XOXO, Blogger Girl ©

By EMMolleja

1.6M 102K 16.4K

Pequeña sinopsis: Nina Landfield es una chica que escribe libremente bajo en seudónimo de "Blogger Girl" en l... More

Sinopsis.
Prólogo: Entrada: La popularidad en general.
Capítulo 1: El e-mail de Ryan Hamilton.
Capítulo 2: RE: La popularidad en general.
Capítulo 3: Ridículo y desesperado destino.
Capítulo 4: Baby you can drive my car.
Capítulo 5: La conversación del cabello de Penny Lane.
Capítulo 6: Duckie + Fiesta= ?
Capítulo 7: "Chica Rebote".
Capítulo 8: La raíz cuadrada de dos.
#PrayForVenezuela. Comunicado.
Capítulo 10: A veces el que no arriesga, también gana.
Capítulo 11: Friday Night Lights.
Capítulo 12: Entrada: Una corta reflexión a Sherman High.
Capítulo 13: Nuevas Iniciativas.
Capítulo 14: Archibald Finnigan y el Mural.
Capítulo 15: El día no tan habitual.
Capítulo 16: Tres chicos y una Nina.
Capítulo 17: Circunstancias Complicadas.
Capítulo 18: El día después.
Capítulo 19: Donde todo comenzó
Capítulo 20: El punto sin retorno

Capítulo 9: E-mail de desahogo social.

72.1K 5.1K 633
By EMMolleja

Kate, Kate, Kate, Kate. Sabía que había sido ella la de la nota en mi casillero, pude darme cuenta luego, mientras estábamos en la clase de Cálculo, sus ojos se mantuvieron siguiendo cada movimiento que yo hacía, inspeccionándome, espiándome, o simplemente esperando a que saliera corriendo intimidada. No, no estaba intimidada, la nota de Kate no me asustó, solo me preocupó, ya que sabía que ahora “la pequeña cara de rata” que estuvo en la fiesta con Ryan anoche, sería la atracción de las miradas el día de hoy.

Y no quería eso, para nada.

Salí del aula tan pronto la campana sonó. Las miradas me agobiaban. Literalmente, todos en la clase estuvieron examinándome con la mirada las dos horas completas. Podía leer sus mentes: “¿Quién se cree que es esa para andar involucrándose con Ryan?” “¿Cómo ella puede ser la nueva chica de Ryan?” “Kate la hará pedazos, de seguro” “Su cara de rata es en verdad horrible. Pobre chica”. Triste, pero probable.

Las porristas pueden actuar intelectualmente pobres en muchas situaciones, pueden fingir ser tontas para los estudios, para conseguir chicos y para hacer caso omiso de ciertas cosas. Menos para la venganza y la humillación. Para la venganza y la humillación, pueden llegar a ser tan astutas y hábiles que asusta.

Como en el momento en el que quise encaminarme hacia mi casillero, y Libby Murphy “accidentalmente” colocó su pie en mi camino e hizo que mi cuerpo saliera disparado hacia delante y mis libros cayeran sobre el suelo, junto a mí.

Un coro de risitas femeninas hizo que frunciera el ceño, sin moverme, ni mirar a nadie. Empeoraría las cosas si mirara a alguna de ellas, no quería confrontación, por lo que me quedé muy quieta.

—Nina, ¿qué pasó? —Escuché a Duckie decir cerca de mí, más esperé que se inclinara y me ayudara para poder mirarlo a la cara.

—Tropecé —mentí, tomando mis libros de sus manos—. Estoy bien.

—¿Segura? —preguntó mirándome con preocupación.

Asentí con la cabeza, levantándome del suelo una vez que recogí todos mis libros.

—Bueno... vine porque necesito hablar contigo de algo —dijo, comenzando a caminar junto a mí por el pasillo. Ignorando las miradas de la gente—. Sé que tienes tiempo, una hora, para ser exacto.

Tenía razón, una hora libre, para ser exacta. Olvidaba que él sabía mi horario y el de las chicas de pies a cabeza.

—¿Acerca de qué quieres hablarme? —le pregunté curiosa.

La verdad es que ya tenía una idea de por dónde iba esto. Duckie es lo suficientemente predecible como para saber que lo que quería hablar conmigo trataba de Ryan Hamilton, o algo relacionado con él.

—Ryan —me contestó, empujando sus lentes de nuevo en su lugar—. Nina, no quiero que lo tomes como “un gesto desesperado de Duckie para que me dé por vencida con Ryan”, quiero que lo tomes mejor como... “un gesto cuerdo de Duckie para recordarme el propósito de mi otra identidad”.

Detuve mi paso, y me volví hacia él, incitándolo a que continuara.

—Bien, he... —Él se acomodó el peso de su mochila con nerviosismo—. He estado dándole vueltas en Computación, y lo que te quiero decir es que, sé que no te gusta llamar la atención, y que creaste a BG porque precisamente no querías llamar la atención, así que, Nina, quiero que pienses un poco, ¿sí? Mira lo que pasó solo porque te vieron hablando con Ryan una noche, esas chicas te enviaron una nota amenazante, y sé también que no te acabas de “tropezar”, sé que fueron ellas. Estoy preocupado por ti, ¿bien? Piensa, sabes que tengo razón cuando te digo que si no te alejas ahora de ese chico, hasta la identidad de BG estará en peligro. No creo que un chico sea más importante que lo que has venido construyendo desde hace tiempo, ¿o sí?

Sus palabras me despertaron como un balde de agua helada. Bruscamente, de un solo tirón, sin piedad. Todo lo que dijo fue cierto. De principio a fin. Duckie tenía la completa razón. Odiaba que Nina Landfield estuviera llamando tanto la atención y haciendo un alboroto en Sherman High, odiaba que las porristas comenzaran a tenerme como blanco de humillación, y temía que BG se derrumbara ante mis ojos. Mi identidad significaba todo.

—Yo solo quiero protegerte —inquirió Duckie, podía notar en sus ojos que estaba siendo sincero.

—Lo sé —Traté a duras penas en sonreírle—. Y tienes razón.

Él me devolvió la sonrisa y le dio un cariñoso apretón a mi brazo.

—Gracias por decírmelo —Me acerqué y besé su mejilla—. Iré ahora a mi casillero, nos vemos en el almuerzo.

No esperé respuesta de su parte, me di la vuelta y comencé a caminar lejos, con lágrimas picando en mis ojos y el pecho dolorosamente apretado.

Odiaba... que Duckie tuviera razón.

Me sentía perdida, triste y sin ningunas ganas de escribir.

La necesidad de levantarme del césped y caminar hacia el campo de fútbol me carcomía, pero ir allí significaba Ryan, y Ryan significada Kate, y Kate significaba atención, y atención significaba problemas. Así que por eso me encontraba sentada bajo el gran árbol de la mesas al aire libre de la cafetería.

Las chicas y Duckie quisieron quedarse a acompañarme en mi “tiempo de inspiración” después de clases, pero rechacé sus ofertas. Necesitaba estar sola. Ellas aún no sabían acerca de mi conversación con Duckie, se los diría después, cuando estuviera segura de cómo lidiar con esa horrible presión en el pecho que había estado sintiendo luego de que él me dijo todas esas cosas.

Me era imposible inspirarme en mi “tiempo de inspiración”. No sabía si se debía al cambio de lugar o que mi cabeza estaba llena de muchos asuntos que no dejaban que mi inspiración funcionara normalmente.

Quería irme casa.

Llamé a mamá para que me recogiera cuando ya no se me ocurría más nada que hacer que rendirme por la tarde. Me tomé mi tiempo en caminar hacia el aparcamiento, sin poder evitar pensar en Ryan todo el rato. ¿Estaría preguntándose por qué Nina Landfield no apareció en las graderías como todos los días? ¿Se enteraría de la nota amenazante de las porristas? ¿De mi sobrenombre nuevo “Pequeña cara de rata”?

El ridículo y desesperado destino volvió a hacer su jugada en cuanto llegué al aparcamiento, y vi que los Guepardos se encontraban ahí, con las porristas. Había olvidado que los lunes los entrenamientos acaban temprano. Fue mi tonto error.

Mamá todavía no llegaba, y no sabía dónde esconderme. Ryan entablaba una animada conversación con Adam, Kevin y Cody Hallen, así que vi la oportunidad de escabullirme sigilosamente hasta la salida sin que nadie me viera.

Sin embargo, porque es el destino, y el destino al parecer quiere acabar con el orden natural-escolar, Ryan logró verme, no sé cómo, pero lo hizo, y en menos de un minuto, sin poderlo detener, él ya estaba caminando hacia mí.

Miré a los lados. Las porristas se voltearon, la mitad de los Guepardos también. Kate se me quedó mirando fijamente como en Cálculo. Y yo solo quería salir ilesa de la escuela.

—Hey, Nina —me saludó, parecía aliviado por algo—. Pensé que algo había ocurrido cuando no te vi en las graderías hoy. ¿Por qué no fuiste?

—No me sentía bien —Ya eran dos mentiras en un día, esto se volvía enfermizo.

No debía estar hablando con él. No debía estar hablando con él.

—¿Estás enferma? —Su rostro se llenó de preocupación.

Tragué saliva con fuerza. La mirada de Kate comenzaba a hacer un hueco imaginario en mi frente.

—Debes irte —le espeté, bajando la cabeza bruscamente, ocultando mi profundamente entristecido rostro de él.

—¿Qué? —preguntó, sonando algo herido y confundido.

—Debes irte —Esta vez lo dije con mayor firmeza—. Tus amigos esperan.

Él se dio la vuelta hacia ellos por un momento y pilló a las porristas mirándonos.

—¿Hay algún problema? —Su voz sonó disgustada—. Porque ayer todo parecía estar bien.

—Ayer fue ayer —Eso había sonado tan cruel, que no podía creer que yo lo acababa de decir. Me dolía a mí más que a él, creo—. Y gracias por ayudarnos, fue generoso, pero ahora deberías volver allá.

—¿Qué? —El hecho de que lucía completamente desconcertado, lo hacía mil veces más difícil—. Nina, ¿acaso pasó algo?

Mordí mi labio con tanta fuerza que pensé que me sacaría sangre.

Esto tenía que terminar, pronto, rápido, como cuando te deshaces de una bandita. De un solo jalón. Ryan Hamilton tenía que separarse de Nina Landfield cuanto antes, en primer lugar nunca debieron conocerse.

En ese oportuno momento, el auto de mamá aparcó a unos cuantos metros de nosotros. Al rescate, gracias a Dios.

—Tengo que irme —me despedí rápidamente—. Adiós, Ryan.

—Pero... —No me molesté en escuchar más, casi corrí hasta el auto y me adentré en el asiento del copiloto, dando un portazo.

Respiré hondo un par de veces cuando ya estaba lejos de las miradas.

—¿Quién era ese chico? —me preguntó mamá.

—Ryan —le contesté en voz baja, encogiéndome en el asiento.

—¿Ryan? ¿Como Ryan El Chico Que Te Gusta?

—Si, ese Ryan —Luché para que el nudo en mi garganta no me delatara.

Ella pareció no notarlo o lo ignoró, ya que simplemente puso en marcha el auto y no hizo más preguntas.

—Aquí tienes, cariño, sigue con tu trabajo —Papá dejó la taza de té sobre mi escritorio y le dio un apretón a mi hombro. Sin querer interrumpirme por más tiempo, besó mi cabello en forma de despedida y abandonó la habitación.

Mi excusa para no bajar a nuestro Lunes de Películas de Romance fue que tenía muchísima tarea qué realizar. Me sentía indispuesta. Adoraba los Lunes de Películas de Romance, de por si eran mis favoritos luego de los Sábados de Películas Basadas en Libros, pero hoy no quería saber nada de romance, hoy el romance me daba náuseas, me entristecía en vez de fascinarme.

La expresión confundida y herida de Ryan aún no abandonaba mi mente, ni siquiera cuando quise poner toda mi atención en la próxima entrada de Blogger Girl. Definitivamente estaba padeciendo un severo caso de desamor. Y era de lo peor.

Pensé en llamar a Tessa y a Penny Lane para que vinieran y así distraerme en algo más, pero luego papá y mamá sabrían que mi encierro no se trataba de que “tenía muchísima tarea qué realizar”. Las preguntas no tardarían de bombardearme.

Solo éramos mi laptop, mi bloc de notas y yo por esta solitaria tarde de un lunes por la tarde.

Leí un poco de Emma, organicé los discos de vinil en orden de lanzamiento (usualmente los cambió de posición cada semana. Una semana por orden alfabético, otra por género, y otra por lanzamiento). Es una manía mía para lograr despejar mejor la mente. Esta vez eso no funcionó.

Entonces decidí entrar al correo de BG a responder e-mails de los aficionados.

Mi corazón dio un vuelco al ver que Ryan le había enviado otro e-mail a Blogger Girl.

De: RyanH_ShermanCheetah@gmail.com

 Para: BloggerGirlContact@gmail.com

Asunto: E-mail de completo desahogo social (¡EXPLÍCITO!).

Aquí pondría una buena y educada introducción, saludándote y preguntándote cómo te ha ido desde la última vez que nos escribimos, pero creo que estoy lo suficientemente enojado como para escribir formalmente (no te asustes, no es por ti que estoy enojado, no te lo tomes personal).

Además de con mi mejor amigo Adam, también quería desahogarme contigo, ni siquiera con él pude ser 100% explícito, ya que entonces iba pensar que necesito ayuda mental o algo así.

¿QUÉ ES LO QUE LE PASA A LA GENTE? ¿Qué mierda le pasa a cierto tipo de “gente”? Estoy enserio furioso, aunque, más que eso, me siento tan frustrado que me enfurece. Y no, no exagero, no estoy exagerando —eso me dijo Adam—, solo siento que es totalmente inaceptable el comportamiento de cierto tipo de gente.

Me imagino que ya sabes las dos noticias recientes acerca de mí: 1) Terminé mi relación con Kate. 2) Presuntamente salgo “con una chica que luce de 15”. Todo el mundo en Sherman está al tanto de eso, así que ya debes saberlo de antemano.

En fin, mi furia se debe a que cierto tipo de “gente”, se atrevió a intimidar a esta tan inocente y dulce chica, por el simple hecho de que somos amigos, y me agrada (luego de mi explícito desahogo, te hablaré de ella, enserio quiero hacerlo).

Y BIEN, REPITO, ¿QUÉ ES LO QUE LE PASA A LA GENTE? ¿Por qué es tan importante humillar a una persona? Sobre todo, a una persona que no hace nada más que tratar de pasar desapercibida. Me parece injusto, cruel... ¡Enfurecedor! Argh, esas chicas son enserio viles y patéticamente imprudentes.

Espero que esto no cambié tu imagen de mí. Estoy escribiendo el primer disparate que se viene a mi mente, sin cambiar nada, solo dejándolo todo salir.

Uff, tengo un montón más de cosas qué decir, pero tengo miedo a que enserio cambies tu imagen de mí, así que mejor terminaré con el desahogo y pasaré al otro tema. No quiero espantarte.

BG, ¿alguna vez has sentido que cuando conoces a alguien por primera vez, te da una inexplicable sensación de calidez inmediata? Esta vez fue increíble, instantáneo, hubo algo en esa mirada que me hizo sentir extraño —de manera agradable—. Me agrada, y me agrada aún más sabiendo que no es ese tipo de chica que busca popularidad. Creo que huye de ella.

No sé si la conoces, su nombre es Nina Landfield, está en último año y es bastante linda, rubia, cabello liso, ojos saltones, azules como el cielo, es delgada y muy, muy tímida. Si la conoces, ¿me hablarías sobre ella? Quisiera saber más, pero como lees, cierto tipo de gente está tratando de ahuyentarla, y ahora no quiere hablar conmigo.

Mejor lo dejo por hoy, el enojo está volviendo otra vez. Pero piensa en mí descripción y me dices si la conoces, ¿harías eso por mí, cierto?

Fue bueno enviarte esto, estaré —como siempre—, esperando una respuesta de tu parte, que —como siempre— llega eventualmente.

Perdón de nuevo si fui muy explícito con mi desahogo.

Espero leerte pronto, Blogger Girl.

El mariscal enfurecido (ya no tanto),

Ryan Hamilton.

Pensé que al terminar de leer el e-mail tendría un ataque de ansiedad, la respiración se me agitó, el corazón se me aceleró, pero inmediatamente intenté calmarlos a ambos. No debía permitirme emocionarme tanto. Si, dijo lo que dijo, y de alguna manera fue lo más hermoso que he leído, pero eso no cambiaría nada.

Ryan Hamilton dijo que le agradaba Nina Landfield.

Pero Nina Landfield no podía estar en el mundo de Ryan Hamilton.

Por el bien de todos.

Nota de la autora: Sin comentarios en este capítulo xD, toda una montaña rusa. Saquen sus propas conclusiones con respecto a Duckie, ¿quién está de acuerdo con lo que dijo? ¿quién no lo está?

Me despido, no olviden comentar, chiquillas/llos.

Besitos ;)

   

Continue Reading

You'll Also Like

29.5K 2.1K 12
LIBRO TRES DE LA SAGA ÁMAME. Summer ha estado enamorada de Nikolai desde que tiene memoria, ella siempre ha estado consciente de que nunca pasaría a...
400K 48.1K 66
Meredith desde que tiene uso de razón, conoce la existencia de Darek Steiner, aunque ha estipulado una regla bien marcada en su vida: NO ACERCARSE A...
3M 177K 105
Libro uno de la Duología [Dominantes] Damon. Un hombre frío, amante de los retos, calculador... decidido. Se adentra en un mundo desconocido, donde l...