Cap. 5: Causa y efecto

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¿Y a quién recurrió Nezu como experto en actos heroicos clandestinos? El héroe clandestino: Eraserhead. Era un maestro en mantenerse fuera de los medios y operar en las sombras, por lo que el único curso de acción razonable era ponerlo a cargo de encabezar el nuevo programa de heroísmo. Por un lado, era una oportunidad maravillosa para finalmente arreglar las cosas que Shouta odiaba desde que era estudiante. Se había deshecho del festival deportivo, por ejemplo, para que no transmitieran las peculiaridades de los estudiantes a sus enemigos, y en realidad había obtenido la aprobación para cambiar el examen de ingreso a algo que realmente midiera la dedicación y el control de las peculiaridades de los estudiantes, en lugar de simplemente buscar caprichos llamativos y destructivos, por lo que estaba agradecido por esas victorias. Por otro lado, sin embargo, tenía que crear un plan de estudios casi completamente diferente para incluir elementos básicos clandestinos como el parkour, la recopilación de información y el sigilo, que era mucho trabajo. Las clases de manipulación de los medios habían cambiado de cómo mantener la atención del público y obtener una buena reputación a cómo evitar a los reporteros y cómo difundir información errónea para que cualquier artículo escrito no equivaliera a una sentencia de muerte. Los otros maestros y la mayoría de los estudiantes estaban completamente perdidos mientras intentaban navegar por una carrera que ahora era fundamentalmente diferente a la que se habían inscrito.

Y todos esperaban que él los guiara a través de él. 

Shouta suspiró mientras terminaba de lavarse la cara y lo miraba en el espejo. ¿Era normal empezar a ponerse gris a los 30? Probablemente no, pero, de nuevo, Shouta nunca antes se había preocupado por su cabello, así que no estaba dispuesto a empezar ahora. Agarró un elástico del lado del fregadero y tiró de su cabello en un moño a medias mientras salía del baño para comenzar con el desayuno. 

Eri ya estaba despierta, lo cual no fue una sorpresa. El insomnio era un síntoma bastante común de trastorno de estrés postraumático y Shouta había tenido mucho cuidado de hacerle saber a Eri que estaba bien y que podía hacer cosas como dibujar o mirar televisión cuando no podía dormir. Sin embargo, en lugar de una caricatura, esta mañana estaba viendo las noticias, un dibujo olvidado y crayones sentados en la mesa frente a ella. 

"... actualmente en espera de juicio en el Tártaro". Dijo el reportero, la pantalla verde detrás de él parpadeó con imágenes del arresto de Midoriya. 

Parecía que los buitres no estaban hablando de otra cosa últimamente. Fue Mastermind esto y Midoriya aquello y su favorito personal, ¿podría alguien sin peculiaridades realmente hacer todo esto? Fue ridículo. Sin embargo, eso fue lo que obtuvieron por enfatizar constantemente poderosas peculiaridades. La peculiaridad de alguien no se equiparaba a su potencial y definitivamente no se equiparaba a su nivel de peligro, si el ascenso al poder de Midoriya había probado algo, pero los prejuicios de la gente los cegaban ante ese hecho. Shouta pasó una mano por el cabello de Eri. Si alguien más hubiera tratado de tocarla, se habría congelado y presa del pánico, pero con Shouta se inclinó hacia el toque. 

"Hey niña." Se sentó pesadamente a su lado en el sofá. "¿Cómo estás esta mañana?"

Eri frunció el ceño y miró la pantalla, donde los reporteros seguían hablando sobre los mismos hechos exagerados que habían descubierto sobre el ascenso de poder de Mastermind, "¿Mastermind-sama va a estar bien?"

Shouta suspiró. Eri había estado teniendo dificultades con el arresto de Midoriya, obviamente. Él la había salvado de su abusador, incluso si originalmente no lo había querido, por lo que obviamente era confuso que lo trataran como un villano cuando ella lo veía como su héroe. 

Mastermind: Inicio de la anarquía (EN HIATUS)Where stories live. Discover now