~"¿Infernal que habla?"~
-Oye, deja de verte como si estuvieras muerto estando en la oficina. Matas mis ganas de trabajar-Dije mirando a Arthur.
Entonces sonó el teléfono.
-Habla Arthur Boyle, Señor de Camelot, ¿Cuál es la naturaleza de su mensaje?.-Respondió Arthur al teléfono. Entonces Maki le dió un zape que hizo que se cayera, mientras yo no paraba de reír.
-Sí, ¿Un perro? Sí, muy bien....-Hablaba Maki-san.
Yo paré de reír y miré a Arthur.-Oye.-Lo llamé.
-¿Qué?.-Respondió mirándome.
-¿Por qué te volviste Soldado de Fuego?.-Pregunté curioso.
Él me sonríe.-Porque soy un Caballero.-Alguien agárreme que lo quiero golpear.
-Oigan, ustedes dos.-Nos llamó Maki-san, así que le pusimos atención.-Un perro se quedó atrapado en un árbol, y no puede bajar.-Informó.-¿Pueden ir a rescatarlo?.-
-¿Rescatar a un perro? ¿Eso no es para bomberos regulares?.-Eso es cierto.
-Las personas confunden a los Soldados de Fuego con bomberos regulares todo el tiempo.-Le respondió ella.-Vayan tranquilamente. Yo me encargaré del resto.-Dijo con una sonrisa amable, a lo que a Arthur se le iluminaron los ojos.
-Bien. Yo iré.-Me ofrecí.-Con mi habilidad, será fácil bajarlo del árbol.-Dije con una sonrisa.
Luego de un rato, llegamos al lugar del incidente y busqué con la mirada al perro atrapado.
-¿Eh? Ese no es un perro.... Es Mamoru-kun, ¿No?.-Dije al encontrar al "Perro".
-Cielos....-Dijo él sujetándose fuerte.
Luego de unos segundos, ya lo había bajado.
-Gracias.-Me agradeció.
-¿Qué hacías allá arriba?.-Pregunté confundido.
-Mientras distribuía globos durante una función en el distrito comercial algunos estudiantes universitarios del vecindario me hicieron "Arriba".-Explicó. ¿Por qué lo hicieron?.
-¿Por qué harían eso?.-Le pregunté aún más confundido. Noté que Arthur nos miraba interesado.
-¿Recuerdas los asesinatos en serie llevados a cabo por ese bombero?.-Dijo él.
-¿Eh?.-Me sorprendí, ¿Por qué un bombero haría eso? Se supone que su trabajo es salvar, no matar.
-Ese hombre era bombero, pero mató a cuatro personas en una juerga.-Comenzó a explicar.-Desde ese caso, el descontento de la gente por la Agencia de Defensa contra Incendios y los bomberos ha crecido, y aveces, nos molestan así.-
-Y, ¿Qué le pasó a ese bombero?.-Pregunté. ojalá lo hayan metido a la carcel.
-Su veredicto será anunciado hoy.-Me respondió.-Se dice que probablemente será declarado inocente, debido a razones psiquiátricas.-Añadió. Maldita sea....
Nos ofrecimos a ayudarlos para evitar que eso volviera a pasar.
Mientras distribuíamos los globos, vi algo. Unos chicos de uniforme, aparentemente de la edad que Shō debería tener actualmente.
¿Ese porte tendría?.
-¿Qué miras tanto?.-Preguntó Arthur mirándome curioso, yo desvié la mirada rápidamente.
-Nada....-Mentí. No sé si sea buena idea hablarle de esto a él, no aún.
-Mientes.-Maldito Caballero....-No te ves feliz.-¿Eh?.
Lo siguiente me sorprendió un poco más, ya que él puso su mano en mi hombro, como si quisiera hacer que me sintiera mejor, aunque de una manera sutil, ¿Desde cuando se preocupa tanto por mí?.
Entonces sonó la alarma.
-Ha aparecido un Infernal, vehículos de emergencia pasando, el trágico, por favor, manteneos fuera del camino.-Se escuchó por todo el lugar.
-¿Un despliegue de emergencia?.-Dijo Arthur.
Entonces vi al Matchbox de la octava pasar cerca.-¡El Matchbox!.-Dije para avisar a Arthur.
-¡Shinra! ¡Arthur! ¡Sé que están en el área! ¡Con que saliendo sin permiso, ¿Eh?!.-Se escuchaba la voz del Teniente por el lugar. Parecía estar enojado con nosotros, ¿Qué le había dicho Maki?.-¡Cuando lleguemos, serán disciplinados hasta que ya no puedan moverse más!.-Esto va a doler...
-¡¿Eh?!.-Exclamamos los dos al unísono.
-¡Mamoru-kun! ¡Sostén esto!.-Dije pasándole los globos que tenía en la mano y me elevé un poco en el aire.-¡Nos vemos, Arthur! ¡Me adelantaré!.-Le avisé comenzando a volar en la misma dirección que el Matchbox, pero unos segundos después sentí que algo pesado se sujetaba de mi cintura, giré un poco el cuello para ver y resulta que era él.-¡¿Qué haces?!.-Dije mirándolo.
-Llévame contigo.-Pidió mirándome como si fuera un niño pequeño pidiendo un dulce. Entonces, sin dejarme responder se agarró del cuello de mi uniforme y se montó sobre mí, lo que me hizo sentir algo..... Incómodo.....
-En serio.... Eres..... Honestamente....-Dije enojado con las mejillas ligeramente rosaseas.
Seguí volando hasta llegar al lado del Matchbox.
-¡Shinra! ¡Arthur! ¿Qué hacen? ¡Es una vía pública!.-Dijo el Teniente Hinawa mirándonos, pero sin dejar de prestar atención al camino.
-M-Más importante es que un Infernal apareció, ¿Verdad?.-Dije nervioso notando su enojo.
Él asintió.-Un acusado de asesinato en el Tribunal del distrito Ueno se ha convertido en Infernal. Aparentemente está atacando a las personas.-Informó devolviendo su mirada al camino.-¡Ustedes dos, adelántense a la escena!.-Nos ordenó.
Hice caso y aumenté la velocidad de mi vuelo.-¡Entendido!.-Dije.
Luego de unos minutos llegué a la escena. El maldito estaba agarrando al que parecía ser su abogado de los dientes.
-¡Detente!.-Dije soltando a Arthur y echándolo a volar de una patada, aunque de paso también pasó lo mismo con Arthur, pero lo bueno es que no se hizo ningún daño.
-¿Pero qué demo-?.-Escuché decir al Infernal, aunque Arthur lo interrumpió con un golpe en la cara. En ese momento me sorprendí un poco por su fuerza, pero no le tomé mucha importancia. Espera, ¿Cómo es que el Infernal está hablando?.
Ambos nos acercamos rápidamente hacia él y le pateamos en la cara.
-¡¿Cuál es su maldito problema?!.-Dijo enojado.
-¡Por tu culpa, Mamoru-kun terminó encima de un árbol!.-Dijo Arthur.
-¡Así es!.-Lo apoyé, pero luego analicé lo que dijo.-¿Eh? ¿Esa es la razón?.-Dije. Bueno, tiene algo de sentido, pero no es lo más importante ahora.
-Ya veo. Son Soldados de Fuego Especiales. Son de la banda de asesinos y falsos ayudantes, ¿No?-Dijo mirándonos.-Qué bien. Estoy celoso~.-Dijo relamiéndose los "Labios".
-¡Nosotros también estamos aquí!.-Se escuchó la voz de Maki cerca.-¡Sputter Comet!.-Y entonces vimos una especie de bola gigante volando a gran velocidad hacia el Infernal, pero este logró bloquearla y destruirla.-¡¡¡Sputter Comet-san!!!.-Dijo al ver que lo la había destruido.
-Es cierto que cuando el apego a la vida y la voluntad son fuertes, el carácter de los Infernales en vida aún permanece, pero nunca había visto algo parecido.-Dijo el Teniente llegando a la escena junto al Capitán.
-Entonces no hay forma de escapar, ¿Eh? ¡Está bien! ¡Me rindo!.-Dijo el Infernal al ver que lo habíamos rodeado, pero algo no cuadraba aquí, algo me dice que no está siendo honesto.-Fui declarado inocente en el juicio. No pueden matarme, ¿Verdad?~.-
Entonces le dispararon, pero él logró bloquearlo.
-Desafortunafamente, no soy tan bueno como para perdonar a una basura como tú.-Dijo Hinawa con una pistola.
El Infernal rió ante lo que dijo.-¡De verdad son una banda de asesinos!.-Dijo comenzando a atacarnos. No podíamos verlo correctamente por el fuego, pero si se logró ver que escapaba saltando entre los edificios.-¡Mataré a las personas de la misma forma que ustedes matan Infernales!.-Decía mientras saltaba.
-¡Ve tras él, Shinra! ¡Eres el único que puede alcanzarlo!.-Me ordenó el Capitán Ōbi.
-Pero él.... Está consciente....-Dije.
Ōbi suspiró.-Él ya no es humano. Sé lo que sientes, pero....-.-Fue interrumpido.
-Capitán.-Dijo el Teniente levantando la mano para hablar y me miró.-Shinra.... No prestes atención a lo que dice. Elimínalo.-Me aconsejó poniendo su mano en mi espalda para animarme.-¡Bien, ve!.-
Yo le hice caso y me puse en posición para luego comenzar a volar diguiéndolo.
El combate entre nosotros duró unos minutos, pero justo cuando lo tenía en la palma de mi mano, se interpone una mujer mayor que yo entre nosotros.
-Quinta compañía de la Fire Force Especial, Capitana, Princess Hibana.-Dijo la mujer presentándose con un abanico en llamas en su mano.-La quinta eliminará a este Infernal.-Añadió.
Entonces, atraparon al Infernal con un chaleco de fuerza.
-¡¿Qué es esto?! ¡Suéltame!.-Decía el Infernal tratando de liberarse.
-¡Llévenselo!.-Ordenó la "Princess Hibana".
-¡Espera! ¡La octava lo pondrá a descansar! ¡No se metan donde se les dé la gana!.-Intenté dentenerla.
-Soy una Capitana. Me desafías.-Me advirtió.
-¡No eres mi superior!.-Dije sin hacerle caso. Entonces sentí que no podía seguir manteniéndome de pie y caí al suelo en contra de mi voluntad. La miré digicultosamente.-¿Qué hiciste....?.-Dije con dificultad.
-Grava de bajo nivel de la octava.-Me insultó.-La grava debe quedarse en la tierra como grava. Es suficiente de tu "Concentración, concentración, concentración". La única vez que haces un sonido es cuando yo te pise, grava.-Dijo poniendo su pie en mi cara.-Lámelo.-Me ordenó.
-Ustedes los de la quinta son bastante engreídos, ¿No?.-Gruñí bajo, rehusándome a hacerle caso.
-Te dije que lo lamas.-Dijo mirándome de una manera altiva.
-¡Te hablo en serio!.-Dije sin hacerle caso.
En ese momento noté que estaba en un lugar en el que podía ver claramente sus..... Desvié rápidamente la mirada. Era incómodo. Ella también pareció notarlo, ya que se alejó.
Estaba mirando el suelo cuando escuché lo siguiente.
-¡Conténganlo!.-Ordenó ella. No sabía a qué se refería hasta que sentí que me tomaban de los brazos y las piernas.
Entonces vi a uno de los miembros de la quinta empujar a un niño que estaba cerca, lo que hizo que me dieran ganas de patearle la cara.
-¡Oye! Se supone que los Soldados de Fuego mantengan a salvo a las personas, ¿No? ¡¿Qué Demonios hacen ustedes los de la quinta?!-Dije enojado.
-Es un niño que cayó de trasero, no es que se haya quemado.-Me dijo una de las mujeres que me estaba conteniendo al oído.
Iba a echar a las chicas que me sujetaban a volar con mis llamas, pero entonces noté que alguien las había alejado con su espada.
-¡¿Uh?!.-Exclamaron ellas alejándose.
-No voy a dejar que alguien más le haga daño al Demonio.-Escuché una voz conocida.
-¡¡Arthur!!.-Dije sin darme cuenta de que estaba sonriendo.-¿Dónde están los demás?.-Pregunté mientras me levantaba.
-Vienen en camino.-Respondió sin mirarme. Deben haber tenido algún problema y lo mandaron a él. Aunque parecía enojado.
Entonces yo miré a la mujer que había bromeado con lo del niño.-¿Bromearías sobre un niño quemándose?.-Dije también enojado.-Les mostraré lo que es un Soldado de Fuego, ¡Vengan, Quinta!.-Dije desafiante.-¡Yo, Shinra Kusakabe, Soldado de Fuego de Segunda Clase de la Octava, los enfrentaré!.-
-Esto es interesante~.-Dijo Hibana.
-¡¡Shinra!! ¡¡Arthur!!.-Escuché la voz del Capitán detrás mío.
El Capitán intentó calmar un poco el ambiente y luego de eso nos quedamos hablando unos minutos con la Quinta, intentando convencerla de que había que poner a descansar al Infernal, pero se rehusaban a soltarlo.
-Es inusual que un Infernal esté consciente como este. Sería un desperdicio eliminarlo.-Respondió la Capitana de la quinta.-La quinta lo asegurará.-Añadió.
-Esta es jurisdicción de la octava, ¿No crees que estás siendo presuntuosa?.-Le dijo el Capitán Ōbi.
-En el momento en el que se Infernalizó, se convirtió oficialmente en fallecido, y ponerlo a descansar lo devolverá a cenizas. En ese caso, no veo problema en tomar su cuerpo como está.-Respondió ella.-Además, la octava es una instalación nueva,por lo que no tienen equipo científico.-Añadió.
-Una instalación con un Capitán que ni siquiera tiene una habilidad de ignición, vaya inútil.-Dijo uno de los de la quinta mientras se reía burlándose de mi Capitán.
Entonces, Arthur y yo nos acercamos a él, y yo lo agarré del cuello de su uniforme.
-¡¿Quién te crees tú?!.-Lo defendió Arthur.
-¡¿Tienes alguna idea de la valentía que hay que tener para enfrentar a los Infernales sin tener habilidades de ignición?!.-Dije enojado. Estábamos a punto de golpearlo, pero Maki nos detuvo y nos dijo que volviéramos con los demás.
Le hicimos caso, pero ese chico siguió riéndose, y entonces vimos que Maki-san de golpeó fuertemente en el estómago.
-Chicos.-Nos llamó nuestro Capitán, a lo que lo miramos.-Gracias.-Dijo con una feliz sonrisa.