¿y sabes qué? Quizás lo haga. Pero ya les he fallado lo suficiente a mis hijos, no voy a seguir cometiendo esos errores al no apoyarlos y animarlos a perseguir lo que los hace felices ".

"Yo ..." Inko se puso de pie. "Tal vez debería irme".

Rei asintió y volvió a mirar por la ventana, "Entiendo. Sé que no quieres aceptar mi gratitud y es más fácil creer que estoy loco, pero aún así ... gracias ".

Inko solo asintió antes de recoger su bolso y salir corriendo de la habitación. No habló con nadie más cuando salió del hospital lo más rápido que pudo, ignorando las miradas de odio del personal al pasar. Una vez que estuvo en la calle, Inko exhaló un pequeño suspiro de alivio. Rei no estaba en su sano juicio, por supuesto, no había otra forma en la que ella estaría agradecida de que su hijo se convirtiera en un asesino, por lo que Inko no necesitaba pensar dos veces en la conversación. 

Ese conocimiento no le impidió pensar en ello durante todo el viaje a casa.

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Katsuki tiró sus mantas al suelo con frustración. No podía dormir y todo apestaba. Normalmente, cuando estaba enojado o algo estaba ... bueno, sin molestarlo, Katsuki no se molestaba como un estúpido extra, pero aún así, cada vez que las cosas se ponían demasiado, generalmente solo peleaba con pelos de mierda hasta que se sentía en control de nuevo, pero eso ya no era una opción. Kirishima no le hablaba y tampoco los otros extras que normalmente se quedaban a su alrededor como un molesto enjambre de mosquitos o algo así. Katsuki no los extrañaba, no lo hacía, pero seguro que era mucho más tranquilo sin ellos. Tampoco podía pedirle a alguien más en la clase que peleara con él, porque todos lo odiaban también, pero al menos habían comenzado a odiarlo antes de todo el asunto con Deku. 

Y ese era el problema, ¿no? Deku. Lo que Katsuki realmente quería era sacar toda esta estúpida inquietud del idiota que la había causado, pero Deku se había encerrado en el Tártaro y Katsuki no podía golpearlo como se merecía. Sin embargo, necesitaba darle una paliza a algo. Gravemente. 

Habría ido al gimnasio y destruido uno o dos sacos de boxeo, pero lo había intentado todas las noches de esta semana y todavía no lo había calmado lo suficiente como para poder dormir. Si tan solo hubiera prestado más atención a lo que Deku se estaba convirtiendo, tal vez Katsuki no hubiera perdido la oportunidad de derrotarlo y demostrar que era mejor que ese estúpido nerd. Le habría dado una paliza a él y a esos estúpidos extras que siguieron sus pasos ...

Katsuki se congeló. Eso fue una idea. Puede que no sea capaz de descargar su rabia con el deku que se lo merecía, pero había muchos idiotas en las calles que se inspiraron en el nerd y ahora que no necesitaba una licencia para usar su peculiaridad, no había nadie impidiéndole convertirlos en pulpa. Puede que no sea lo que necesitaba, ¡pero era lo mejor que podía hacer!

Sonrió salvajemente mientras tomaba sus zapatos y una sudadera con capucha negra y se vestía antes de salir por la puerta. Claro, era un poco más complicado con el sistema de dormitorios y definitivamente sería más fácil los fines de semana cuando visitara a su vieja bruja, pero Nezu y Aizawa estaban demasiado ocupados rediseñando el curso de héroes para preocuparse por lo que estaba haciendo un estudiante en el medio de la noche, especialmente cuando ese estudiante era la oveja negra de la clase. 

No pasó mucho tiempo para que Katsuki saliera de las puertas, considerando que la seguridad estaba destinada a mantener a la gente fuera, no evitar que los estudiantes escaparan, y estalló algunas explosiones antes de dirigirse hacia la oscuridad. Era hora de que algunos pequeños sintieran la ira de King Explosion Murder.

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×× Bakugou... no ××

(1529 palabras)