Me pregunto porqué hablan como si fueran de la realeza, de qué se conocen y porqué están a punto de devorarse con la mirada. La mano de Zayn se aferra a mi antebrazo con fuerza, no reacciono de ninguna manera aunque Harry si parece darse cuenta y ponerse nervioso tosiendo y acercándose más a mí.

- Solo diversión, supongo que usted ha venido a lo mismo -Asiente sin dejar de sonreír-. Pues en ese caso, espero que me dedique un baile.

Luego de una despedida extraña e incómoda pregunto de manera silenciosa con las cejas fruncidas qué es lo que acaba de pasar, ha entendido el mensaje pero no responde. Tira de mí obligando al otro moreno a seguir mis pasos para mantenerse al lado, suelta mi antebrazo y se coloca frente a mí, hace una ridícula reverencia y mira su reloj de muñeca.

- Quedan veinte minutos para la reunión, tenéis que subir las escaleras y a la izquierda la puerta roja, tocáis dos veces, entráis y os sentáis lo más cerca posible de mí.

- ¿A donde vas? -Digo sin dar más rodeos a lo que realmente quiere hacer.

- Tengo que hablar con algunas personas antes de reunirnos, podéis disfrutar de la fiesta mientras tanto.

Agarra mi mano dando un beso en ella, sus labios están calientes a comparación de mi mano fría, no entiendo tanta absurdez por un baile aunque esté inspirado en otras épocas no debemos comportarnos como tal. Bufo cuando por fin se va lejos, ha estado muy pegado a mí este fin de semana y apenas me ha dejado respirar entre entrenamientos y pruebas de vestidos. Scarlett ha parecido disfrutar de esa tortura que ha sido para mí, Harry por el contrario ha optado por desaparecer y aparecer en entrenamientos junto a Joet, demasiado raro. Robert no tiene mucha historia, se ha convertido en nuestro espía, un experto en meter las narices donde no le llaman.

- ¿Qué te apetece hacer? -Dice con las manos enlazadas tras su espalda mientras su hombro empuja el mío sacándome del trance.

- Si te digo lo que me apetece se acabaría la diversión para el resto.

- Pero empezaría para ti -Me muestra una sonrisa ladeada a la que correspondo mirándole de reojo-. Déjame adivinar, te apetece arrancarte ese vestido, pisotearlo y disparar a todo aquel que se te oponga.

- Muy buena observación pero, me apetece más comenzar una matanza en este salón -Admito mirándole mientras ladeo la cabeza en su dirección-. Aunque lo del vestido no me importaría, el corsé va a reventarme las tripas en cualquier momento.

- Si quieres puedo quitártelo yo -Susurra en mi oído, se ha colocado detrás de mí y no he notado el momento en que lo ha hecho aprovechando nuestra cercanía. Sus dedos viajan a las tiras traseras, las toca con sutileza jugando con ellas entre sus yemas.

Reviso la hora en un reloj de oro enorme colocado en un lateral de la sala, ya han pasado los veinte minutos. Me aparto drásticamente mientras le informo de este dato, busco al resto de compañeros pero tan solo topo con la mirada escondida de Robert quien alza ambos pulgares para darme el visto bueno de que todo está bien para nosotros. Subo las escaleras tan deprisa como puedo sin hacerme notar ansiosa por llegar al piso de arriba, cruzamos el pasillo en silencio y toco dos veces la puerta roja de terciopelo que tiene grabado un tigre en un cáliz, demasiado dramático. Un "Adelante" me hace abrir la puerta por fin, el cuarto es enorme, decorado con cuadros abstractos, muebles aterciopelados, una mesa alargada en el medio, hombres de seguridad escoltando cada hueco libre de la pared y mi equipo junto a James Hurt. Este último se fuma un puro entre sus manos dejando humo pesado alrededor, es más joven de lo que me esperaba, algunas canas brotan de su cabellera pero es apuesto, atractivo a decir verdad. Sus ojos azules se posan sobre mí, viajan por todo mi cuerpo, me dedica una sonrisa y guarda silencio hasta que me coloco al lado de Zayn y justo a mi lado, Harry.

MedicineWhere stories live. Discover now