Cassiopeia Black creció con más en su plato que una adolescente normal. No llegó a ponerse vestidos rosas ni a llorar por chicos que le habían roto el corazón. No. Estaba atascada preocupándose por sus hermanos y lo que depara el futuro.
James Potte...
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(capítulo cuarenta y nueve)
CASSIOPEIA BLACK se sentó con la cabeza en una de sus manos mientras golpeaba la mesa de madera con la otra, su manera de aplaudir distraídamente por cada primer año que se clasificaba ese año.
Ella aplaudió cuando un niño se unió a Ravenclaw, sus mejillas rojas cuando la casa azul y bronce comenzó a vitorearlo y aplaudirlo en voz alta, dándole palmaditas en la espalda mientras se sentaba.
La clasificación siempre fue bastante aburrida en su opinión, no entendía por qué necesitaba ver a dos docenas de estudiantes de primer año ser clasificados en sus casas, cuando ni siquiera los conocía, y no es como si quisiera llegar a conocerlos.
Por lo general, tenía a Nova a su lado, lo que hacía que la ceremonia fuera más llevadera, ya que los dos Slytherin solo hablarían y jugarían durante todo el proceso, pero por razones obvias, eso no estaba sucediendo este año.
La chica tampoco quería comer con Regulus, pensando que solo quería pasar la noche poniéndose al día con amigos, no queriendo a su hermana mayor cerca, lo que potencialmente lo avergonzaba.
Cassie bostezó levemente mientras miraba arriba y abajo de la mesa de Slytherin, frunciendo las cejas al notar un puñado de asientos vacíos arriba y abajo de la mesa.
Levantó la cabeza de sus manos y aplaudió lentamente mientras se pronunciaba el nombre de otra casa, mirando hacia arriba y hacia abajo de la mesa una vez más, inclinando la cabeza ligeramente hacia un lado.
No entendía por qué algunos Slytherin se habían ido, una de las personas que pensaba que se había ido era Crabbe, y él estaba en su último año, así que no era como si tuviera que irse mucho de todos modos.
Tampoco vio los rostros de algunas de las familias más purasangre que estaban en Hogwarts, la persona más joven que se dio cuenta de que faltaba estaba en su quinto año.
Cassie saltó en su asiento mientras los aplausos a su alrededor volvían a crecer, esta vez fue más fuerte a su alrededor, miró hacia arriba para ver a un primer año corriendo hacia la mesa de Slytherin, una mirada de suficiencia en su rostro mientras se sentaba junto a otro de primer año.
Sacudió la cabeza, tratando de deshacerse de la pequeña sensación de preocupación que sentía por los otros Slytherin desaparecidos, antes de volver su atención hacia el pasillo. Sus ojos recorrieron la mesa de Gryffindor antes de ver a James, que ya la estaba mirando, riendo en silencio para sí mismo.
Cassie puso los ojos en blanco y levantó su dedo medio hacia él, dándose cuenta de que se estaba riendo por la forma en que ella había saltado segundos antes.
James solo se rió más fuerte.
Cassie se volvió hacia la mesa de los profesores, donde McGonagall estaba ahora recogiendo el sombrero y el taburete, toda la atención se volvió hacia Dumbledore, quien solo dijo una palabra.
