❇I'm Wrong❇ ▶Jikook◀

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Jungkook suspiró el aire fresco del día, hacía una tarde maravillosa, ideal para un paseo por el parque o por la ciudad, le hubiera gustado tener aquel día libre para disfrutarlo, pero estaba bien, seguramente vendrían más días buenos y podría disfrutarlos de igual manera.

Echó un vistazo a su lado, la Señora Park seguía sentada, leyendo un libro que Jungkook no conocía, ella parecía tan calmada y relajada, la brisa despeinada ligeramente su cabello ahora más corto, y no pudo evitar pensar que ella era una mujer realmente bonita, pero la sombra de la tristeza cubría aquella belleza.

Volvió a suspirar, su mirada dirigiéndose hacia abajo, donde pudo ver a Jimin llevando una mesa siendo acompañado de su novio, quien llevaba arrastrando dos sillas, colocaron todo en un buen lugar donde el sol no diera fuertemente y se sentaron en el jardín delantero. Jungkook rodó los ojos cuando vio al cocinero que Jimin llamó para que les preparara comida, ¿Cómo era posible que el tonto de su jefe no fuera capaz de preparar ni siquiera un dichoso plato de comida?.

Jimin no había rechazado la invitación de su novio, pero le había dicho que la comida la tendrían en su casa, ya que más tarde quería pasar algo de tiempo con su madre, y aunque este chico quién era su novio no había parecido estar muy de acuerdo acabó aceptando al final.

Se alejó de la baranda para no parecer un metiche, no le interesaba lo que pasaba en la mesa de aquel jardín, mucho menos con aquellas dos personas, con pasos lentos se sentó frente a la Señora Park, mirándola brevemente.

—¿Le gusta mucho leer?.—Jungkook decidió preguntar.

La Señora Park solo asintió con la cabeza, sin levantarla del libro.

Jungkook por igual asintió—.Hay este libro, memorias de una geisha, siempre me ha llamado la atención y he querido leerlo, pero no sé porque nunca he llegado a leerlo.

Esta vez la Señora Park lo miró con curiosidad, como si estuviera pensando algo en su mente, para después dejar el libro que estaba leyendo a un lado y ponerse de pie con algo de dificultad, ayudándose del bastón.

—¿Necesita ayuda?.—Jungkook se puso de pie.

La Señora Park negó—.Puedo caminar sola.

Jungkook asintió, volviendo a sentarse pero sin quitarle la vista de encima, solo dejando de verla cuando entró a su habitación y prefirió no seguirla y confiar en que estaría bien, solo estaba dando unos pasos no debía hacer un drama que pondría a la mujer de mal humor, y con razón.

Cuando la Señora Park volvió, traía algo en su mano, un libro, el cual tendió a Jungkook.

—¿Uh?.—Jungkook la miró confundido.

—Ahora ya no tienes excusa para no leerlo.—ella solo dijo.

Jungkook agarró el libro, observándolo con detenimiento, sorprendiéndose cuando se dio cuenta de que era el libro que había mencionado hace un momento, memorias de una geisha.

—Vaya, yo...—Jungkook la miró conmovido—.Gracias, muchas gracias, Señora Park.

—Uhum.—ella solo murmuró, volviendo a sentarse y agarrando su libro para seguir leyendo.

Jungkook decidió no decir nada, y en cambio prefirió convertirse en el compañero de lectura de la mujer, ambos leyendo en silencio. Jungkook solo abandonó la terraza cuando era necesario que ella tomara su medicina o para traerle la comida, pasando así largas horas juntos.

No fue hasta el atardecer que Jimin entró a la habitación de su madre, pasando a la terraza, viendo a las dos personas leer tranquilamente.

—Mamá.—Jimin se acercó a ella, sentándose a su lado y agarrando su mano—.¿Cómo te encuentras?.