YOKOHAMA DIVISION | ONE SHOTS

¡HBD Rio! 🥳💙

—Rio...

—¿Pasa algo? Suenas un poco...— si dijo algo más, no lo escuché, pues mi estornudo hizo que separara el teléfono de mi rostro.

—Sólo amanecí un poco resfriada, pero espero me... ¡Achu!— sorbí la nariz y me quejé —Espero mejorar para mañana.— terminé, antes de sonar mi nariz. —Rio, siento no poder ir al puerto por tu cumpleaños...

—No te preocupes por eso, podemos ir al puerto la próxima semana. Ahora lo importante, es tu salud.

—¡Pero yo quería llevarte al Nippon Maru!— me quejé, antes de volver a estornudar. —¡Malditos mocos!— lo escuché soltar una risa. —Sólo llamaba para avisarte, pero, sabes que te amo con todo mi corazón, y que deseo que te pases fenomenal este día. Espero que Samatoki y Jyuto te lleven un pastel o vayan a comer contigo. Te amo, te amo mucho.

—Lo sé, ______. Me lo dijiste hace unas horas.— reí. Le había hablado a las 12 en punto para desearle un feliz cumpleaños.

—No me canso de decírtelo.

—Te amo, mucho, también. Descansa, por favor.

—En cuanto me sienta mejor, iré a verte.— dije y colgué.

Bloquee la pantalla de mi celular, y la encendí sólo para ver la imagen de bloqueo, una foto de Río y yo, cada uno con una lagartija asada.

La pantalla se apagó por el tiempo límite y me estiré para dejar el celular en la mesa de noche. Estornude una vez más, y del cajón saqué una pastilla, me la tomé y ahora si, me dispuse a dormir.

    

(...)

    

—______. ______, despierta, por favor.— la voz de Rio se escuchaba lejana, ya no sabía si estaba soñando o no.

—¡Manga gratis!— desperté de golpe buscando con la mirada aquel letrero que me confirmará lo que acababa de escuchar, pero, no había nada. Sólo se encontraba Rio frente a la cama, con una sonrisa divertida y sosteniendo una bandeja con comida.

—Seguimos en el 2021, ¿verdad?

—Me temo que sí.

—¡Agh!— me quejé y me acomodé. —No juegues con mi corazón diciendo que... ¡Achu!

—Salud. No es que quiera jugar con tu corazón, te hablé muchas veces y no reaccionabas, fue lo mejor que se me ocurrió.

—Como sea— sorbí la nariz —¿Que haces aquí? Deberías estar...

—Cuidando a mi novia durante su gripe.— interrumpió. —Pensaba quedarme en la base, incluso Jyuto y Samaroki irían, pero entonces recordé, que una vez me contaste donde guardabas tu llave de emergencia.

—Y decidiste irrumpir en mi hogar.— él miró hacia otro lado. Seguramente pensaba que actuó mal. Reí, haciendo que voltear a verme.

—¿Que es lo que traes?

—Cuando llegué estabas dormida,así que decidí ir a hacerte algo de comer.

—¿Y que hiciste? ¿Un caldo de pollo?— pregunté intentando asomarme para ver, él se acercó y se sentó a mi lado, viéndome de frente y dejando la bandeja sobre mis piernas.

—Es un caldo de rana.

—De... rana... ya veo...

—Estoy seguro que te hará sentir mejor.— metió la cuchara en mi plato, tomando un poco junto con unas cuantas verduras. —Abre— dijo acercando la cuchara a mi boca.