(2) The game of Love (Adrinette)

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—¿Pasó algo?

—¿Huh? —la súbita pregunta trajo a Adrien a la realidad y miró a Marinette con sorpresa. No estaba trabajando en sus prendas pero estaba mirando a Adrien con ligera preocupación. —¿Ya terminaste?

—Casi.

—¿Entonces por qué te detuviste?

No era común que Marinette detuviera su trabajo. Aun cuando Adrien estaba molestándola, hablando sin parar o tratando de llamar su atención, Marinette le decía que se callara o le respondía de cuando en cuando mientras seguía con lo que sea que estaba haciendo. Pero esta vez, Adrien no había dicho nada, aun así Marinette había dejado de trabajar.

—Estás divagando, amor —Marinette dijo.

—¿Huh?

—¿Me dirás qué pasa?

—Nada. —Adrien le dijo con una sonrisa.

Marinette soltó un suspiro.

«Esa sonrisa, parecía falsa, forzada, tal como cada sonrisa que Adrien le había dado desde que regresó hace cuatro días. »

—Has estado actuando raro desde que regresaste, Adrien. —insistió. —¿Estás seguro que todo va bien con tu familia?

Adrien asintió, manteniendo su sonrisa.

—Todo salió bien. Como dijiste, una buena charla nos hizo bien.

—Entonces me alegra. —Marinette dijo y por fin siguió con su trabajo.

Pero no estaba convencida. Algo debió haber pasado en Dijon, estaba segura de ello, algo que puede no estar relacionado con la familia de Adrien.

«Después de todo, incluso durante el tiempo que Adrien había estado deprimido con su pequeño problema con sus padres, no había afectado su relación. Pero esta vez era diferente. Marinette podía sentir que algo estaba mal, y parecía estar relacionado a ella, o al menos a su relación. »

Desde que Adrien regreso de su semana en Dijon, había estado actuando distante. Sus sonrisas no llegaban a sus ojos, en donde solo había un matiz de tristeza, y frecuentemente se perdía en sus pensamientos. Al principio, Marinette pensó que era cansancio o que Adrien quizá extrañaba mucho a su familia. Pasar una semana con ellos después de tanto tiempo puede que no haya sido suficiente. Pero cuando el día pasó y Adrien se hizo más y más distante, Marinette se dio cuenta que había algo más.

Pero no podía entender qué podría haber pasado, por qué Adrien estaba comportándose así. Todo estaba yendo bien, en especial desde su desastrosa primera cita la cual había sido salvada por Marinette. Así que la razón del cambio de Adrien definitivamente radicaba en su viaje.

Marinette frunció ante la idea.

«Había sido igual la vez que Adrien había ido a su ciudad natal, antes de ser novios. Cuando regresó, había actuado diferente, evitándola y había tenido esa expresión triste que rompía le corazón. Pero eso fue porque se había enterado que las predicciones eran falsas, que su madre le engañó y su vida había sido una gran mentira, y sobre todo porque no era su alma gemela. »

De cualquier modo, habían superado eso. El problema había sido resuelto.

Así que, ¿qué otras razones tenía Marinette para explicar el raro comportamiento de Adrien? era tan poco de Adrien no hablar mucho y a veces evitar sus ojos. Ni siquiera estaba molestando a Marinette, no pedía citas o palabras de amor, ni tampoco llegaba a esas tontas conclusiones con cada palabra de Marinette. También había algo diferente con la forma en la que estaba tocándola. Sus gestos eran gentiles y llenos de amor pero había un matiz de desesperación en ellos, el cual Marinette sintió en la forma en la que Adrien había estado sujetándola cada noche.