Mafia vs Mafia (Completa ✓)

Prólogo.

Momento en que Matías desapareció.

Matías.

Ví que Miguel corrió después de lograr escaparse de mi papá, terminé de matar al tipo que estaba golpeando y corrí detras Miguel.

-¡MATÍAS! -gritaba mi papá pero mis ganas de matar a Miguel eran mayores.

Logré adentrarme pero ese idiota escapó en una camioneta. Un tipo me golpeó en la espalda, al voltear le regresé el golpe una y otra vez.
Logré matarlo y a otros dos pero de repente empezaron las explosiones, aventaron dos granadas justo como Alonso nos advirtió.

Mi único pensamiento era salir con vida de aquí, regresar por Natalia y decirle que la amaré aún más ahora que está esperando un hijo mío. Me he imaginado cientos de veces cargándolo y consintiéndola a ella.

Corrí tratando de alejarme pero cada vez las llamas aumentaban.

-¡Matías! -escuché el grito de Alonso pero una granada cayó cerca de mí y solo logré correr un poco, aunque me agaché me sacó volando.

Me levanté pero sólo vi humo y fuego, busqué por todas partes hasta que encontré una barda donde podría cubrirme, al acercarme más ví que realmente era un pequeño cuarto y fué suficiente para salvarme.
D

espués me sentí mal porque Alonso trató de ayudarme y yo no lo busqué por tratar de cubrirme. Una cosa es que hayamos peleado pero otra diferente es que lo deje morir a su suerte.
Me asomé un poco pero el humo iba empeorando cada vez más.

Sentí un golpe en la nuca, puse mi mano y tenía sangre, me giré dispuesto a atacar pero ví a la mamá de Alonso con un bate de beisbol.

-¡Te odio! -gruñó antes de querer volver a pegarme pero se lo quité.

La cargué a la mala y corrí lo más lejos que pude algo que fué un pésimo error porque ahora me pegó con el codo en la misma parte que me estaba sangrando.

Iba perdiendo fuerza y el humo se adentraba en mis fosas nasales, la solté y empecé a toser demasiado, ya no podía continuar.

<<Tienes que volver por tu hijo>>
Me recordó mi subconsiente y no sé de donde carajo saqué fuerzas para seguir corriendo pero  Dorotea gritó llorando.

-¡Ayúdame!

Y bueno, no podía dejarla sóla aunque quisiera.
Regresé por ella y la jalé del brazo pero la muy **** mejor no digo nada, pero quería que la cargara y a mí me estaba doliendo la cabeza.

-O corre o muere -le avisé y no lo pensó mucho porque empezó a correr.

Se tropezó con una piedra justo cuando ya estábamos alejándonos, me agaché a levantarla y sentí otro golpe en la nuca.
Me giré y ví a Miguel con una piedra. Quise lanzarme contra él pero empecé a perder el conocimiento, todo mi alrededor comenzó a nublarse y luego sentí una patada en la ceja. Caí al suelo pensando en mi mujer y el bebé que espera, no quiero irme ahora, al menos quiero conocerlo.

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Abrí los ojos y medio moví mis dedos, vi a una persona a mi lado llorando y gritándole a los doctores.
Empezaron a revisarme pero yo no sabía ni quien era, todo estaba tan confuso para mí pero en mi mente repetía:

"Natalia, el embarazo..."

No sé ni quien es Natalia, no sé nada y eso comenzaba a fastidiarme.