Capitulo 5: ¿Primer beso de amor?

5.2K 159 4
                                    

El día fue normal, monótono y en fin aburrido. ¿Que podía hacer para sacarle encanto a aquel lugar tan deprimente?

Aquella tarde saldría a correr o tal vez iría de paseo con mi madre, es día lo tendría, debía aprovecharlo. Tal vez un día de película, sería lindo. O mejor ir de compras, ella amaba las compras, algunas franelas y jeans nuevos no me caerían mal.

―Elena ―Me volteé.

― ¿Sí? ―Debía ser Regie, era al único que le había dicho mi nombre.

― ¿Te acompaño a comer? ―Preguntó con una gran sonrisa.

Momentáneamente estuve aturdida ¿qué demonios me estaba pasando con aquel chico? Mi corazón se aceleró, extrañas sensaciones recorrieron mi cuerpo ¡¿qué demonios me estaba pasando?!

―Po-Por supuesto ― ¿Tartamudeé? Yo nunca lo había hecho.

Comenzamos a caminar hacia la cafetería.

― ¿Qué tenías hoy en clases? ―Preguntó mientras seleccionaba su comida.

― ¿Por qué lo preguntas?

―Estuviste muy callada ―Observó―, más que de costumbre.

― ¿Sí? Estuve pensando en muchas cosas ―Admití, Regie sólo asintió.

Seleccionamos una mesa con rapidez. Me sentía incómoda con la presencia de Regie ¿por qué estaba pasando eso?

Comí tranquila, desviaba mi mirada de él sin querer hacer contacto visual, lo último que quería era que se diera cuenta de la incomodidad que estaba sintiendo… Un momento ¡algo me estaba pasando! Tal vez alguna enfermedad terminal, cáncer o algo que afectara mi conducta.

De pronto miré hacia mi izquierda y vi que el chico idiota (no podía describirlo de alguna otra manera) me miraba fijamente, de pronto se levantó de su silla y comenzó a caminar hacia mi mesa.

Oh no, por supuesto que no. Yo no soportaría de nuevo sus irritantes comentarios, prefería besar a Regie antes que soportarle.

«Un momento» me dije a mí misma girándome hacia el chico frente a mí. Sé que no era la mejor idea que se me hubiera ocurrido en años pero era una idea.

Regie ¿puedo pedirte un favor? ―Pregunté entre susurros en medio de un ataque de desesperación.

Sí, dime ―Me miró con sus penetrantes ojos cafés, me paralicé momentáneamente.

Oh dios, lo haría, bien, era oficial el hecho de que algo me estaba afectando.

Bésame ―Susurré cerrando los ojos casi como queriendo creer que no hubiera dicho aquello.

 ¿Estás segura?

 ―Iría al infierno.

Bien ―Se sentó a mi lado―. ¿Lista? ―Sólo asentí.

Regie colocó su brazo izquierdo en la mesa, me acerqué un poco. Ese «algo» que me afectaba ya se había instalado con toda la comodidad en mí y por supuesto ya no habría un camino de retorno.

¿Qué pasaba si me gustaba? ¿Cómo podría hacer con ello? Mi decepción con esto del «amor» había sido demasiado, tanto que me había dejado un sabor demasiado amargo en la boca como para evitar pasar por ello de nuevo ¿y si me «enamoraba» de Regie? ¡O dios! Eso sí que sería malo, yo no quería ser la misma idiota de antes. No quería formar parte de esa mayoría de adolescentes lastimadas en múltiples ocasiones, me conformaba con una minoría.

Inevitable (El juego de Elena #1) [Editada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora