Clases Prohibidas ©

By LauraFRosalesArreola

1.1M 50.7K 1.9K

El colegio "Peter Brown" cuenta con muchos alumnos que van y vienen, viven totalmente la preparatoria. Layra... More

Clases Prohibidas
Cap. 1: Primer Día
Cap. 2: Conociéndonos mejor
Cap. 3: No eres así, lo sé
Cap. 4: Estoy sola
Cap. 5: Extrañaba a Carlota
Cap. 6: Te descubrí
Cap. 7: Tengo que alejarme para no herirme
Cap. 8: No lucharé más contra lo que siento
Cap. 9: Esto es verdad
Cap. 10: Bus C21
Cap. 11: Ecuación de besos
Cap. 12: Ahí estaré
Cap. 13: Cabaña sesenta y seis
Cap. 14: Love song
Cap. 15: Pesadillas
Cap. 16: Dos de la mañana
Cap. 17: Es la mujer que amo
Cap. 18: No vale la pena, ella está conmigo
Cap. 19: Sueño de amor
Cap. 20: Coraje y valentía
Cap. 21: Ultima noche
Cap. 22: ¿Quién más sabe de esto?
Cap. 23: Viaje secreto, amor secreto
Cap. 24: Inundo en la vida
Cap. 25: Dipartimento G6 y M4
Cap. 26: Solos
Cap. 27: Durmiendo con ella
Cap. 28: Ponme a prueba
Cap. 29: Un día separados y todo se complica
Cap. 30: Renuncio a tí
Cap. 31: Fue un error
Cap. 32: Llegando tarde
Cap. 33: Tarde para él
Cap. 34: Las cosas se complican
Cap. 35: Sorpresa, sorpresa
Cap. 36: Conociendo a Max
Cap. 37: Algo termina, algo empieza
Cap. 38: Fuera de lo común
Cap. 39: Retando a Luca
Cap. 40: No duermas, no me dejes
Cap. 41: ¿Quién más lo sabe?... ¡su padre!
Cap. 42: Te necesito
Cap. 43: ¿Cómo te atreviste?
Cap. 44: Solo somos amigos
Cap. 45: O Fortuna
Cap. 46: ¡Hasta el amanecer!
Cap. 47: Navidad (parte 1)
Cap. 48: Navidad (parte 2)
Cap. 49: ¿Seré madre?
Cap. 50: Año nuevo, aventura nueva
Cap. 51:¿En qué me he metido?
Cap. 52: Estoy Aquí
Cap. 53: Si no te vuelvo a ver
Cap. 54: ¿Feliz cumpleaños?
Cap. 55: Poniendo las cartas sobre la mesa
Cap. 56: La punta del Iceberg
Cap. 57: Giro de 180°
Cap. 58: Perdóname
Epilogo: Te amo... Santos
¡Gracias! <3
¡Felíz año nuevo!
ANUNCIO

Cap. Extra: Cierra los ojos. (Aarón & Mercedes)

12.9K 391 22
By LauraFRosalesArreola

Mi nombre es Mercedes y estoy trabajando en una empresa del gobierno, bueno apenas estoy saliendo de la universidad y tuve suerte de haber encontrado este empleo. Soy secretaria ahora, con el tiempo me moverán de área y podré estar con los verdaderos grandes.

—Mercedes —me dice mi jefe, un hombre alto y con unos brazos que podrían demoler cualquier puerta; cabello corto y güero hasta no más poder, con un poco de barba.

— ¿Si señor? –pregunto.

—Ven a mi oficina –dice con tono autoritario y me adentro a su oficina, no sin antes alaciarme la falda entallada que traigo. Llevo una libreta y un bolígrafo.

—Mercedes aquí hay reglas básicas, primera tendrás que venir en cuanto te llame, tendrás que tener mucho cuidado aquí, hay muchos mantenidos; tendrás que olvidarte del amor y esas cosas estúpida, aquí se viene a trabajar; y si no es mucha molestia tráeme un café.

—Señor, soy su secretaria, no su gata.

El ríe, ¡pero que he dicho! —Me gusta cómo te defiendes. Te parece si te lo pido por favor.

Ahora rio yo. —Creo que así está mejor.

Doy unos pasos adelante y me detiene. —No vengas tan presentable, no hay nadie quien lo note y aquí el único que te puede llamar la atención soy yo. Veme –dice dándose una vuelta —Yo no vengo con traje así que vente cómoda y también con zapatos cómodos, correrás mucho.

—Sí señor.

—No me digas señor, me siento raro. Dime Aarón.

—Si Aarón

Pasan los días, meses y cada vez nos llevamos mejor él y yo. No espere esto, esto va demasiado bien.

Un día llego muy presionado.

—Aarón ¿pasa algo?

—Sí, tengo una cena muy importante y… y… Tienes algo que hacer esta noche –abro los ojos como plato. No puedo creer que me vaya a invitar a salir esta noche.

—Non…no –digo un poco trabada y estoy segura que estoy roja de la cara, espero no lo note.

—Bien, ¿te gustaría ir conmigo a una estúpida cena de ejecutivos?

—Sí, porque no –digo recogiendo sus papeles sin sonreír, aunque por dentro de este muriendo de la emoción.

—Bien, pasare por ti. ¿Dónde vives?

—En Ámsterdam…

—Ya sé dónde ¿te molesta que me quede a dormir en tu casa? Es que mi casa queda al otro lado de la ciudad.

Esto se va poniendo mejor —No, claro que no. Tú quédate sin preocupación alguna.

—Bien –entonces paso por ti a las siete de la noche.

—Si –contesto saliendo de la oficina dando brinquitos. Mientras camino voy pensando en que ocupar esta noche. Que miedo.

Llega la hora estoy en mi casa poniéndome los aretes y tocan el timbre, doy un suspiro y me plancho con las manos el vestido blanco que traigo puesto, uno de manga larga con un ligero escote y con un hebilla que hace que se vea como un cinturón, nunca lo había ocupado. Salgo y el voltea y sonríe.

—Woow, no creí verte así, te ves hermosa. ¿Nos vamos?

—Si –digo colgándome de su brazo. Me abre la puerta de copiloto y me subo, lo veo cruzarse, me seco un poco las manos el sube y empieza a manejar.

Llegamos a un restaurante grande y hermoso, grande y adornado con árboles y luces.

Nos adentramos y vemos a un par de señores con traje. Ellos se levantan de la mesa y Aarón me extiende la silla para que me acomode.

—Vaya, creo que no hablaremos de negocios esta noche –dice uno de los ejecutivos de la mesa, todos ríen y me ven.

La noche sigue….

—Bueno creo Aarón que ya es tiempo de hablar de tu ascenso –lo miro un poco desconcertada.

—No creo que sea el momento, lo hablaremos mañana en la sala de juntas, no creo que sea un buen momento para hablar de negocios –él dice mirándome. No entiendo lo que pasa.

—Todos me miran —propongo un brindis –dice el señor que está enfrente de toda la mesa. —Por la gran mujer que traes Aarón y con esa belleza haremos un lugar mejor para nuestro país.

—Salud –todos alzamos nuestras copas y bebemos del champagne que nos trajo el mesero.

Uno a uno se va… mientras la pista se abre, ponen una canción tranquilita y el me extiende la mano, la tomo y nos dirigimos hacia el centro, yo me recargo en su hombro y el me sujeta de la cintura.  Conforme pasa la canción nos movemos de un lado a otro. Hasta que un violín deja de tocar y nos vemos a los ojos.

— ¿Nos vamos? –digo mientras agacho la mirada, como quiera pero es mi jefe y le tengo un cierto respeto.

—Sí, claro –tomamos la última copa de vino tinto que nos trajeron y nos despedimos.

Mientras salimos un chico pide su auto de Aarón Cuando estamos afuera nos subimos al auto. Él pone música — ¡Me encanta esta canción! –dice mientras la canción suena de fondo junto con mi risa. Llegamos en un parpadeo de ojos a mi casa. Entramos  y él se va tropezando. Creo que se pasó por unas copas.

—Sígame –le digo mientras agarro su mano. —Esta es su habitación –le digo mostrando una habitación que está muy limpia. —Bien, aquí está la cama, hay un televisor y ahí hay un baño. Linda noche –digo mientras le doy un beso en la mejilla.

— ¿Dónde dormirás tú? –dice jalándome el brazo.

—En mi habitación, si necesita algo, ahí me encuentra –el asiente y me jalo para que me suelte. Salgo de la habitación y me dirijo a la mía; toco la perilla y veo por último la habitación donde está el. Me meto a mi habitación, me pongo mi playera que me queda larga y prendo el televisor. Me desmaquillo y veo noticias. Me cepillo y me amarro mi cabello. Apago la tele y apago la luz. En eso tocan la puerta.

— ¿Mercedes?

¿Si? –pregunto al aire.

— ¿Puedo pasar? –se oye al otro lado de la puerta.

<<Diablos>> pienso. —Si pasa –termino de decir tapándome con las cobijas.

—No puedo cambiarle al televisor.

—Bueno… iré, pero necesito que cierres los ojos mientras corro a tu habitación  ahorita te digo que los abras.

El rueda los ojos y los cierra. Salgo de la habitación corriendo y le muevo al televisor. —Lo tenías en el canal incorrecto, ya está, cierra los ojos otra vez.

—Ciérralos tu ahora –murmulla a mi oído mientras me abraza por atrás apoderándose de mi cuello con sus suaves labios.

—No es correcto. –digo pero Aarón me da la vuelta

—Lo sé, pero no me importa. Soy consciente de lo que hago, y se lo que hago, y lo que hago es desearte desde hace mucho.

Nos vemos unos segundos y nos besamos apasionadamente. Yo cruzo mis piernas en la cintura de él, el me agarra del trasero y me dirige al centro de la cama.

Amanece y me saluda en la cama.

—Es tarde, me iré a bañar e iré a la oficina –digo.

—Si yo también, solo me cambio, ¿te importa que me vaya? –dice recordándome que no siempre termina en un final feliz.

—Ve, no te preocupes, te veo allá.

Lo veo irse y bueno…. Ya saben cómo acaba esto… al día siguiente llego una señora gritando ¿porque no llego su marido a dormir? Yo no sabía quién era hasta que me cayó el veinte que el único que paso la noche afuera, fue Aarón y no fue solo o con una desconocida… fue conmigo.

Más tarde presente mi renuncia, pero terminamos teniendo... bueno… ya saben… en su escritorio.

Y más tarde…. Termine poniéndole a una puerta de las tres habitaciones de la casa el nombre de mi primera y única hija “Layra”

Cuando nació no me dejaron registrarla con Lyra, me dijeron que no se podía, bla, bla, bla.

Así que se quedó como Layra… Aunque su padre quería que se llamara como La madre el… Flor.

¿Flor? Le voy a dar Su flor pero de cempaxúchitl por mentiroso y traidor. Me valí por mí misma, y conseguí un buen futuro para mi hija y porque no decirlo con una gran ayuda económica de su padre… más tarde fui a pedir la mensualidad de mi hija y me encontré a Aarón herido de bala en su casa…

—Esos malditos alemanes –dice su mujer saliendo de la cocina.

Y así fue como me entere que es un asesino y quise poner a mi hija a salvo… Pero fue en vano… un año perdido tratando de ponerla a salvo y ¿para qué? Bueno, su padre y yo llegamos a un acuerdo de no volver hacer esto y que nadie de enteraría que es hija de el por ninguna razón.

Hasta ahora todo ha ido bien, nadie lo sabe, yo tengo una relación maravillosa con Ricardo, un chico que llego como Becario a mi oficina y nos enamoramos… pero todos sabemos que jamás se olvida el primer amor.

Trato de darle un poco de espacio a mi hija, es adolescente y sé que necesitan su espacio, por lo regular siempre salgo con Ricardo o de viaje, ¡Ah! Como me encantaría ser joven y no haber cometido el peor error de mi vida y no, no es Layra, fue meterme con Aarón Preciado.

Maldita suerte la mía.

***

Canción: Hello Seahorse! - Al Fuego

Muchas gracias por leer, comenten y voten que en este espacio su opinión se respeta.

Continue Reading

You'll Also Like

7.4K 963 97
Ella era la hija ilegítima de la familia Gu de la ciudad N y una cobarde sombría a los ojos de todos. Era un genio incomparable en el mundo de las fi...
5K 370 22
Una alumna y una profesora. ¿Que podría pasar entre ellas? (...) • Se puede hacer adaptaciones y copias. (Dándome créditos)
38.2K 1.4K 30
Rf wally x. y/n esto podría contener: -contenido +18 -gore +imágenes en si contenido +18 son varias cosas delicadas así que no es necesario seguir...
68.5K 2.7K 38
Para él, bella era todo y más -Eres mi dahlia bañada en posesión. ¿Acaso es pecado tomar lo que me pertenece? ... -Tus labios me vuelven loco...