• Quédate conmigo • Bangchan

17; sentimientos

Felix

Todo empezó ese día. La primera vez que practicamos baile juntos... a partir de allí mis sentimientos por ella comenzaron a crecer. No pasó mucho tiempo hasta que me di cuenta que su largo cabello rubio, sus ojos bonitos y sus labios carnosos estaban todo el día en mi mente. Y más que eso. Su personalidad alegre, sus bromas, ella comenzó a ser la razón por la que decidía continuar y mejorar todos los días.
Cada vez que estaba cerca, mi corazón latía con fuerza. Cada vez que veía su sonrisa, sentía mil cosas a la vez.
Estaba completamente enamorado de ella. Por eso mismo estaba tan enojado.
No estaba celoso, pero estaba harto de verla llorar. Los días seguían pasando, y la gente seguía llamándola "zorra" y demás cosas por rumores estúpidos. Entonces se me ocurrió una idea. Si Bangchan salía temporalmente con alguna chica, nuestros compañeros iban a olvidarse de esparcir rumores estúpidos.
Aproveché el horario en el que ella estaba trabajando y fui a la casa de los dos. Bangchan estaba allí componiendo música, pero le insistí que me escuchara. Esto era por ella. Porque ella estaba sufriendo.

—No.—contestó Bangchan, sin mirarme a los ojos.
—¿No? Chris. Es en serio. Es nuestra amiga, no podemos simplemente sentarnos a ver esta situación y no hacer nada... estoy harto de verla llorar.
Bangchan se quedó en silencio.
—¿Es en serio, Chris?—suspiré con amargura—no puedes ser así... ¡¿no es tu amiga?!
—No puedo Felix.—Bangchan me miró a los ojos—Estoy enamorado de ella. No puedo salir con alguien más.
Sentí algo de dolor en mi pecho. Pero teníamos que hacer algo al respecto.
—Yo también estoy enamorado de ella—confesé—aún así tenemos que hacer algo.
Bangchan me miró sorprendido y yo mantuve mi mirada firme.
—Si realmente la quieres, vas a hacer algo.
—¡No me pongas en esta situación! Tú también estás enamorado de ella...

Suspiré harto. Con amargura, tuve que tomar el único recurso que me quedaba; amenazarlo.
—Le diré lo que lo siento mañana en la tarde, Chris. Si tú no lo haces, yo saldré con ella—miré hacia un costado—si no puedes salir temporalmente con alguien más, entonces solo hay dos opciones para acabar con los rumores: 1. Me confieso y salgo con ella, y aclaramos que ustedes solo son amigos. 2. Te confiesas tú y sales tú con ella, confirmando los rumores. Y yo dejo en claro que soy solo su amigo. Tú elijes.—Terminé de decir y abrí la puerta para irme, entonces ella estaba llegando.

—Oh—me miró sorprendida—¿estabas aquí? ¡Quédate, quédate!—propuso animada, como siempre—prepararé algo rico para los tres—sonrió dulcemente.
La miré a los ojos un par de segundos y le sonreí brevemente.
—Lo siento, será otro día—y me fuí.

--------al día siguiente

Tú

En la cafetería me puse a limpiar las mesas y barrer, prácticamente ya no había tanta clientela, pues el horario de cierre estaba acercándose. Como ya no tenía casi nada que hacer, me estiré y tomé mi celular para jugar un videojuego. Solo faltaban treinta minutos para irme. Y recibí una llamada de mi mamá.
—¡Mamá! ¿Cómo estás?
—Muy bien mi pequeña, y tú estás esforzándote en tus estudios ¿verdad?
—Claro que sí—reí.
—¿Entonces por qué tienes novio?
Abrí los ojos sorprendida.
—¡¿Cómo supiste?!
—¡¿Estás confirmándolo?!—sonaba enojada.
—¡Claro que no mamá! Unos chicos de la escuela comenzaron rumores estúpidos, estoy compartiendo la casa con un compañero de universidad porque es muy espaciosa y...
—Estaré allí en una semana para conocerlo. Ya no pongas excusas, pequeña mentirosa—suspiró.
—¡Pero mam---
Y cortó la llamada. Suspiré.