Capitulo 16: Ethia

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                                                                                        XVI
                                                                                       Ethia


-Estamos a 8km de las tierras enemigas, Capitán – Danielle había roto el incomodo silencio que habíamos generado Tom, Ethan y Yo.

-Enterada – pronuncié – Sally, desaparécenos.

-A la orden capitán Lenova.

Sally era perfecta, mucho mejor que Jill, de hecho Jill solo era una copia de mismo prototipo de Sally, había pasado cientos de días charlando con ella como si existiera, siempre tenía esa sensación de que ella existiera de verdad.

-Camuflaje encendido, escudos activados – Ethan hacia un excelente trabajo en los segundos controles de mando de los cuales había retirado a Tom minutos atrás.

-¿Estás segura de que no nos atacaran? – la voz que Thomas estaba usando era totalmente pesada, cargada de furia y orgullo.

-Segura, Laski. De todas maneras prepararen sus armas, la diplomacia no suele ser siempre la mejor opción – giré un poco la cabeza para mirar a Tom guiñándole un ojo que lo hizo removerse en su asiento.

-Pareces una demente, Akira – bufó. Lo mencionado con anterioridad provocó un par de carcajadas de Ethan y una risilla de Danielle.
--Solo a veces, tú lo sabes bien – esta vez hablé seria.

- 03 kilómetros…- Sally volvió a hablar. Seguimos adelante – Hemos rebasado la frontera enemiga, hay algo en mis cálculos que está mal… al menos un par de naves deberían escoltarnos o pedir que aterricemos, no tengo señales de vida de ningún lado…

-Es cierto Capitán – Danielle había tomado control en los mando justo detrás de Laski – nada a la redonda, deberíamos de haber sido alertados ya co…- no terminó de hablar cuando la nave se sacudió ferozmente.

-¡Mierda! – maldijo Ethan. Lo mire desaprobatoriamente y traté de equilibrar la nave.

-Falla en el propulsor dos- La voz de Laski retumbó en los auriculares que me acababa de poner.

-¡Misil a las doce en punto! – pronuncio Danielle con preocupación.

-¡Sujétense! – les ordené. Los mandos del Jet estaban totalmente parpadeantes de luces rojas constantes que te recordaban que estas a punto de morir. El misil nos seguía de cerca a donde quiera que tratáramos de esquivarle.

-¡Ahí! – señaló Ethan una vieja base militar abandonada con dos enormes torres de vigilancia con una bandera azul y una enorme estrella en el centro de ella.

-Estamos cerca. ¡Sally! Encárgate de esos estúpidos misiles ahora.

-Esperaba que lo dijera Capitán Lenova – Y como por arte de magia los misiles explotaron en el aire.

-¿Qué tenemos? –preguntó Laski.
-No hay ningún rebelde aquí, deben estar escondidos en alguna parte de este lugar…
-Tenemos que aterrizar – dije seria.
- ¿Estás loca verdad? – Me cuestionó Ethan – Nos van a matar…
-Lo dudó mucho, los misiles fueron detonados a distancia, no hay más que un par de gente rebelde en este lugar, mis cálculos no son muy certeros – añadió Sally.
-necesitamos revisar los motores.

Definitivamente necesitaríamos demasiadas refacciones, los dos propulsores estaban demasiado dañados, me reprendí mentalmente al no haber traído a alguno de los nuevos reclutas expertos en mecánica.

-¿Oyeron eso? – habló Danielle quien había estado más inquieta de lo normal en los últimos minutos.
-Tenemos compañía – Laski tomó su posición de ataque

- ¡Ethan a las doce! – le grité a mi hermano mientras le disparaba al rebelde que había atacado.
-Retrocede Danielle – le ordenó Laski.
-¡Venimos en son de paz! – grité yo.
-¿Sabes que eso nunca funciona, verdad?
-No, pero si la fuerza bruta. ¡Avancen!

Solo eran cuatro rebeldes, no eran mucha competencia para nosotros cuatro. Avanzamos con sumo cuidado hasta una de las enormes construcciones que mas viene parecía una enorme bodega.

-¿Es aquí? – preguntó Danielle.
-Si, pero hay algo distinto…
-¿Dónde está?
-...Ethia, no hay nadie aquí ya, mira – señaló una vieja cantimplora que aun tenia rastros de agua, era un lugar muy caluroso.
-Sigue un poco fresca… se fueron hace 10 minutos, debemos salir de aquí, hay algo aml en todo esto.
-Es una emboscada – añadió Danielle mientras señalaba un par de explosivos atados a un pilar enorme…
-Tres minutos, corran… -Laski me tomó de la muñeca y me arrastro hacia la puerta de salida, Ethan y Danielle iban frente a nosotros.
-¿Dónde estás? – pregunté al viento en busca de una respuesta de Asa.
- ¡Dos minutos, sigan corriendo! – Gritó Ethan
-Ethia, no te detengas…
-¡Pero no hemos encontrado a Butterfield – le reproché.
-Butterfield no estaba aquí, solo ha sido una trampa, andando.

Apenas salimos la gran bodega explotó detrás de nosotros levantando una onda de polvo y un sonido espantoso. Caímos hacia el frente por el impacto de las ondas.

Sentía el dolor en mi cuerpo y mis ojos se cerraron rápidamente, todo volvió a estar negro.

<< ¡Ethia, despierta! Estas cerca…>>
<<Estas cerca… despierta>>
<<Por favor, abre los ojos, no les digas donde está el aro>>
<<¿Dónde estás? ¿Qué ha pasado? ¿Qué es el aro?>>

-Arriba, levántate – Ethan me había ayudado a levantarme
-¿Dónde están Danielle y Laski? – Tosí el polvo que me había entrado a la boca
-Están bien vamos… el impacto te lanzó más lejos que a nosotros… debes vitaminarme mas – se burló de mi y era cierto ambas cosas había sido lanzada más lejos, caí cerca de una construcción oscura y destruida.
-¿Dónde estamos?
-Amm, unos diez metros de nosotros. ¿Qué crees que sea esto?
-Era una base militar, esto debe ser un hangar para transportes… ¿Qué es…- traté de hablar pero un dolor me invadió en el pecho que hizo que me torciera de dolor..
-Ethia, ven – me tomó mi hermano con cuidado – creo que vi algo…
-Vaya…- me burlé.
-Ni casi muerta dejas de ser sarcástica… ¿Ese no es…- no terminó de hablar porque señaló una mochila de viaje con la insignia de la escuela con manchas de sangre, mi corazón se detuvo.
-Santo cielos….- era de algún chico del sector 8 – llama a Laski, mantén los ojos abiertos.

Ethan y yo caminamos hombro con hombro inspeccionando el lugar, era una pequeña escena trágica, tres cuerpos totalmente golpeados y desangrados ¿Qué clase de persona pudo haberle hecho eso a unos cuantos jóvenes? Si acaso eso podía ser una persona… No tenía muchas ganas de continuar, ver a compañeros de batalla así de esa forma era totalmente horrendo.

-Ethia, no tengo señal aquí, tenemos que regresar, no creo que haya nadie vivo aun…
-No, Butterfield está aquí
-¿Cómo lo sabes? ¡Ethia cuidado! – Ethan me empujó de lado y el impacto de una pistola de plasma fue a parar en la pared más cercana.
-¡Jesús! – grité ya que había caído en la pierna que había sido lastimada.
-¿Estas bien? – preguntó el castaño mientras me ayudaba a levantarme, asentí.
- * ¡culture de guerre universitaire! – grité en forma de señal, algo que habíamos aprendido en la academia cuando estábamos siendo atacados por nosotros mismos, quiero decir… ya saben. Era una señal para detener el fuego.
-Avanza…- me ordenó mi hermano.

Frente a nosotros había una especie de pequeña pared y detrás de ella estaba Butterfield, moribundo.

-Sabia que vendrías…- fue lo único que dijo y se dejó caer de espaldas, vaya estado, era deplorable.
- Oye, aguanta ya estamos aquí…- me arrodillé junto a él y le hice una señal a mi hermano para que me ayudase a llevarlo de vuelta. Asa me tomó de la mano fuertemente y sentí como dejaba algo en la palma de mi mano, lo miré a los ojos: El aro.
-Protégelo por mí…
-¡Ethan! ¡Rápido! ¡Asa, aguanta!...

*Guerra de la cultura académica*

United Until The War. #WOWAwardsWhere stories live. Discover now