𝙷𝚊𝚙𝚙𝚒𝚗𝚎𝚜𝚜

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Jiang Cheng, Jiang YanLi, Jin GuangYao, Wang LinJiao, Xue Qing Todas fueron personas victimas de todos, así que no habría porque tener temor de un fantasma en la esquina de tu habitación justo a la hora de las brujas porque no puede hablarte, no puede tocarte y mucho menos matarte, todo ello puede hacerlo un ser vivo, semejante a ti. Salimos del cuarto bajando la cortina de metal. Intercambiamos miradas y nuestros labios por fin se despegaron

—A-Yuan, estas historias... ¿Realmente...?

—Lan Sizhui, tenemos que irnos ahora mismo —Jin Ling, recobrando la conciencia y sin dejar de temblar, nos tomó de los brazos, jalándonos nuevamente hacía la entrada— ¿Ya saciaron su curiosidad? Vamos a regresar, a disculparnos con el guardia y nos iremos pronto de aquí. Me importa un bledo si mi pintura o su pintura no está en el muro de la universidad.

—A mi sí. —dije deteniendo mi caminar, sentía que debía seguir viendo, pero en estos instantes no me siento como yo.

— ¡¿Qué carajo te pasa?! ¡¿Es muy difícil entender que el guardia tiene el derecho de dispararnos si nos quedamos?! Tú eres el más cuerdo de nosotros tres ¡por amor de Dios Lan Sizhui!

— ¡A-Yuan! por favor hay que irnos, no me estoy sintiendo bien.

—Entonces ustedes vayan y salgan, yo me quedo a ver... —sin poder soportarlo más, Jingyi me golpeó la mejilla con la palma, fue tanta su fuerza que me hizo girar un par de veces antes de caer al suelo, un poco impactado escupí sangre, mis dientes habían mordido mis mejillas haciéndolas sangrar. Gracias a ese golpe pude volver a mi mismo, comencé a sentirme enfermo y con miedo—. Vámonos, pronto, quiero irme de aquí —me puse de pie con su ayuda y las luces fueron apagadas repentinamente—. Ya es tarde.

En completa oscuridad, los tomé a ambos del antebrazo para evitar perdernos

— ¿Qué has hecho Sizhui? —el evidente miedo en la voz de Ling me hacía temblar, de todos nosotros, él es el que menos se asustaría.

—Yo-yo no hice nada, lo lamento, lo lamento tanto chicos ¡Si no hubiese sido por mi terquedad, no estaríamos aquí!

—A-Yuan, no digas eso, solo... hay que pensar.

Sin saber que hacer o si quiera como reaccionar, comenzamos a escuchar una gotera lejos de nosotros, por unos segundos no me preocupé de ello pues solo era una gotera, su constante ruido nos impedía pensar con claridad, después algo más rápido que solo un ruidito constante, convirtiéndose lentamente en un chorrito pequeño manchando el piso, el chorrito estaba haciéndose cada vez más grande y notorio con cada segundo transcurrido, pronto sentí el agarre de Jingyi sobre mi cintura, conocía su esbelta y pequeña figura por lo que inmediatamente lo abracé por encima de los hombros con mi mano izquierda y con la derecha entrelacé mi brazo con Jin Ling, era consiente de que ese ruido de agua lo estaba desesperando y la oscuridad le aterraba.

—Por favor, sé que estás asustado pero no me abraces tan fuerte —habló repentinamente Jingyi, yo no lo estaba abrazando de ningún lado mas que del cuello, sentí que despegó un brazo de mi cintura y se sobresaltó asustado.

—A-Yi —llamó Jin Ling tomando una bocanada de aire— ¿Quién te está abrazando? —la voz de Ling se quebró en llanto asustado, el pecho de mi amigo estaba pegado a mi por lo que pude sentir como su corazón comenzó acelerarse sorprendentemente rápido. Alguien lo estaba abrazando de la cintura y si mal no recordaba, nosotros no éramos cuatro.

—A-Yi, cálmate. —traté de tranquilizarlo pero tanto él como yo estábamos a nada de desmayarnos del miedo.

El chorro de agua cayendo del techo estaba convirtiéndose en una potente cascada, llenando bruscamente la bodega, el agua ya estaba pintando en carmesí nuestros calcetines y a llenar nuestros zapatos.

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