❇I'm Wrong❇ ▶Jikook◀

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Jimin suspiró con fuerza, ambas manos llevando su rubio cabello hacia atrás con fuerza, sus rodillas doblándose y haciendo que se dejara caer en el sillón, su respiración temblorosa y pesada.

—No es justo lo que le acabas de hacer a Jungkook.—Namjoon lo miraba en desacuerdo.

Jimin lo miró, apretando su mandíbula.

—El no tenía derecho a hacer lo que hizo, el no tenía porque meterse en la salud...

—¡El lo hizo por el bien de tu madre, Jimin!.—Namjoon inquirió—.Jamás ninguna persona que haya pisado esta casa se había tomado el tiempo de mirar por la salud de tu madre como lo hizo este chico.—le recriminó—.Y tu lo acabas de echar.

—¡Todo lo que dijo son tonterías! ¡Mi madre necesita tomar los medicamentos!.—Jimin se levantó de golpe, encarando a Namjoon.

—Todo lo que Jungkook dijo es verdad.—lo miró fijamente—.Yo mismo llevaba tiempo replanteándome seriamente si tu madre debía seguir tomando tantos medicamentos.

—¿Por qué no debería tomarlos?.—el rubio negó con la cabeza, frustrado.

—Porque tu madre será una dependiente de los medicamentos, llegará un momento en el que no podrá vivir sin ellos.—dijo con seriedad—.Te recuerdo que los medicamentos no dejan de ser drogas, y que muchos de ellos, principalmente los medicamentos de depresión, crean adicción y efectos secundarios.

—Pero...entonces...—Jimin parecía no encontrar las palabras para refutar aquello, despeinado su cabello con desesperación.

—En el comienzo son buenos, ayuda con los dolores y a superar las depresiones o incluso los ataques que pueda sufrir.—Namjoon trató de explicar con calma—.Pero con el paso del tiempo hay que ir retirándolos, no hay que dejar que una persona dependa de ellos, nunca.

—No quiero que mi madre sufra, no quiero que...—Jimin se dejó caer en el sofá, metiendo la cabeza entre sus rodillas y tirando de sus cabellos con fuerza.

—Hijo...

Jimin levantó su cabeza de golpe cuando oyó la voz de su madre, girando su cabeza y encontrándosela en la entrada de la sala, mirándolo con una profunda tristeza en sus ojos.

—Mamá.—Jimin trató de recomponerse, acercándose a ella de golpe—.¿Que haces aquí?.—la ayudó a caminar al sillón—.Pensé que estabas dormida.

—Las voces me despertaron.—soltó un pequeño quejido cuando se sentó, estirando su pierna herida.

—Mamá...escucha...

—¿Por qué hiciste eso, Jimin?.—ella lo miró sin ninguna expresión en su rostro.

—Mamá...

—No debiste tratar así a Jungkook, el no hizo nada malo.—su voz era seria y dura—.Al contrario, y aunque lastime mi orgullo decirlo, ese niño no ha hecho más que cuidarme desde el momento que puso un pie en esta casa.

Los ojos de Jimin se abrieron con sorpresa, al igual que su boca, no dando crédito a lo que su madre acababa de decir.

—Pero...

—El siempre se ha preocupado por mi salud.—lo interrumpió, elevando una mano frente a el—.Siempre se ha asegurado de que yo estuviera bien.

—Señora Jieun, si me permite explicarle el motivo de todo este alboroto...—Namjoon pidió, tomando asiento a su lado, sus ojos pequeños fijos en la mujer y su cabello castaño perfectamente peinado a un lado le daban un aura seria.

—Se lo que está sucediendo.—ella murmuró—.¿Cómo no saberlo después de esos gritos?.—miró a Jimin quien desvió la mirada.

—Entonces...—Jimin mordió su labio inferior—.¿Cuanto tiempo llevas escuchando?.