Tímido ─── lixjin

O67 ; relaciones y corazones rotos

En el momento que cerró la puerta sintió como si todo su mundo se hubiera caído al suelo estrepitosamente, la fuente que se escondía en sus ojos miel se desbordó libremente, cada pequeña gota cayendo una detrás de otra a un ritmo veloz.

Felix quería creer que el padre de HyunJin en realidad no le había obligado a terminar con él y que sólo era uno de sus malos sueños. No obstante; con lágrimas en los ojos y un par de púas apuñalando su garganta debía decir que era la realidad, la miserable realidad.

Él ya no era novio de HyunJin.

Felix no podría seguir siendo la pareja de HyunJin cuando MinHyuk lo había rechazado al creer que le había sido infiel. No podía hacer mucho luego de eso, el hombre no deseaba verlo y además no se tragaría ni una palabra suya. De HyunJin dependía el futuro de ambos.

A pasos desanimados marchó hasta su hogar, contemplando el cielo azul, las nubes viajando y los intensos rayos solares estampando en la gente. Un bonito día.

Las personas caminaban con calma, algunas parejas se hallaban entre la multitud mientras se demostraban cariño con un par de acciones. El amor ajeno solo le hacía sentir que una daga había atravesado su corazón. Porque mientras aquellas parejas derrochaban su amor en el aire, él había sido roto cual frágil cristal.

Ellos no sabrían lo que él acababa de pasar así como él no sabría jamás lo que había sucedido en sus vidas. Los demás solo veían su apariencia dulce y tierna, pero nunca sabrían lo roto que ahora se hallaba todo su ser.

Felix veía bonitas y destellantes sonrisas en sus caras, pero tal vez más de alguno se encontrara igual de desecho que él. Probablemente jamás lo sabría, porque no volvería a saber de ellos en su vida, solo admiraría sus apariencias por unos segundos.

Cuando se detuvo frente a su destino empujó la puerta con ligereza, adentrándose en busca de su madre. Cuando no la vio en la sala, se dirigió a la cocina a pasos pesados, como si a sus pies se hubieran integrado un par de ladrillos que le impidieran caminar como era correcto.

───¿Mamá? ───su cabeza dorada se asomó por la puerta, esperando ver a su madre ahí, pero a cambio se encontró con su padre de espaldas preparando la cena.

───No, cariño ───contestó SungHo sin la necesidad de voltear a verlo───, tu mamá fue a recostarse porque se sentía cansada y Woo aún no llega del trabajo ───al finalizar la oración, dio media vuelta para ver a su hijo, hallándolo con el rostro y ojos rojos. Se alarmó de inmediato───. ¿Qué pasó, amor?

───HyunJin y yo terminamos.

SungHo se calló y sin más fue hasta su pequeño para enrollar su delgada figura, teniendo en cuenta que solo necesitaba de un cálido abrazo.

Felix había quedado dormido en los brazos de su papá luego de haber llorado por un buen tiempo. Al despertar seguía siendo abrazado por su papá, este al parecer lo utilizaba como su peluche ya que solía hacer lo mismo con su esposa.