Amor y Guerra

Capítulo 65: Personas anti tormenta

Me despierto en medio de la noche agitada y sudada, mi pecho sube y baja rápidamente al mismo tiempo que mi corazón retumba en mi caja torácica. Es la tercera noche que me despierto en mitad de la madrugada, otra pesadilla. Dylan me calma colocando sus manos en mi espalda y haciendo delicados movimientos circulares en la misma.

Se ha quedado todas las noches desde el secuestro, me siento a salvo con su compañía, aunque aun así las pesadillas me han seguido todas estas noches.

—Ya tranquila amor—Dice calmándome —Fue de nuevo una pesadilla, estás bien

Asiento con mi cabeza, sin emitir ningún sonido. Me vuelvo a recostar en la cama mientras mi novio me mira expectante y preocupado por mi silencio.

—Quisiera poder matar a esos dos imbéciles por haberte hecho eso—Dice finalmente él—Jamás, ni en un millón de años se me hubiese podido ocurrir que eran capaces de eso

—Realmente nadie lo creería, ni siquiera yo—Digo negando con la cabeza— Pero ellos no están bien mentalmente, sobre todo Jake y Jacob.

— ¿Realmente le crees? —Pregunta volteándose hacía mí— ¿Crees que en serio tiene eso de dos personalidades? O solo fue una actuación para liberarse de parte de la culpa.

No digo que el pensamiento de que todo se trataba de una manipulación de Jake pasó por mi mente, pero luego de ver como ambas personalidades eran tan diferentes a pesar de estar en el mismo cuerpo, dudo mucho que sea mentira de él.

—Le creo, totalmente le creo. Digo, sé que es extraño pero estuve investigando el trastorno y aunque es extraño e inusual, es real Dylan—Digo mirándolo —Además tenías que ver como cambiaba físicamente en cada personalidad. Jake es el chico dulce, con una mirada suave y azul, el Jake que conocí. Por otro lado Jacob es, sin duda, alguien macabro, con ojos oscuros y semblante duro y serio. Dos personalidades totalmente diferentes.

Él me mira con atención, escuchando todo lo que tengo para decir.

—Siento pena por Jake, a decir verdad—Vuelvo a comentar ante su silencio— Tener que estar encerrado por algo que él en parte no causó, me hace sentir lastima por él, más cuando sé que Jake es una buena persona.

—Lo sé, pero aunque sea difícil de procesar todo ese trastorno, Jake sigue siendo parte de Jacob. No hay uno sin el otro, ya que comparten el mismo cuerpo, así que no hay otra solución a esto, para tener encerrado a Jacob, que es el peligroso, tiene que sacrificarse la libertad de Jake.

Es bastante jodido el tema, confuso y complicado, hay personas pasando una batalla, con tormentas y armas de fuego disparando por doquier en sus vidas y nosotros no nos damos cuenta aunque tengamos la oportunidad de compartir de cerca con ellos, tal como fue mi caso con Jake.

Si tan solo me hubiese interesado más en su vida privada, en sus problemas y en sus condiciones, quizás me hubiese contado lo de su trastorno y así evitaríamos todo lo que pasó. Pero como dicen, cada cabeza es un mundo y cada persona consigue refugio y calma en alguien, persona que claramente no fui yo para Jake.

—Vamos a dormir ya— Digo sonriéndole a Dylan mientras me inclino para estampar un beso en sus labios—Nos tenemos que levantar temprano.

—Buenas noches mi amor—Dice él dulcemente mientras se acuesta en la cama, dándome espacio para acurrucarme en su pecho.

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Luego de una larga jornada en la universidad, salgo de esta y me dirijo a mi auto, Dylan no estaba de acuerdo con lo que haré a continuación y aunque insistió en acompañarme prefiero ir sola.