sumidos por el placer

capitulo 52

Cristiana me observaba desde la cama cuidando de que Archer no se desplazara de su lugar, al parecer mi bebé estaba aprendiendo a rodarse solo y eso nos desquiciaba un poco, la paranoia de Chris para que no se cayera llegó a tal nivel que tuvimos que traer la cuna de la casa de sus padres a nuestra habitación para poder vigilarlo mejor, mientras yo terminaba de encajar el arete en mi oreja luchaba con todas mis fuerzas por no enloquecerme.

La gala de beneficencia sería esta noche y yo no podía estar más nerviosa, era mi primer evento publico después de haber tenido a Archer y no iba como invitada de Chris McGregor, iba invitada como reconocimiento hacia mi trabajo, eso me colocaba más nerviosa aún.

Me coloqué de pie y estiré el entallado vestido negro con escote de corazón y abertura en la pierna hasta que quedé satisfecha con la forma que tomó, peiné bien mi cabello hacia atrás y rocié un poco de perfume para dar por terminado mi aspecto arreglado.

—¿Segura qué podrás cuidarlo sola? —le pregunté a Cristiana antes de ingresar al closet y buscar mi pequeño bolso.

—No te preocupes Faith, llevamos una semana juntos, creo que ya está mejor portado conmigo, no ha enloquecido.

—Bueno, eso es algo.

—Cálmate hermana, todo va a estar bien, solo procura no caerte, ni derramarle champagne a nadie encima, ni pisarle el vestido a nadie y por favor no te caigas cuando te estén tomando fotos.

—Gracias por tus palabras de aliento —le musité rodando los ojos.

—¡Entonces deja de estresarte! Tienes porte, sabes caminar bien y puedes desempeñarte bien con esa gente, ya lo has demostrado antes ¿Por qué te preocupas?

—Porque por primera vez yo seré el centro de atención, usualmente me escondía detrás de Chris y pasaba mas o menos desapercibido pero ahora... estoy a punto de enloquecer de la emoción.

—Entonces aprovecha que serás el centro de atención y demuéstrale a esas perras quien eres.

—Eso esta mucho mejor —dije un poco mas tranquila—. Como sea, nos vemos, si sucede algo nos llamas en seguida.

Me acerqué a mi bebé y le di un suave beso en su frente, me despedí de mi hermana y caminé hasta la sala en donde ya Chris me esperaba.

—Espera —me pidió abriendo su mano e impidiendo que diera otro paso.

Sacó su teléfono de su bolsillo y lo levantó para tomarme una foto.

—¿Por qué fue eso?

—Porque me encanta como te ves cuando vistes como una dama de alta sociedad, me hace recordar lo que se oculta debajo de ese elegante vestido y que solo yo puedo ver.

—Ya váyanse —nos dijo Cristiana apareciendo con Archer en sus brazos—. No quiero volver a escuchar sus gemidos y menos tan temprano.

—Te dije que usaras auriculares de noche, no es mi culpa —le respondió Chris antes de despedirse de Archer.

Ingresamos juntos al ascensor pero Chris, como raro, no podía mantener sus manos alejadas de mi cuerpo.

—No creo que el administrador te acepte otro soborno, Chris —le advertí con un susurro.

—No me importa, aceptará la cantidad de sobornos que yo quiera —le dio un beso a mi cuello.

—Eres un aprovechado —reí de manera nerviosa.

Chris sonrió contra mi cuello, cosa que hizo que mi piel se erizara, sus manos pasaron de mis caderas a mis brazos.

—Si, soy un aprovechado y así me amas.