Amar en secreto | Izumi Miyamura || Rei Sakuma |

5

Milagrosamente, llegué temprano a la puerta de la escuela para encontrarme con la chica de cabello corto.

Bueno, era temprano porque ella aún no estaba allí, así que pensé seriamente en si me había dejado plantada.

Aprovechando que hoy viernes no tenía actividades en el club, había pensado que era buena idea invitarla a comer debido a lo que le había hecho ayer; aunque, posiblemente, huyó de mí.

Y no la culpaba. Le había dicho que comiera conmigo cuando ni siquiera le había dicho mi nombre o preguntado el suyo.

Cuando creí que realmente se había ido y estaba a punto de irme a casa, pude vislumbrar que se acercaba a la salida.

Después de confirmar que era ella, me di cuenta de que venía acompañada.

Me sentí nerviosa casi al instante y quise irme sin esperarla; sin embargo, contuve la respiración para evitar hacerlo.

Además de ir junto a un chico de cabello violeta, al que no conocía, iba junto a Hori y Miyamura.

Al ver a Miyamura fue que me sentí nerviosa; sin embargo, verlo sosteniendo la mano de Hori, me hizo olvidar por completo del nerviosismo.

¿Por qué... mi corazón dolía?

Nosotros ni siquiera éramos cercanos, apenas le había hablado en dos ocasiones que no fueron para nada agradables y, aún así, no podía evitar sentirme triste.

Como si mi corazón se hubiera roto en ese preciso instante.

Aunque desconocía completamente su relación, no parecía ser una relación de amigos.

Ella se despidió de ellos a unos cuantos metros de distancia y corrió hacia mí, provocando que los tres me dirigieran una mirada.

—Hola, siento mucho llegar tarde —dijo, con una pequeña sonrisa.

Le sonreí, dándome vuelta para que comenzáramos a caminar y ellos no nos alcanzaran.

—No tengas pena, no esperé por mucho tiempo —reí nerviosamente—. Aunque por un momento creí que te habías ido.

—Oh, no, claro que no —hizo un movimiento con su mano—. Tenía que entregar algo y se me hizo tarde, eso es todo.

Asentí.

—Oh, por cierto, ¿cómo te llamas? —pregunté—. Soy demasiado distraída, que no recordaba que no lo había preguntado.

—Creo que también lo había olvidado —sonrió—. Soy Yuki Yoshikawa.

—Mucho gusto, Yoshikawa, soy Yumie Kiryuu.

—Oh, sí, lo sé —me dirigió una corta mirada antes de ver de nuevo su camino—. Eres quien alejó a Hori y el consejo estudiantil para que no murmuraran sobre su problema hoy en la mañana.

—¿Estabas cerca? —pregunté, sorprendida.

—Bueno, el alboroto ocurrió frente a mi clase.

—Oh, no lo noté —murmuré.

No podía creer que había sido tan distraída que ni siquiera había notada que todo ocurrió frente a la clase 3-1.

—Eres compañera de Sakuma, ¿verdad? —pregunté, distraídamente.

—Oh, sí, hoy fuiste a buscarlo a clase, ¿no? —soltó un profundo suspiro—. En serio es popular, ¿eh?

—¿De verdad?

—Oh, sí, las chicas suelen ir a buscarlo en los recesos —colocó su mano bajo su mentón—. Ahora que lo pienso, no suele ir con ellas... Entonces, ¿ustedes están saliendo?